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Hyunjin había llegado a casa a dejar todo el equipaje, la verdad no es que no quisiera ir a casa de las betas si no había algo que le angustiaba más que ver a sus amigos. Y ese era Jisung quien vivía imprimado de Hyunjin desde que tenía dieciséis años y se conocieron en la academia, para Jisung se habían vuelto insoportables sus celos sin la compañía del alfa, en este tiempo que Hyunjin había estado fuera del país con Minho, el alfa sabía que Jisung estaba muriendo debido a que la imprimación es mucho más fuerte y dolorosa que una marca por un lazo. Si el omega después de un tiempo seguía sin sentir al alfa, él omega podía morir. Jisung creía que ya tenía al alfa, creía que Hyunjin estaba superando a Minho hasta que recibió esa llamada de Chan suplicando que recogiera a Minho del edificio departamental del alfa y que lo protegiera, desde ese momento las cosas se estaban volviendo difíciles para Jisung pues cada vez sentía más alejado al alfa y podía sentir cierto tipo de rechazo, eso causó un severo episodio de depresión en el omega que lo estaba matando, a lo largo de ese año en el que el alfa estuvo fuera del país los celos de Jisung se habían vuelto dolorosos el auto consuelo, ni supresores, ni pasar el celo con otros alfas ayudaba un poco en el dolor, Jisung sentía que estaba muriendo en vida.

Jisung esperaba al alfa en su casa, una noche antes de volver a Corea habían hablado y Hyunjin prometió que lo primero que haría al llegar sería ir a verlo. Jisung estaba recostado sobre su cama, las cosas se estaban complicando, el omega podía morir en cuestión de días.

El alfa llegó lo más pronto que pudo, ni siquiera tocó, entro directamente hasta donde se encontraba el omega reposando.

- Jisung - el alfa se veía devastado, tenía los ojos rojos e hinchados - Jisung aquí estoy - el alfa se recostó a un lado del delicado cuerpo del omega.

- Estás aquí, si veniste - el omega lo miro con una sonrisa en los labios.

-Debiste haberme dicho de esto antes, Jisung - le reclamó el alfa - ¿Cómo pudiste simplemente ocultar el echó de que te estás muriendo? - acurrucó su rostro en los hombros del omega sollozando.

- Tenías que vivir tu vida, estabas recuperando a tu ex novio. Yo fuí la razón del porque terminaron, no podía hacerte más daño, Hyun - consoló el omega.

-Jisung, Minho no me quiere, sin importar cuánto me esfuerce lo he perdido, lo perdí hace tiempo - Se quedó en silencio un momento - Así debes sentirte - se lamento.

- Lo siento Hyun, fue culpa mía.

- No Jisung, deja de culparte de todo - pidió el alfa - Yo decidí hacerlo.

El omega acariciaba la melena rubia del alfa, podía entenderlo justo así se sentía él desde que tenía dieciséis, sin importar lo mucho que se esforzará, Hyunjin lo veía de la misma manera en la que él deseaba.

- No quiero perderte - lloró el mayor - Debe haber una solución, Ji

- Si la hay, pero...

- ¿Pero qué?

- No quiero obligarte o que te sientas con la responsabilidad de hacer algo que no quieras.

-Jisung...

- Descuida, estaré bien

- Dime ¿que es? - suplico el alfa.

- Una marca, no una espiritual como lo es la de la imprimación, una marca real. Reconocernos como compañeros.

Hyunjin no dijo nada, pero pensó en lo que dijo el omega.

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Chan estaba estacionado fuera de la casa de Minho, después de haber hablando un poco llegaron al acuerdo de que tendrían unas salidas junto a Jeongin para que lo conozca más y también podría dejar que el cachorro se fuera unos días a casa de Chan para que conviviera más con el alfa.

HeartbeatDonde viven las historias. Descúbrelo ahora