mini extra

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Un año atrás.

Después de terminar de leer absolutamente hasta el último documento en el maletín que Bongsu le había entregado pudo entender  que era lo que debía hacer, sabía que las amenazas de muerte no era banales si no en realidad su vida corría el riesgo, la suya y la de su cachorro. Minho salió de casa dispuesto a hablar las cosas con Bongsu, tenía que negociar, debía haber algo que pudiera hacer.

El omega salió de casa con los nervios hasta los talones, todo su cuerpo temblaba, podía sentir las gotas de sudor pesar en su nuca. El omega tenía miedo, no lo iba a negar, la simple mirada fría de la mujer era algo que ya le aterraba de ante mano, más no le mostraría nunca ese lado a ella, con ella él omega estaba decidido a mostrar su versión más fría y poco humana si la situación lo ameritaba. Al llegar a la oficina de la mujer todo el peso que había sentido anteriormente podía sentir como se duplicaba.

Los guardias fuera de su oficina lo anunciaron, Minho sentía que podía desmayar ahí mismo.

-Puede pasar, Joven Lee - el pelimorado asintió cabizbajo y entro a la oficina de la mujer.

Bongsu era una mujer atractiva, podía admitirlo cualquiera, pero aún con ese porte y esa apariencia tan pulcra no podrías llegar a pensar que se trataba de una mujer omega, podrías llegar a deducir, pensar incluso asegurar que se trataba de una mujer alfa o una mujer beta debido a los neutralizadores que usa para ocultar un poco su aroma, pero nunca imaginarias que Bongsu es una mujer omega.

Minho paso directo en dónde se encontraba la mujer firmando y leyendo algunos documentos que parecían de importancia, la mujer al verlo de pie sentado frente a ella le hizo una seña para que tomara asiento en la silla frente a ella.

- Me alegra verte, Lee - dijo enserio desde que descubrió que el Omega estaba preñado tenía ganas de saber cómo lo estaba llevando el menor, más se encargó de no mostrar ese entusiasmo frente a él.

- Yo no puedo decir lo mismo señora, hace poco fue a mi casa a amenazarme de muerte - protestó el menor. Ella le dedicó una sonrisa ladina.

- Si estás aquí supongo que es para negociar, no para tomar una taza de té ¿cierto? - el omega la miro fijo y asintió.

- A eso vengó - el omega confirmo.

- Entonces dime tu propuesta, Lee.

- Haré lo que usted pida, apartir de este momento haré lo que usted desee hacer a su voluntad - dijo frío - pero usted debe dejar a mi familia en paz.

- Muy bien, no es tan complicado. Mañana tomas un vuelo a Japón, no puedes hablar nada de esto con Christopher, no puedes comunicarte de ninguna manera con él. El no puede encontrarte - dijo la mujer con la mirada fría. El omega sintió miedo - Será así al menos por dos años - la mujer buscaba algo en su escritorio.

- No puedo hacerlo - dijo directo. La mujer le extendió unos pasajes de avión, esos eran dos - Señora no puedo hacerlo - el omega tomo los pasajes de avión - Deme dos meses, haré lo que usted pidió, no llamaré ni me comunicaré con el de ninguna manera, pero deme dos meses - la mujer lo miro fijamente.

- ¿Es por el cachorro? - Minho asintió.

- Pero ¿por qué me da dos pasajes? No entiendo.

- Deducelo tu mismo - dijo sin más la mujer y continúo haciendo lo que había estado haciendo este tiempo - Una cosa más Lee - la mujer quería morderse la lengua, pero esa era la situación y ella era la villana en la historia, no podía cambiar el rumbo sin afectar aquien más quiere - No vuelvas a decir que ese bastardo es cachorro de Christopher - la mujer miro fijamente al omega y pudo ver los ojos del menor llenarse de lágrimas, apartó su vista porque si bien ella mejor que nadie sabía que ese cachorro era el primogénito de su hijo SU NIETO, quiso arrepentirse de sus palabras, más no lo hizo.

- Estoy seguro de que usted mejor que nadie sabe que mi cachorro es hijo de Chris, pero si a usted le gusta fingir que no es así. Está bien, hagamos eso. Solo permita que su hijo pueda permanecer un poco más a él, ni siquiera ha sentido sus pataditas - las lágrimas no tardaron en salir empapando su rostro -Eso es lamentable.

Bongsu lo miro si bien a ella también le gustaría que su hijo pasará más tiempo al lado de su cachorro y su omega, más sin embargo más tiempo significaba peligro.

- Serán solo dos meses, antes de irte pasa a buscarme. Te daré todo lo necesario - Bongsu lo miro por unos segundos y luego se puso de pie - Deberías irte.

El omega se puso de pie y se retiró de ahí. Dejando a una Bongsu destrozada, ella no quería que su hijo la odiara más de lo que ya lo hacé. Protegería a ese omega porque no pudo hacerlo por Young.

HeartbeatDonde viven las historias. Descúbrelo ahora