Una suave brisa mecía mi cabello, mientras yo me encontraba sentada en la parte más elevada de la terraza de la escuela, sobre el techo de la entrada a este lugar. No me regañarán porque me encuentre allí. Si llego a resbalar y caer podría aterrizar sin problemas y, nadie me vería si eso llegase a pasar
Mis ojos se encontraban postrados en el horizonte, sin prestarle tanta atención a este. Miles de ideas recorrían mi mente, pero sobretodo la que más se repetía era...
─¿Hoy deberíamos de comer pollo o pescado? ─murmuré a mí misma con la imagen en mi cabeza de los varios platillos que se pueden preparar con dichos alimentos ─¿A mi hermano qué le gustará? ─pensaba de brazos cruzados.
Pasaron unos segundos pero aún no me decidía qué hacer. Saqué mi billetera del bolso que llevaba conmigo y revisé cuánto dinero llevaba encima. Cuando me dí cuenta que tenía suficiente para comprar ambas carnes, no esperé más y salté de donde me encontraba. Mientras mi cuerpo caía y el viento impactaba fuertemente contra mí, una gran masa de agua se forma de la nada, solo para transformarse en un gran dragón que a pesar de no tener alas, podía volar mejor que cualquier ave para atraparme en su lomo
─Gracias Marshall ─da un leve rugido en respuesta a la vez que se acomoda para partir ─Vamos al centro comercial que queda cerca que casa, al que vamos siempre ─ya estaba acostumbrado a ir, así que sin más dilación emprendió vuelo hasta aquel sitio
No sé de dónde nace Marshall ya que desde que tengo memoria siempre ha estado conmigo. Él y las demás bestias de agua que me acompañan dicen que el único motivo de su existencia es protegerme hasta que alcance mi etapa adulta... pero no entiendo muy bien a qué se refiere eso. Ya tengo dieciocho así que ¿eso no es la etapa adulta? Legalmente lo soy pero parece que ellos no lo reconocen. Ciertamente a pesar de haberme acompañado tantos años me doy cuenta de que no sé nada de ellos, y aunque les pregunte más no me dirán
Llegamos al lugar y Marshall desaparece en cuanto bajo de su lomo. Por cierto, no, nadie nos ve tanto a Marshall como a mí así que no hay problema. Si nos vieran seguramente seríamos parte de uno de esos videos virales de Internet de mounstros captados en cámara
Mounstro... eso diría la primera persona que pudiera verme
Observo la puerta del supermercado con una mirada triste, la mirada vacía que tengo cuando mi hermano o el abuelo no me están viendo. Alguna vez de pequeña tuve la esperanza de que en estos momentos, donde me siento tan mal alguien de repente tocara mi hombro y que al menos... al menos me preguntara el por qué pareciera que voy a llorar. Pero ya sé que eso nunca pasará. Por mucho que intente llamar la atención de la gente solo mi hermano y el abuelo serán los únicos que me acompañen
Siento como esa sensación de ahogarme otra vez, debe de ser por no sentirme bien así que sin vacilar veo el llavero que me dió mi hermano que llevo en mi bolso. Solo al verlo es cuando logro calmarme, porque me siento afortunada de al menos tener a una persona en este mundo que me quiera y se preocupe por mí
Ya dejé mis pensamientos atrás y me concentré en lo que debía, comprar el pollo y el pescado. Explicaré cómo hago esto sin robarle al dependiente. Primero espero a que pase una persona que lleve algo de lo cual pueda tirar y lograr que se caiga al suelo y así quede frente a la puerta automática. En el momento que recoge su pertenencia del suelo yo aprovecho la oportunidad donde las puertas se abren para entrar, porque estas puertas tampoco me detectan. Luego dentro, Merlisse, que es una medusa, guarda dentro suyo lo que queremos llevar, todo sin que nadie nos vea. Que por cierto, es en un lugar especial para que ninguno se moje con su cuerpo que está formado por agua también. Por último me acerco a la caja registradora y cuando está abierta y el dependiente distraído, coloco el dinero sin que nadie vea. Y ya, me voy utilizando la misma técnica para la puerta que al principio. Sé que parece bastante tedioso pero en realidad es un tanto divertido
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Monster ─Gojo Satoru
Romance"No hay peor ciego que el que no quiere ver". Mizuki no quiere reconocer lo que es, y que siendo ella un "monstruo", solo le hará daño a su querido hermano y a los que la rodean Eso es lo que les hacen creer quienes desean deshacerse de ella de inme...