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el clima parecía perfecto, el sol brillaba pero sin ser molesto para sus ojos, la calefacción hacía que el ambiente dentro del local fuera refrescante, eran casi las dos de la tarde y su turno acabaría en veinte minutos, pero lo estaba disfrutando, espera sinceramente que steve llegara tan tarde como siempre lo hacía, por una vez podría beneficiarle.

steve no había llamado ni una vez para avisarle si llegaría tarde o directamente no lo haría como siempre acostumbraba, pero no le preocupaba, sabía que estaba con eddie, steve le contó que se iba a quedar en su tráiler para algo que ya no recuerda.

robin cada vez estaba más segura de que esos dos podrían tener algo, quizás no fueran pareja oficialmente, pero si podrían gustarse mutuamente, es decir, lo aparentaban mucho.

pero ella no era chismosa, o bueno, no era metiche. no iría directamente a preguntarle a su mejor amigo si le gustaba el chico con el que estaba casi las veinticuatro horas de los siete días de la semana. ¿a steve si quiera le gustaban los chicos? que ella recordara no era así, pero quién sabe, su 'radar gay' a veces funcionaba y a veces no.

para su sorpresa, sus pensamientos fueron interrumpidos cuando la puerta se abrió, esperaba fuera un cliente, pero en su lugar se encontró con su mejor amigo, vestido con... ¿una camisa de hell fire?

─ hola.

saludó tranquilamente el castaño, la chica lo observó unos instantes, comprobando si realmente estaba viendo bien el logo en su camisa, y quizás también si veía alguna 'cosa rara' en su piel.

─ hola... ¿esa camisa es de eddie?

bueno, talvez si era un poco metiche, y poco discreta. el chico la observó unos segundos en silencio.

─ sí, me la presto, la mía está llena de mermelada.

respondió desviando nuevamente la mirada, se dirigió a la trastienda en busca de su chaleco del uniforme, robin no dijo nada más hasta que volvió ya con la prenda puesta, pero ella observó la camisa.

─ eddie nunca se quita esa camisa.

steve tragó saliva, ella no lo notó, lo observaba de pies a cabeza. la conversación no siguió, robin le entregó las llaves de la tienda y salió del local despidiéndose con la mano, el clima estaba horrible afuera.

 la conversación no siguió, robin le entregó las llaves de la tienda y salió del local despidiéndose con la mano, el clima estaba horrible afuera

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it's (not) a romanceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora