A millon men

57 2 0
                                    

Aclaracion de la escritura:

El titulo se debía a estar inspirado en la canción A million men de Melanie Martinez.

No contiene ningun shippeo

Por lo que recuerdo, este tiene en medio de toda la lectura los títulos de las canciones que estaba usando en ese momento. Algunas deberían estar marcadas, pero otras no.

______________

Gustabo había tenido un buen día de trabajo, los suficientes pavos como para pagar la renta y comprarse algunas cosas para la comida.

Al llegar a casa saludo al padre de Horacio, recostado en el sillón de dos plazas, borracho, claro que sí, pudo oler el alcohol en cuanto cruzo a la calle donde vivían. Fue corriendo a su cuarto y saco la lata que tiene debajo de la cama, saco el dinero que tenía dentro, junto lo que trajo y los contó. Eran más de lo que esperaba. Pensó si debería comprar algo, pero borro el pensamiento para seguir ahorrando.

Se tiró en cama, cansado y cerrando los ojos poco a poco. El olía a alcohol? A drogas? Cuántos perfumes tendrá combinados en su cuerpo? Se levantó de inmediato, caminó rápidamente en dirección del baño no sin antes ver a su hermano, dormido con la cobija solo cubrieldole el pecho. Se acerco para ponersela bien, desistió y dejo la puerta medio abierta para seguir momentáneamente su dirección.

Se dio una ducha, se seco y puso boxers. Salió y ahora sí entro al cuarto de su hermano, en silencio y de puntillas, acomodo la cobija y planto un beso en su frente. Quería llorar, como todas las noches. Tomo aire, dijo buenas noches y volvió a su habitación. Se tiró y vio la hora en su móvil, cinco con treinta y seis de la mañana. Tan lento va el tiempo? Horacio no despertaba en media hora? Deberia lavarse los dientes antes de dormir? Si, debería, sabe a hombres, muchos hombres.

Pero cae dormido y no despierta hasta las 10 de la mañana, revolotea en su cama para intentar volver a dormir y no llega a nada. Se rinde algunos minutos después para levantarse y desayunar cualquier cosa.

No encuentra a Horacio, ni a su padre.

Uno fue a trabajar, el otro a emborracharse más. Tomo leche cereales y un trazon, no podrá ser muy fan, pero come igual.

No tenían televisión, el único juego que tenían eran las cartas y los libros... No tenían ni eso, lo único que había eran los libros que tenía Horacio en la Secundaria, y ya, nada más.

Mejor salió, fue al gimnasio que tenía el parque a la otra calle de donde vivían. Tenia que ponerse fuerte, mientras más músculo tengas más te solicitan, mientras más te solicitan más dinero ganas. Así era el negocio. Se quedó un par de horas, una de ellas haciendo ejercicio, otra haciendo nada, mirando a la gente pasear con sus mascotas o mirando lo que los otros hacían para algún día (cuando tenga mas resistencia) hacer lo mismo. Nurses office (MM)

Después se tomó otra hora para correr, con una botella de agua casi a solo un par de tragos más llena. Era mejor parar ahí.

Le dio hambre en cuanto se detuvo, fue al primer badulaque que vio y se sorprendió de ver a Horacio, no debería, sabe bien que se encarga de ve der en un badulaque.

– Durando en el trabajo?

– hombre, pues claro. Un payaso se ha intentado robar antes unas gominolas, lo he dejado por pena. –Rie

– Menuda mierda.

Se acerca a los refrigeradores para sacar una botella de agua fría. Por el rabillo del ojo mira como entran unos hombres, no les mira bien, poco le importa, pero una vez que vuelve a ver a su hermano entiende.

– Este es un punto atraco gilipollas. Morph (TOP)

Un atraco no lo puedes dejar pasar, tampoco puedes luchar contra el. Solo sigues órdenes y esperas a la policía, un trato justo y que no te asesinen.

– Manos arriba –Hacen caso los dos, se miran de reojo, con una combinación de miedo y diversión por la situación– Pollo, déjalos detrás del mostrador y apuntarles bien, que no se escape ninguno.

– Si, Je... Pony –Rwsponde entre cortado, acercándose de a poco a Gustabo– Levanta Rubito.

– Soy teñido.

– Si?, no me digas

– Claro que sí, mira, que huele el tinte y todo –le hace -pof alguna razon- caso a lo que pide, se acerca de apoco a oler su cabello

– Tiene razón, no es rubio natural. –El atracador entiende la situación en la que lo ha dejado Gustavo y grita de inmediato– A VER, NO SE HAGA DL TONTO, MUÉVASE.

Sale corriendo, mientras exige tranquilidad y escucha como los otros dos -los supuestos Pato y Pony- comenzan sobre iniciar el robo y pensar que negociarán con la policía.

No sabe a qué llegaron, simplemente lo dejan junto a Horacio y este le maldice.

– Me diste mala suerte, cabrón.

– Como que cabrón? Hijueputa.

– Todo el dia había estado bien hasta que llegaste

– Pero tu eres quien trabaja en este lugar de mierda!! –grito con histeria.

– Callense o les pego un tiro –dijo Pato mientras le apuntaba a Horacio.

– Vale, lo sentimos –respondio el rubio de inmediato.

Después de ello solo escucharon al trio. Solo negociarán que no le hicieran nada al coche y una salida, suficiente para dos rehenes, pero si las cosas se volteaban, podrían dar todo el dinero porque -aparentemente- no lo necesitaban.

Sonaba como una completa incongruencias, por qué robas un badulaque si no necesitas dinero? Son idiotas? Les gusta el mambo? Son doblemente idiotas entonces?

Pero claro que no va ha preguntar nada, los hombres se están poniendo demasiado nerviosos por la tardanza policial Even Exist (rodezel). Empezaron a disparar al aire, un bala fue disparada en tres su pierna izquierda y la pierna derecha de Horacio. Todos dieron un grito ahogado cuando paso y los atracadores rieron mientras se disculpaban. Ya habían olvidado quieren era cuál, tampoco sabían cuál dio el disparo.

Al fin llegó la policía, estacionaron justo a los lados del vehículo y un hombre de traje fue el primero en salir de entre ellos, con cigarro en boca y ajustando su corbata. Los demás se veían como aburridos policías promedio.

El hombre de traje de apresuró a decir:

– Pinchen las ruedas –Los atracadores reaccionaron de inmediato.

– Quien coño se cree ? Con quien hablo? Dejen el coche, que con ese nos vamos, Piensa que es un juego? –Se vieron ridículos, todos hablando al mismo tiempo y asustados.

– Callen nenas. Menuda mierda de coche, piensan huir con eso? –Apaga el cigarro y se pone enfrente– Vale, pero tienen que negociar.

Negocian, solo con dos rehenes lo que habían dicho antes. La policía acepta. Pero algo que Gustavo sabe es que las cosas no acaban así, que aún hay mil cosas que los atracadores no están negociando y tampoco puede decir nada por verse muy sospechoso.

Cuando piensa que van a negociar botin, no ocurre. Simplemente pasan a la parte donde explican que los rehenes tiene que salir primero, que se fien de su palabra y que sin lugar a dudas los atraparan en persecución.

Los atracadores vacilan divertidos con esa afirmación.

Sale primero Horacio, espera que termine su cacheo y luego dale él. Mira detenidamente el coche de los atracadores, podría llegar bien tuneado a casi 200. Lo cachea el propio hombre de traje quien le pide su identificación, se la da, confirma que se llama Gustabo García "con b de bombon" añade y se atreve a preguntar.

– De verdad los va a atrapar? Tienen buen coche y tampoco les quitó botin. –Le devuelve su DNI.

– Claro que los voy a atrapar gilipollas, son unos pringaos, estarán fuera en cuanto arranquen. Los maricones se creen que están en Marbella, no negociaron nada de Robert o códigos 100.

Se alejo de el, fue con Horacio quien lo esperaba en el fondo del establecimiento a la derecha y miran toda la huida. Corren antes de que den la vuelta y miran como la patrulla descarrila al coche.

El oficial no mintió, será cuestión de unas calles para que acaben con ellos.

Vuelven al local y discuten la estupidez de los atracadores, la mala suerte de Gustabo -porque claro que el tiene la culpa-RIP 2 (the neighborhood) y quién llamará más tarde a la dueña del edificio para darle la renta. Gustabo, claro, pero nunca está mal discutirlo.

– Cuando trabajas? –Habian pasado casi tres horas juntos, discutiendo y pasando el rato, que no se dio cuenta del tiempo. Miro su reloj, 3:30.

– A las 4

–Tan temprano?

– Si, tengo que limpiar vasos y copas –Ropa, tangas– Sacar alcohol del almacén –Alcohol y drogas– Y debo practicar por la barra libre para "menores de 30" –Enfatiza con las manos, en realidad son mayores, mayores de 40 y no va a practicar solo la barra, también el tubo.

– Menuda mierda de pijos los que seguro van –Insulto al aire– a ver cuándo voy a ver cómo los soportas.

– Mejor no, te enferma solo ver cómo no te dan propina cuando les das de lo mejor. –Cuando les das un completo, termina satisfecho y luego te pagan por la mamada y algunos pavos más.

– Pues que se jodan, después de invito unas birras cuando sea rico por ser policía.

"Por supuesto" le dice antes de despedirse. Esta seguro de que sera policia, realmente lo está, pero tiene miedo de la pasta que gastará para que eso suceda. Tiene mucho miedo de lo que pase.

No vuelve a casa, va directo al metro para estar ya ahí diez minutos antes de llevarse cualquier bronca y busca la ropa del día para esos viejos. Calzoncillos rojos, prefiere. Sin camisa. Con algun delineado y pintura roja en la cara.

Limpia la ropa del día anterior y la dejo colgando. Saluda a sus demás compañeros, pocas compañeras -con fortuna y voluntariamente-. Va a ver a los vendedores quieres por algunas mamadas le darán lo que pida, se niega. Nada de eso es para el. Al final no compra nada, si quieren que se droge, que el cliente le de el dinero.

Revisa el licor de la barra como última revisión. Ya son pasadas de las 8 de la noche y tiene que empezar a vestirse. Corre para prepararse en el tubo antes de que abran y cuando va al maquillaje, piensa en su hermano y de cuestionar hacerse una mariposa, no, si fuera casual lo haría, no lo es. Al final se decido por semicirculos en la punta del ojo hacia fuera, en el espacio que los divide, un corazón.

– Es hora de abrir señores –Entran gritando a la habitación. Todos se apresuran, algunos corren a la puerta mientras les asignan un lugar para empezar, dan instrucciones y repiten que lo que pase en habitaciones privadas, callejones u hoteles no es cods suya –Bombon, eres el favorito, vas en el tubo especial.

El era Bombón, y el tubo que está en taburete, recubierto de rojo y con una luz roja encima es el especial. Aparentemente a sido muy solicitado ultimamente por los viejos que pasan a la barra y siendo su día, pues bueno, significa mucha pasta.

– Voy –se levanta y corre hacia ahí.

Sube y se cuelga un poco para prepararse, trota para hacer sudor, boquea, pide un vaso de cerveza que después tendrá que pagar, se da golpes en el rostro y pecho, cierra los ojos, inhala, exhala, se odia, empieza la canción de la noche y se abren las puertas.

[...] A million men (MM)

No pensó que obtendría tanto dinero ni siquiera de sus calzoncillos, apenas había hecho un par de mamadas y ya habia pagado la factura de la luz Co solo eso, si seguía la noche así, podría obtener la del agua o el gas. Si lo justaba, podría juntarlo con el ahorro oculto, el que es para los estudios buenos de Horacio, podría justar para se alo que necesite pagar que Horacio decía necesitar para iniciar en su mundo legal.

Aprovechaba cada momento de descanso para guardar el dinero en el fondo de sus cosas, con ilusión. Hizo un privado, solo 10 minutos y por el momento no había salido a moteles con nadie, debería? Sacaría mad de ello, claro que debería. Estaba extrañamente feliz con todo aquello.

Luego volvía al trabajo y la sonrisa se iba, mucha gente esperando algo de el, lamiendo los billetes antes de dárselos y solo ahí, ahí se daba cuenta que el asco que le daba seguir ahí. Ni siquiera le gusta nada de eso, es que, solo se le para por la naturaleza humana, no siente ninguna atracción por ninguno de ellos, o ninguna persona que allá conocido.

Escucha, de la nada, dos "oye" a cada lado de las orejas. Voltea instintivamente a la derecha. Un hombre canoso, como todos, con rostro de lujuria, camisa de cuello y lentes delgados con el típico recuadro de aumento. Le muestra un fajo de billetes, uno ancho.

– Hasme un privado –Tiene que acercarse para escuchar bien. – Todo el dinero va para ti solo con un privado.

Por supuesto

– Espera a qué acabe la canción, después haremos lo que quieras.

Vuelve el rostro al tubo, esperando si alguien más lo solicita por algunos segundos. Escucha otro oye, el de la izquierda.

Mira de quién se trata y se sorprende, también se asusta.

Era el policía que se encargo de las negociaciones del atraco qur hicieron por la tarde, alto con traje, no tenía su placa o las pistoleras por ningun lado, era tan viejo como cualquier otro ahí.

– Que necesitas? –le grito.

– Eres Gustabo García? –se tenso, seguro sabría quien era. Dejo de bailar y dedico todo su atención al hombre. Sintió un tirón en el brazo derecho a quien no presto atención.

– Quien pregunta? –le habría pasado algo a Horacio, al padre de Horacio, cayó borracho, lo encontraron muerto, les pasó algo juntos?.

– Soy Jack Conway –dice de inprovisto. No le pregubto antes su nombre, debio hacerlo. Debía ser estupido como para no saber lo que le avecinaba y no era estúpido. Su rostro se tenso aún más, abrió la boca como para decir algo, pero le interrumpió– Matt?.

Hace años que no escuchaba ese nombre, tan americano para alguien que no sabía inglés en lo absoluto, dedico todo su vida para escapar de él y ahora le llegaba derrepente.

– No, no conozco a ningun Matt –Volvio su vista al frente y luego sintió el tirón, volteo y un hombre, con una gran y alta voz, dijo

– Hasme una mamada –la canción acaba en segundos. Mira de reojo al hombre que le pagaria por un privado y tuvo una idea.

– Claro, ven conmigo –Lo tomo y llevo junto a el hasta llegar al otro hombre.

Sintió a Conway seguirlo, gritando como pudiera un "Matthew escúchame". No le importo. Tomo a los dos hombres y les explico que estarían juntos en la misma havitacion, los dos por una conmición extra tendría una mamada "Mierda, háblame" y sería mejor si compran alcohol o coca para el. Bailaría para los dos "Lo siento" y podrían mirar y tocar si querian.

Los dos aceptaron y dejo de escuchar gritos al entrar y cerrar la puerta.

Termino a los veinte minutos, tomo todo el dinero correspondiente y lo que ya había tenido, antes de salir. Fue a su armario, lo guardo todo se quitó el polvo de la nariz, tomo una menta y repaso el maquillaje.

Pensó que se había librado de todo hasta que con el rabillo del ojo miro la llegada del oficial al lugar. Se tenso en el asiento.

– Mathew, te pido que me escuches, por favor, solo está vez –No le prestó atención, siguió con lo suyo– Lo siento mucho, no sabía que... Que estabas vivo. No quise dejarte, al contrario, yo... –Gustabo tuvo una llamada al móvil, salvado por la campana.

Era de Horacio, una llamada de Horacio a las 3 de la madrugada era mala señal.

Contesto de inmediato y asustado.

– ¿Que ha pasado?

– Nos ha robado, Gustabo, ese viejo no ha robado –sonaba como aspiraba los mocos, estaba llorando.

– Como?

– Encontró el dinero –Hubo silencio, nisiquiera Jack hablaba– Se lo ha gastado todo, está... Mierda, el payaso está inconciente porqur de ha bebido nuestro dinero.

– Voy para allá –No espero más, colgó. "Que ha pasado? Necesitas ayuda?". Busco a su jefe y se disculpo, no espero respuesta, fue corriendo a su armario y se puso su ropa. Fue corriendo afuera y tomo el primero metro que lo dejara mad cerca.

Perdió a su padre en algún momento de su carrera. Ya tenia un viejo a quien golpear en casa.

Blue knees (MM) --------------------

El dia para Horacio por si solo ya había sido demasiado, había empezado con el atraco y ahora veía la lata donde guardaban el dinero en el suelo del comedor. Con el hombre que seguramente se había gastado todo el dinero acostado, boca abajo en medio del salón.

Lo que paso a continuación de la llamada a Gustabo, lo ve de forma difusa, si le preguntarán divagaria en los sucesos por lo anormales que eran, casi está a punto de desmayarse. No pudo comerse ese problema.

En algún punto su padre se levantó con los gritos y reclamos de Horacio, solo respondía con gruñidos o "calla y espabila". Se acerco a la estufa, con la tonta intención de cocinarle algo a su hijo, porque era un claro buen padre. Aún con el gritándole tomo el encendedor, con la mano temblando por la cerveza que aún tenía y la otra abriendo la manija de la estufa. Claro que no funcionó, el encendedor se cayó al suelo, justo en donde se encontraba una toalla.

En algún punto Horacio comenzó a patear la toalla en vano, intentando a pagar el fuego, corrió por cualquier cosa donde poner agua, pero era tarde, el suelo y las encimeras eran de madera, cualquier cosa cerca suyo iba a quemarse. Corrió a la salida en busca de ayuda, grito en la calle y golpeó puertas diciendo "Mi casa se incendia" "Mi padre quemó mi casa" "ayuda".

En algún punto llegaron bomberos, por alguna razón policías y ambulancias, estaban rodeados de personas distintas que no conocían o que si, por el fondo, tirado en callejón, su padre, tomando una botella de cerveza.

En algún punto llegó Gustabo y se asombro de todo el espectáculo. Llegó corriendo con el y por primera vez sintio las lágrimas que ya le caian por las mejillas y grito.

En algún punto dejo de llorar y lo solto, la policía empezó a acercarse a ellos, pero Gustabo no les presto atención. Gustavo fue al callejón a gritarle al padre de Horacio y le hizo el mismo caso que cuando Horacio le gritó.

En algún punto Gustavo dejo de gritarle a su padre y le gritó a un policía que iba de traje. Gustabo se veia tan furioso que el propio Horacio comenzó a asustarse y a llorar sin que nadie lo notará.

En algún punto Horacio volvió a ver la casa y se le nublo la vista por las lágrimas, no pudo aguantar más y cayó de rodillas, tirándose al suelo rendido. Al final no de desmayo, pero lloro, lloro mucho.

--------------------
Pet Cheetah

Gustabo enloquecio al ver un montón de personas alrededor de su casa, camiones de bomberos en las puertas, patrullas detrás de las personas, ambulancias esperando. Los bomberos y los policias daban vueltas, Horacio en el centro, mirando a algún punto, llorando y asustado. Corrió de inmediato para abrazarlo, lo sujeto con fuerza y dejo que llorará, pero no es tonto, miro por el rabillo del ojo la casa y maldijo en silencio.

Totalmente achicharrada, nada verdaderamente importante puede sobrevivir a eso. No tiene dudas del el culpable de tal cosa después de ver al hombre en el callejón a pocos metros de la casa bebiendo.

Se queda unos minutos más con Horacio hasta que un oficial se acerca a ellos para preguntar lo sucedido. Horacio aún no se ve con ánimos de hablar, el no tiene ni idea de que paso. Solo le queda uno.

Suelta a Horacio y va directamente con el hombre, el oficial le sigue.

– Eh, gilipollas –Capta su atención para que voltee y cuando lo hace le da un puñetazo– ¿Quien coño te crees que eres? Ladrón alcohólico pirómano de mierda. –se recupera con lentitud y le mira a la cara.

– Es duro ser padre –dice con una sonrisa de medio lado, pareciera que le hace gracia.

– Ser padre? Tú hace años que no eres nuestro padre, que dejar a tus hijos solos a los 13 años es ser padre?

– Cabe... –Le da hipo– Cabe decir que tú no eres mi hijo. –Se toca el pecho.

– Eso no es lo que decías cuando tenía 5, gilipollas, 5 putos años. –Le golpeó el pecho– Pero venga, ya que no soy tu puto hijo, dejaré de tenerte el mínimo de respeto del que te tenía. –Toma aire– Tu puta esposa te dejo por otro, así que espabila inútil, que aún unos niños dependían de ti, deja de ser un borracho y robarle a unos niños que amablemente te compartieron su puta casa...

– No es tu casa –le interrumpe, pero sigue hablando.

– Y comportarte como un puto adulto, que he tenido que ser yo el que deje el colegio cuando apenas lo había empezado, he tenido que ser yo el que consiguió el único puto trabajo que si lo admitió y que sea una mierda, he tenido que ser yo el que mantenga a esta puta familia de mierda. ¡Así que mira, mira como el niño que no es tu hijo tuvo que crecer y ser un adulto porque un gilipollas termino divorciado y no pudo superar a su exmujer que lo dejo por un farmacéutico.

Fanfics de GTA RP nunca terminados que pueden leer y usar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora