Cap. l

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4 años después
Me levanto a las 7:15 para prepararme e irme a trabajar, soy diseñadora de moda hasta las 5 de la tarde que soy profesora de baile. Siempre ha sido mi sueño desde chiquitita, nunca dejaba de bailar aunque estuviera mal o con una pierna rota nunca deje de bailar y espero nunca dejarlo porque es algo que me llena desde siempre. Mi vida no ha sido fácil ni era buena en los estudios entonces lo único que me hacía feliz era bailar todo el rato. Yendo al trabajo cojo el coche y pongo a todo volumen AITANA mi cantante favorita desde que tengo 14 años me encantaría conocerla alguna vez. A todo volumen la canción de corazón sin vida que tiene con Sebastián yatra, cantando a todo pulmón de repente me dan un golpe en el coche.
–pero es subnormal o ¿que?– le digo mirando por el retrovisor –aprende a conducir hombre– salgo para mirar el golpe y para seguir insultándolo pero en la cara
–tú eres tonto, aprendemos a mirar al frente también, pero no ves que estoy parada Idota...– digo mientras el chico sale del coche, era guapísimo y la cara me parecía familiar pero no caía en q podía ser.
–perdón, perdón... mi jefe me ha llamado y cuando he mirado al frente te había dado– me dice con cara preocupada, se le veía que tenía dinero iba com un traje, creo que trabajara en una oficina o algo de eso –te pagaré el daño causado té lo prometo- me dice y me quedo pensando el <<...te lo prometo>>
*hace 4 años atras*
–se me dan fatal el inglés– le digo desesperada en la clase de recuperación
– yo te ayudaré te lo prometo– me dice y ese te lo prometo me suena verdadero
*volvemos a la actualidad*
Me quede sorprendida no podía ser el, Diego el chico que me ayudo en inglés cuando el instituto
–no te preocupes de verdad no es nada– le digo con cara pálida porque no sabía que decir
– ¿de verdad? Tu enfado decía lo contrario, te daré mi número y hablaré contigo para pagártelo no es nada– me dice simpáticamente y acepto con la cabeza y me da su número y cada uno seguía por su camino.
Cuando llegue al trabajo por fin seguía como Casper blanca que parecía que me iba a dar algo
– ¿estás bien, marina?– me pregunta mi compañera, Noelia preocupada
– si si, solamente que me ha pasado algo llegando aquí y sigo en proceso– la digo sin dar mas explicaciones y me voy a lo mío.
Cuando termino sobre las 2 y media llego a casa y me llega un mensaje del chico del coche diciéndome que me había pagado y con un bizum de 1.000€ sabía que solo era un golpe y que me había dado de más así que se lo dije, en lo que él me contestó que por las molestias causadas así que me lo quede, me viene bien.
Llega la hora de ir a ser profesora, entran mis alumnas.
–hola, chicas- digo amablemente, y todos me contestan con un hola fuerte y largo
–vale, a ver tenemos que calentar y empezar baile nuevo para el festival de junio, así que chicas estamos ready, ¿let's go for all?– digo creyéndome bilingüe por un momento y volviendo a recordar a Diego
–let's go for all– me contestan todas felices y alegres y me recuerdan cuando era pequeña la alegria que tenía con esa edad y hasta ahora que sigo feliz y alegre de seguir bailando.
Terminamos y van en fila una a una buscando a sus padres o familiares hasta que una alumna va directa a... el chico del coche. No podía creerlo esto ya no puede ser casualidad esto, cuando se fueron todas el seguía ahí y me acerqué hablar con él.
–hola– le digo amable
–hola, tú eres...– me dice pillado
–si soy la del golpe del coche, que casualidad que tu hija sea mi alumna, ¿no?–le digo sonriendo
–si mucha casualidad la verdad, aunque no es mi hija es mi sobrina– me dice con esa sonrisa perfecta que tenia Diego así que seguía pensando que era el así que me lance
–si quieres mañana quedamos y hablamos sobre lo del coche, si te parece bien Claro– le digo esperando una respuesta
–vale, aunque ya está todo dicho pero vale me parece bien– me dice pensando que me iba a decir que no
–a las 8 en el restaurante que está aquí al lado– le digo y él acepta con la cabeza, nos despedimos
Y otra vez por nuestros caminos.

Mucha casualidad me está pareciendo esto.

FUCK LOVE- Lucia gonzalez Donde viven las historias. Descúbrelo ahora