En cuanto Diego se fue de mi apartamento me puse a dar brincos y brincos como si fuera una niña pequeña que La Hayan dicho que iba a Disneyland a ver a Mikey mouse.
–vamos que nos vamos de compras– me dice Noelia así que yo acepto no iba a decir que no aunque tengo demasiada ropa e incluso puedo diseñar más pero el ir de compras es algo que siempre me ha gustado desde pequeña, siempre iba con mi madre era un hobbit que teníamos en común, así que nos preparamos y nos fuimos a comprar.
Estuvimos mirando tienda por tienda, mirando vestidos, trajes, cualquier cosa elegante para la noche, no te niego que no haya visto cosas que me gustaran para la ocasión pero tenia que ver todas las tiendas por si acaso había algo mejor.
–la última tienda, por favor dime que después de esta iremos directas a lo que te haya gustado más porfavor marina– me dice Noelia cansada y yo acepté con la cabeza porque yo también estaba un poco cansada a la que entramos vi de lejos a alguien familiar... Diego, no me lo podía creer
–Noelia, ¿dime por lo que más quieras en el mundo que ese de frente de fondo no es Diego?– la dije parada sin entrar, ella mira y me dice si con la cabeza así que fui hacia el hacer una escena de chocarnos.
–perdón no te habi...marina– efectivamente esa era yo –¿que haces aquí mi amor?– me da un beso
–pues mirando algo para nuestra noche, ¿y tú?–
–pues igual que tú, bueno te dejo princesa en horas nos vemos– me da otro beso y se va, no me lo podía creer el destino nos esta uniendo todo el rato. Al final salí de ahí sin nada y me fui a la tercera tienda que vimos y me compré el vestido azul largo apretado que al probármelo me enamore, me lo regalo Noelia, si, Noelia la chica que es más fría que un iceberg así que se lo agradecí al fin y al cabo es la mejor compañera de habitación del mundo. Al poco rato después de haber llegado y tal se hicieron las 8 estaba lista y él también esperándome abajo.
–¿porque cada vez que te veo te veo más guapa?– me dice dándome un beso Y yo sin decir nada me monto en el coche.
–¿ a donde me llevas?– le dije curiosa
–a un sitio sorpresa ¿confías en mi?– me dijo poniendo mi mano en mi muslo y yo dije que si con la cabeza.
El sitio era maravilloso tenía piscina, camas preciosas para sentarse a charlas, Dj, de todo eso parecía discoteca de ricos pero sin ser discoteca era precioso, estaba flipando.
–¿te gusta el sitio?– me dijo yendo a la zona de las mesas para cenar – ¿espero que tengas bikini o bañador?–
–me encanta el sitio... y no tengo bañador ni bikini pero si una lencería preciosa– le dije acercándome más y más a él para besarle pero Justo nos atendió el camarero, así que pedimos y a esperar.
–¿después de cenar, que vamos hacer?– le dije mirándole a los ojos brillantes que tenía
–bueno si no te quieres mojar esa lencería preciosa que tanto dices, pues podemos ir a las camas o a tu casa cenicienta– me dijo viniendo el camarero con la cena, cenamos y al final el plan fue llevarme a la piscina y tras una batalla de cosquillas cerca de la piscina caer con vestido, pero él también se tiró con traje, dos locos sin miedo al éxito. Cuando salimos de la piscina tras risas y besos nos fuimos a las camas con cortinas para secarnos un poco.
–¿que sepas que como llegue así se empapada a casa Noelia me mata o te mata?– le dije y después me reí
– bueno pues que me mate pero esta noche no me la quita nadie– da un beso apasionado y delicado en la que poco a poco me iba subiendo encima suya, el me toco mis muslos y tras estar sentados yo encima de él y él tocándome los hombros pero sin dejar de besarnos, sentíamos todo pero sabíamos que lo que quiéranos no se podía hacer en este sitio así que nos fuimos al coche, amplio y bonito en donde ahí sucedió de todo cuando terminamos de hacer de todo mire la hora eran las 12 Justo.
– te llevo a casa, no quiero que Noelia me odie la estaba empezando a caer bien – me dice colocando el coche bien y yo dije si con la cabeza y me coloqué bien el vestido y nos fuimos.
La llegada a casa fue silenciosa pero no fue el silencio incómodo sino seguro, me encanta estar con él me sentía genial como con nadie me había sentido, salimos del coche los dos y el portal nos despedimos.
–¿que te ha parecido la noche?– me dice sonriendo
– me ha parecido como en sueños a sido perfecta y lo del coche ya fue nivel Dios– le dije también sonriendo
–para mi a sido la mejor de mi vida y todo porque estabas tú a mi lado, contigo me siento como con nadie me había sentido, me encantas, marina– me dije sincerándose conmigo y eso me encanta de él que todo lo que dice es cierto porque es directo y sincero. – te quiero, marina cabrera– me dice en ese momento lo bese con fuerza cogiéndole de la cabeza para que se diera cuenta de que lo amaba yo también, ahí fue la despedida otro beso y cada uno para su casa.
Mientras subía pensaba en ese "...me encantas, marina" o "te quiero, marina cabrera" nunca había sentido nada parecido a lo que sentí cuando me lo dijo, soy una persona que le cuesta mucho decir te quiero, solo lo dije una vez en mi vida y fue a mi madre pero bueno llegué, Noelia estaba dormida asi que sin despertarla me fui a dormir.
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FUCK LOVE- Lucia gonzalez
RastgeleMarina cabrera no es muy buena estudiante que digamos y su vida no es muy alegre tampoco, lo único que la llena de verdad es el baile bueno le llenaba hasta que conoció a Diego rey pero no todo es tan feliz como parece ¿Quieres saber qué pasa entr...