Capítulo 7. Una Cita

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Aviso antes de empezar el capítulo: mi gente ya solo esta semana tengo de vacaciones y entro de nuevo a la U por lo que las actualizaciones serán lentas no solo en esta historia si no en las otras que tengo por igual, procurare actualizar todas las semanas, aun así yo no olvido historias y si me llegara a retrasar será por la U, ya cuando salga de nuevo de vacaciones las actualizaciones serán fluidas, sin más mi gente comencemos <3

***

Dia domingo, tentó la cama con la esperanza de abrazar a su pecoso, al no encontrarlo bufo molesto recordando que ya no estaba en el departamento de Izuku, se removió incomodo en las sábanas hasta que arrugo la nariz ante el fuerte olor a limón que su nido emanaba, su omega se removió inquieto su instinto le gritaba que tirara todo, no se sentía nada seguro estando en ese nido, aun así trato de ignorar las quejas tan molestas de su animal interno

Frotándose la cara en molestia se levantó al baño del cuarto para arreglarse y darse una ducha tal vez eso lo calmaba un poco, se dejó caer en la tina revisando su celular apenas eran las siete de la mañana, entro a la aplicación de mensajería viendo que Izuku ya estaba en línea, sonrió tenuemente al escribir un simple mensaje de buenos días que el omega no tardó en responder, con un buenos días por igual

Estuvieron charlando unos minutos hasta que la puerta fue tocada interrumpiendo el momento de paz que tenía, gruño por lo bajo dejando pasar, cuando por fin su humor estaba subiendo lo molestaban, pero a pesar de eso se relajó al ver que solo era Kurogiri

- Amo Tenko, el amo Touya está esperándolo para desayunar – Kurogiri entro en total confianza el hombre era un omega que había criado a Tenko desde que nació, por lo que al omega menor no le molestaba que Kurogiri entrara con confianza y lo viera, cuando básicamente le cambio hasta los pañales

El hombre le era muy fiel gracias a esto cuando supo que se casaría se fue detrás de él, renunciando a la familia Shimura sin importarle que había trabajado de ser el mayordomo de la familia 32 años, para ser el mayordomo de la futura familia de Tenko

El omega menor asintió, frustrado no quería verle la cara al que era su esposo, extendió la mano en dirección a Kurogiri que sonrió ante el gesto, con sus largos dedos ya algo arrugados por el tiempo sostuvo con delicadeza la mano de su cachorro

- ¿Jamás pensaste en tener un cachorro Kurogiri? – el mayor beso con ternura el dorso de la mano de Tenko era una costumbre que tenían desde que Tenko era un bebe, le enseño a que le extendiera la mano para que el la besara, era un gesto que el pelinegro utilizaba cuando quería que su cuidador lo mimara o le pusiera atención, acaricio el brazo hasta quedar detrás se arremango las mangas del traje colocándose de rodillas comenzando a enjabonar el cabello de Tenko con delicadeza, ronroneo al oír el sutil ronroneo de su cachorro, desde que era muy pequeño le encantaba que su pequeño omega ronroneaba hacía sentir querido a su animal interno

- Te tengo a ti – respondió con una sonrisa, Tenko hizo un puchero no muy conforme por la respuesta – estoy viejo Tenko, un anciano de 60 años ya no puede pensar de esa forma, y jamás pude tener cachorros, soy estéril – susurro algo dolido, le parecía injusto que el que más soñaba con hijos la vida no se los daba, pero aquellos que si podían eran personas que ni siquiera merecían ese don

- siempre soñé con uno cuando era joven, pero la vida nunca me dio uno propio, pero cuando tu padre me ordeno cuidarte desde que naciste, supe que aunque no fueras mi sangre te amaría sin importar que – el mayor sonrió tiernamente desprendiendo su aroma a menta el menor asintió, su corazón se oprimió dolorosamente, sabia lo mucho que Kurogiri lo quería y por esa misma razón le daba temor decepcionarlo, la opinión de sus padres jamás le importo, pero caso contrario era con el omega que consideraba su padre, incluso cuando Kurogiri lo reprendía no podía levantarle la voz y solo bajaba la mirada aceptando el regaño

Omegas &quot;Shigadeku&quot;Donde viven las historias. Descúbrelo ahora