Sunset Season | KJ & BH

A moment in time

Kendall's Pov

Kylie y Bella llevan dos meses en Los Ángeles. Yo estoy mejor, Bella esta cerca, quizá esa es la razón.

Cumplieron medio año de novias, ¿He aguantado esto por seis meses? Lamentablemente, si.

Bella y yo tuvimos momentos, casi nos besamos por lo menos cuatro veces, pero no pasa nada, intenté hablar con ella sobre eso, pero cada vez que pongo el tema en la mesa, ella lo cambia por algo sin importancia.

Mi cumpleaños es en tres días... No estoy tan emocionada como de costumbre, no quiero cumplir 27... Comienzo a sentirme vieja.

— ¿Estas lista? — Bella aparece en el marco de mi habitación. Le sonrió y me levantó de la cama.

Ambas salimos de la habitación y nos encontramos con familia y amigos en el garage.

— ¿Nos vamos ya? Kendall, es la playa, no un desfile de Chanel. — Dice Scott con impaciencia. Veo como Bella ríe mientras niega un poco.

Todos subimos a los autos y los choferes condujeron a el lugar. Bella y Kylie vienen lado a lado hablando con Stormi.

Miro mis manos intentando disimular hasta llegar. Todos bajan de los autos. Al parecer es una playa privada, no hay ni un alma más que nosotros por aquí, eso es bueno. Sígnica que no hay paparazzis.

Veo como todos se acomodan y yo me quedo un poco apartada.

— ¿Porque tan sola? — Kylie llega a mis espaldas. — ¿Pasó algo? — Se agachó y luego se sentó a mi lado con cuidado.

— No... Solo quería pensar un poco. — Sucede que no supero a mi ex, que resulta ser tu actual novia.

— ¿Bella y tu pelearon? — Frunzo el ceño y la miro. — Le dije que si te preguntaba porque estabas tan lejos, y dijo que no quería hablar contigo. — Observo a Bella a lo lejos, hablando con mi madre y Kourtney.

— Pues... — Obviamente no voy a hablarle sobre mis intentos de robarle a su pareja. — Tal vez solo... — Pero no se me ocurre nada. — Hablaré con ella más tarde, no se si pude haber dicho o hecho algo... — Ella me sonríe.

— Kendall nunca te dije gracias. —

— ¿Porqué? ¿Por ser la mejor hermana mayor que pudieras tener? — Digo con orgullo molestándola.

— Por ser tan madura con lo de Bella. No quiero ponerte incómoda, pero se que no es muy fácil... — Dejó caer su cabeza en mi hombro. Sentí un dolor horrible en el estómago.

¡Maldita sea!

Horas más tarde, comenzó el atardecer. Mis hermanas mayores comenzaron a irse.

— Stormi se siente un poco mal... Creo que tragó agua salada. — Murmura Bella tomando las mejillas de la pequeña.

— La llevaré a casa. — La carga Kylie.

— Voy... —

— No, no. — Dice. — Quédate al atardecer con Kendall, es lindo. —

— Pero la... —

— Yo la cuido, Bella. — Besa su cabello y minutos después sube al auto. Ahora quedamos solo nosotras.

En ocasiones parece que Kylie me fuerza a pasar tiempo con Bella, como si quisiera que algo ocurriera entre nosotras, pero eso es idea mía. No puedo abusar de la confianza que me tiene.

— ¿Hice algo que te molesto? — Uso el absoluto silencio para preguntar.

— ¿Que? —

— Kylie dijo que no querías hablar conmigo. —

— Me refiero a que no puedo creer que preguntaras algo cuando sabes que sucede. —

— ¿Es por lo del beso? —

— Eso nunca pasó, fueron intentos fallidos, accidentes. —

— Pues lo de la sala de proyecciones definitivamente no fue un accidente, Bella. —

— Kendall... ¿Porqué insistes tanto? —

— Por que me tienes confundida. — Nos miramos en silencio, así como todas las veces anteriores.

— No es mi intención. — Murmura. Miro a la playa mientras el sol comienza a ocultarse.

— Es que... Me dices cosas lindas, me pongo nerviosa cada vez que me miras, se diferenciar miradas, Bella, y te conozco, se interpretar la forma en la que observas a los demás. — Digo comenzando a alterarme un poco. — No es del todo tu culpa, yo soy quien no puede superarte, pasaron años, y tú llevas seis meses con mi hermana. — Me tome la cabeza en las manos estresada.

— Nada de esto es fácil, y aunque quiera sentirme mal por Kylie, no puedo, tal vez es un pensamiento egoísta querer ser yo quien esta contigo, cuando se que no puedo darte lo que te mereces. Quiero ser yo a quien ames. — Miré a la playa nuevamente. — No quiero lastimar a Kylie, sus sentimientos por ti son reales, y quiero pensar que los tuyos por ella también. No hay forma de fingir que te amo, y te amaré hasta que muera, y si hay una vida después de eso, te amaré entonces —

Suspiré. Me siento tan frustrada.

— ¿Pero podrías decirme como hiciste... Como hiciste para olvidarte de mi? — Le pregunto. La miré un momento, ella tenía las manos entrelazadas y miraba a la arena entre sus pies.

El olor a libertad y naturaleza me invaden por un segundo, los sonidos de las olas son lo único que escucho mientras la miro. Su cabello moviéndose por el viento y sus lindos ojos verdes aclarándose por el sol ya puesto por el atardecer.

— No lo hice. — Susurra.

Sentí una punzada en el corazón y aparte la mirada. No lo esperaba, no lo hacía, quizá una bofetada por mi confesión era más razonable en mi cabeza, pero no que ella hiciera lo mismo.

— Kendall, dime algo. — Me perdí varios minutos, me sentí un poco aturdida.

Sentí su tacto cálido en mi mejilla. Volteó mi cabeza con delicadeza, sin forzarme. Me miro un largo minutos y dudosa se acercó a mi rostro con la intención anhelada.

Me aproximé más a ella, movió su cabeza acomodándose, buscando una posición para finalmente romper la tensión. Sus ojos se pasaban de mis ojos a mis labios, mientras su mano seguía en mi mejilla.

Rocé nuestras narices, su pequeña y linda nariz... Luego ella hizo lo mismo con nuestros labios. Hasta que finalmente, acabo el diminuto espacio entre nosotras, con un beso.

Un dulce beso, uno por el que espere desde el día que cometí el error de alejarla. Lo anhelé con ansias desde ese momento, sentí la brisa fría de el mar pegar en mi rostro.

Sus labios dulces y delicados, justo como antes. Todo se sintió irreal. No había prisa, parecíamos tener todo el tiempo del mundo. Mi mano pasó por su nuca y mis dedos entraron entre su cabello tomándolo suavemente.

Lastimosamente necesitamos el aire. Nos miramos con las respiraciones alteradas.

Ahí estaba el brillo en sus ojos, el brillo que tanto extrañaba, me sentí atrapada por esos orbes verdes azulados hipnotizantes.

Cada una volvió a su posición en la arena. La vi sonreír, sus mejillas estaban rojas, igual que sus labios. Puso su mano sobre la mía en la manta y sentí mi corazón latir de una forma desesperada.

Miramos el atardecer con las manos tomadas. Ninguna dijo nada, al parecer ambas pensando que no era momento. Solo había que disfrutarlo.

Estuvimos ahí hasta que las estrellas y la luna fueron lo único que nos permitía ver. Era hermoso. Se cuanto Bella ama la noche, y ver el cielo, escuchar las olas. No me gustaría enterarme de que no soy la persona que la conoce mejor, eso lo veo imposible.

Y así es como... Como la luna es el mayor testigo de lo mucho que puedo amarte, Bella.

❤️