"¿Quieres que haga qué?"
"Hay una persona a la que quiero invitar a la fiesta de bienvenida y necesito tu ayuda con los preparativos".
"La fiesta de bienvenida no es hasta dentro de un mes".
"La primera persona que le pregunta a otra hace que la pelota ruede. Hazlo".
Winter, aunque confundida y un poco descontenta, se dejó llevar a un salón de clases vacío después de que terminó la escuela.
El día anterior había sido, para serlo simplemente, por trillado que fuera, mágico.
Se había ido de la casa de Karina con un dulce beso y la promesa de reunirse muy temprano a la mañana siguiente, lo cual hicieron, intercambiando miradas y suaves sonrisas. En física había sido una ráfaga de contacto visual tímido y risitas nerviosas: Karina había contado tantas bromas que asombró a Winter, quien nunca se dio cuenta de lo patética que era la pelinegra o cuánto la amaba por eso.
Ambas chicas se habían prometido justo antes de que sonará la campana que esperarían pacientemente hasta su cita del sábado para volver a salir. Y aunque sería difícil estar lejos de la otra durante veinticuatro horas, sabían que podían encontrar una forma de arreglárselas.
"Así que estaba pensando en pintar una frase cursi en esta pancarta y preguntarle frente a toda la cafetería".
Oh cierto, ella estaba con Somi en este momento. Era tan fácil perderse en su cabeza cuando era en Karina en quien estaba pensando.
La chica la había arrastrado a un salón de clases vacío, iluminado solo por la luz del sol que entraba por las ventanas abiertas. Si aguzaba los oídos lo suficiente, podía escuchar los motores rugiendo y saliendo del estacionamiento. Muy pronto ella estará haciendo lo mismo.
"Muy atrevido movimiento".
Somi volteó su cabello con arrogancia. "¿Quién podría resistirse?"
"Cualquiera, en realidad."
Winter se recostó contra el escritorio del maestro y vigilo la forma en que Somi maltrataba la pancarta con la que estaba tratando de trabajar.
"Oh, por favor, habrías salido conmigo si te lo hubiera pedido".
"Tal vez, si no fuera por—"
La chica más alta interrumpió a sabiendas. "Karina".
Winter se encogió de hombros, pero no pudo evitar pensar en su próxima cita con Karina.
Después de un momento de silencio, Somi discretamente le envió un mensaje de texto a una muy impaciente Giselle, Winter volvió a hablar.
"Entonces, ¿Quién es la persona afortunada?"
Somi sonrió. "¿No te gustaría saber?"
-
"No."
"¡Pero Rina!"
"No va a pasar."
Giselle hizo un puchero tan intenso que sintió que sus labios se caerían
Karina simplemente rodó los ojos.
"Le pregunté a Ningning, porque sabía que me romperías el corazón como lo estás haciendo ahora, y ella me dijo que no podía porque tenía que hacer algo después de la escuela".
Giselle físicamente se puso de rodillas frente a su mejor amiga y Karina intentó frenéticamente levantarla, maldiciéndola en voz baja.
"¡Bien! Bien. Pero no quiero tener que ser tu camarórgrafa nunca más, ¿De acuerdo?"
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Monsters | Winrina
FanfictionKarina es la pesadilla de la existencia de Winter. Se pelea con ella sin razón, le insulta sin piedad y demás. Pero ahora la está chantajeando para tener relaciones sexuales con ella, todo para no quedar mal con su estúpido novio. Ambas aseguran que...