𝚆𝚒𝚕𝚍 (𝚃𝚎𝚎𝚗 𝚆𝚘𝚕𝚏)

Capítulo 26

Me desperté de nuevo por la alarma, la apagué y fui al baño para hacer mis necesidades, al acabar de limpiarme tiré de la cisterna y salí. Fui hacia mi armario y me puse esto:

Cogí mi mochila y salí, me encontré con Scott viendo hacia la habitación, hacia la bolsa creo, me daba igual, total, seguía enfadada. Entró de nuevo a su cuarto cerrando la puerta, agudicé mi oído escuchando la cremallera de una bolsa sonando, no me digas que está abriendo a bolsa del dinero, escuché como vaciaba la bolsa en la cama y luego la volvía a meter debajo. Me encogí de hombros y bajé las escaleras haciendo sonar mis tacones, agarré una barrita energética y sali de casa para coger el bus.

[...]

Bajé del bus sonriendo, hacía un buen día, vi a Liam entrar en el instituto así que corrí quedando detrás de él, lo notaba un poco raro, estaba asustado. Miraba a todos lados como si estuviera escapando de algo o de alguien.

─ Liam, ¿nos vemos esta noche en la hoguera? -le preguntó Mason haciéndolo salir de su trance. Mason me miró pero le hice una seña con la cabeza para que no dijese nada, cosa que entendió perfectamente y volvió a mirar a Liam.

─ Creo que voy a pasar -dijo un poco nervioso, su corazón latía rápido.

─ No puedes faltar -le dijo Mason en desaprobación.

─ ¿Por qué no? -le preguntó Liam mirando hacia los dados.

─ Estás en el equipo de lacrosse. ¿No es obligatorio? -le dijo Mason confundido.

─ No..-dijo Liam mirando hacia abajo, vio a su derecha y se quedó estático, seguí su mirada pero solo vi a estudiantes. ¿Qué le estará pasando a Liam?-. Creo que no voy a poder ir -dijo rápido.

─ Vas a venir y vamos a buscarte a una chica guapa..-le empezó a decir Mason guiñándome el ojo disimuladamente haciéndome sonreír-. ..para que hagas el ridículo con ella y para mí un jugador de lacrosse. -sentenció-. Porque por estadística, algún miembro de tu equipo juega para el mío -Maso miró raro a Liam ya que se quedaba viendo detrás de él, repito, no había nada-. ¿Vale?... Liam -lo llamó al ver que éste no contestaba.

─ Sí, vale. Iré -dijo asustado, se dio la vuelta y me miró durante un segundo antes de irse rápidamente, miré a Mason y él a mí, estábamos muy confundidos por el comportamiento de Liam, nos encogimos de hombros una vez más y fuimos a clase.

[...]

Salí de clase con el permiso del profesor para ir al baño y en el camino escuche unas voces provenientes de las escaleras, me acerqué un poco más y pude ver que era mi hermano hablando con Liam.

─ Liam -lo llamó mi hermano poniendo una mano en su hombro-. ¿Estás bien? -le preguntó-. Liam -le dijo para que lo mirase.

─ Anoche mi impresora se encendió sola -le empezó a explicar Liam agarrando el palo de lacrosse-. No podía apagarla -siguió-. Le di al botón de cancelar, pero siguió imprimiendo.

─ ¿Y qué imprimía? -le preguntó mi hermano, Liam sacó un papel del bolsillo y se lo dio a Scott, éste lo abrió y empezó a leerlo, yo no podía desde aquí pero algo me decía que no era nada bueno.

─ ¿Pero esto que és? -escuché la voz del entrenador la igual que Scott y Liam, llegaría tarde a clase pero no me importaba, fui corriendo al igual que ellos pero cuidando de que no se diesen cuenta de mi presencia. Al llegar al despacho había un montón de papeles tirados por el suelo.

Scott cogió uno y Liam lo agarró del brazo para que el entrenador no los viese, estaba escondida entre la pared, arriba de las escaleras escuchando lo que decían.

─ ¿Ves la diferencia? -le preguntó Liam cruzándose de brazos mirando a Scott.

─ Derek ya no está en la lista -le respondió mirando al papel.

─ Y yo ya no valgo tres millones -le dijo Liam por si acaso-. Ahora valgo 18, dieciocho millones de dólares -dijo mirándolo ahora.

─ Y B...-no pude escuchar más porque el profesor me estaba llamando, fui corriendo y por suerte no me castigó porque le dije que había ido a la enfermería por una pastilla de la cabeza, aún que me quedé con la intriga de saber que más iba a decir mi hermano.

[...]

Al salir de clase Stiles y Lydia me vinieron a recoger para irnos a la comisaría. Cuando llegamos fuimos directo con Parrish, quien estaba en su oficina.

─ No es una lista negra -dijo Parrish viendo al ordenador-. Es más bien la lista de los muertos.

─ ¿Todos? -pregunté mirándolo al igual que él, nuestras caras estaban muy cerca, pero demasiado.

─ ¿Todos están muertos? -preguntó esta vez Lydia haciendo que girásemos la cabeza.

─ En la última década. Todos por suicidio y en el mismo lugar -dijo Parrish viendo los informes-. En la casa Eichen -nos miró.

Ellos iban a ir a la casa Eichen pero yo no podía, había recibido un mensaje de Malia preguntándome si iba a la fiesta y obviamente no se lo iba a negar, aparte de que también quería despejarme un poco.

Fui a casa y me dirigí a la habitación para pegarme una ducha. Cuando salí me enrollé en una toalla y fui a mi armario, hoy era el día en que iban a ver otra Briana, esto fue lo que me puse.

Me puse pintalabios rojos y rimel, me mandé un beso a mí misma y salí de mi habitación para bajar las escaleras pero pasé por delante de la habitación de mi hermano, la puerta estaba entreabierta. Entré y vi la chaqueta que había llevado esta mañana al instituto, a lo mejor aquel papel estaba dentro, Cogí la chaqueta y busqué en el bolsillo derecho, no había nada, al meter la mano en el izquiero sentí un papel rozar mis dedos, lo saqué y lo abrí. Empecé a leerlo, me quedé en shock y lágrimas se formaban en mis ojos, yo ya no valía 26 millones, si no 30. Scott y Liam lo sabían y no me lo dijeron, me sentía muy decepcionada de ellos.

Unos minutos después me sequé las lágrimas y fui a mi cuarto para maquillarme de nuevo, lo iban a pagar muy caro. Miré el espejo para alumbrar mis ojos unos segundos haciéndome sonreír, me iba a emborrachar como nunca antes lo había hecho.Salí de mi habitación y bajé las escaleras con rapidéz, cogí las llaves de la casa y salí cerrando la puerta con llave, me puse en marcha para ir a la fiesta y encontrarme con Malia.