Checkmate㆐JIHAN ~Editando

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Las sobrias paredes de aquella institución le daban la bienvenida, todo era siniestro y lo sabía, mas, estaba dispuesto a descubrir lo que faltaba de los misterios de ese Instituto con el objetivo de hallar el motivo del asesinato de su hermano, además de huir de su indeseado destino.

Nadie le diría lo que tendría que hacer y quitaría los carteles de mentiras encontrando la ansiada verdad tras ellos.

Él no era más que Hong Joshua ,quien a partir de ese momento tomaría el papel de su hermano gemelo Hong Jisoo.

Sus rubias hebras fueron teñidas de castaños y sus glándulas cubiertas de supresores acompañados de un fuerte perfume de pinos el cual levemente se combinaba con lo que quedaba de su aroma a lirios.

Había sido preparado por él mismísimo Jisoo por si algo pasaba

Guardó dentro de su camisa el relicario de los Hong, recuerdo legado de sus padres a su hermano y de este a él. Limpió las furtivas lágrimas que escapaban de sus ojos, sabía que los días serían más fríos que el infierno y los típicos cerezos que amaba ver se marchitarían.

Suspiró antes de abrir la puerta de su habitación, dispuesto a comenzar su investigación.

──Shua.── Saludó enérgicamente su compañero de habitación y aventura Wen Junhui la única persona en la cual su hermano le dijo que confiara.

El omega sólo pudo lanzarse a los brazos del beta aferrándose a algo familiar , Junhui le había ayudado a huir del convento donde su hermana mayor le había mandado a estudiar con el objetivo de "enderezarlo" ya que no encajaba en los estereotipos sociales de un omega británico.

Sonrió al separarse, el de origen chino correspondió al gesto emocionado.

──El asesino te vio según lo que me contaste en la carta.── Habló esta vez en un tono discreto mirando seriamente al teñido de castaño quien asintió lentamente. ──Debes ser cuidadoso , él puede estar mirando, y sepa lo que ya sabemos.── Susurró nervioso.

Ambos dejaron sus cuerpos caer en la cama del beta quien se estiró como estrella de mar mirando en dirección a donde se encontraba su mejor amigo.

──Donde sea que esté, estará muy orgulloso de ti, eso lo sé.── Añadió .

Aquella sonrisa solemne volvía a decorar su rostro.

──A veces siento que está junto a nosotros, lo extraño como nadie sabe, mi vida iba a ser un asco si no venía hacia acá .── Confesó en un susurro el menor de los Hong revolviendo sus cabellos.

El dúo de amigos se levantaron fugazmente al escuchar como la puerta era abierta por un par de jóvenes uno de ellos entrando muy emocionado y el otro ateniéndose a mirarle desde el umbral.

──Soo , me alegra que hayas vuelto.── Casi gritó de alegría el rubio desconocido, se dejó envolver por el agradable olor a licor de almendras, el cual a diferencia del típico dulzor portaba algo ligeramente amargo descubriendo que quien le abrazaba era un alfa. Y uno de presencia muy imponente por lo que pudo observar.

Las manos del mayor se extendieron frente a él y sólo se le ocurrió agitarlas entre las suyas algo avergonzado por no saber que hacer. El recién llegado rió estruendosamente.