24│How is to be alone

377 74 0
                                    

Mark deslizaba la tela húmeda sobre su rostro, eliminando con cierta lentitud los rastros de pólvora en su piel. Estaban por entrar a un hotel, así que ambos chicos debían estar presentables para no levantar sospechas. JeNo, por su parte, mantenía su distancia, evitando así volver a crear otra discusión por la negligencia del mayor.

DongHyuck aún no decía ni una sola palabra, preocupando a todos de cómo lo sucedido le había afectado. Pero, no intentaba alejarse, lo que les dejaba descartar que estuviera molesto.

Parecía perturbado.

—Escuché a mucha gente decir que se sentían solos —DongHyuck no formó ninguna expresión—, se me hizo curioso. No creo que sea un sentimiento que las personas tengan de la nada como la alegría o rabia.

—No sé cómo se siente estar solo porque siempre he estado contigo, hyung —respondió a los minutos de silencio en un tono muy bajo—. ¿Eso es algo malo?

—No lo sé... —para él no es así, pero le importaba su opinión—. ¿Tú lo ves de mala manera?

Se encoge de hombros, simple.

—Estoy bien a tu lado.

Mark pasó la tela por su frente, tomando sus mechones para alzarlos y tener más acceso.

—No quiero que te sientas presionado, ¿sabes? —no lo sabía—. Quiero que sea tu decisión seguir aquí, no porque sea una obligación. Estás en todo tu derecho de dejarme.

DongHyuck retrocedió un par de centímetros, lo suficiente para que la mano de Mark quedara extendida al aire. 

En su rostro se formaron tantas emociones, Mark pensó en enojo pero lucía más como una confusión.

—¿Por qué piensas que te voy a abandonar?

Mark suspiró dejando la tela a un lado y dejó caer sus manos en su regazo.

—Deberías estar en la universidad o haciendo una vida para ti solo —dice—, con amigos o teniendo una novia. Cosas que personas de tu edad deben hacer. No poniendo tu vida en riesgo. No cambiando tu nombre a Roberto para proteger tu identidad. No huyendo. No estando conmigo.

DongHyuck ladeó su cabeza de un lado al otro, tratando de asimilar el rostro triste de su mayor. Como si no supiera que incluso si tuviera otro lugar a donde ir, preferiría mil veces estar a su lado.

—Mis diecinueve me dicen que quieren estar contigo —Mark lo mira—. Y todas mis edades anteriores estuvieron de acuerdo. No sé qué será de las próximas, pero la cosa parece coincidir. Estoy bien, justo aquí. No me iré a ningún lado.

—¿Incluso si mis veintiuno lo arruinan?

Sus esponjosos labios rebotando contra los suyos fue una confirmación, aún así se deleitó en responder con palabras cerca de su boca.

—No voy a abandonar a las gerberas que cultivé en tu corazón, hyung.

Brave Boys│MarkHyuck Donde viven las historias. Descúbrelo ahora