31│The kingdom of DongHyuck

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Lo primero en la investigación de JeNo fue involucrarse en la revisión de la casa de los chicos. Esta se encontraba la mayoría del tiempo con policías entrando y saliendo, por lo que era imposible hacer su propia inspección sin levantar sospechas.

Mark le comentó que en aquella casa había una libreta, donde se encontraba anotado el número de alguien que los ayudaría apenas se enterara de lo ocurrido. Por ende, había desaparecido de la vista de sus demás compañeros sin que estos lo notaran para buscarlo.

Pasar por la habitación de DongHyuck fue una misión entre su dolor y confusión. Para él, todo había pasado demasiado rápido, pero lo único que consideró vital fue ponerse en marcha antes de siquiera dudar.

Aunque, a veces, no podía pensar en que quizás DongHyuck estaba en problemas. Unos donde ni siquiera su mente podía recrear una imagen.

La habitación estaba pintada de un brillante amarillo, las sábanas verdes estaban revueltas sobre el colchón y muchas de las cosas que se encontraban en las mesitas estaban regadas. JeNo no pudo evitar pensar en lo patético que empezaban a ser los policías, lo cuales en lugar de realizar correctamente su trabajo, solo estaban jugando como niños.

Tontos presumidos, pensó JeNo.

Sí, él era un policía corrupto en todo su concepto. Era cómplice de los crímenes de Mark y no le interesaba demasiado. Porque así era la supuesta seguridad en el país, solo funcionando cuando a estos les convenía. 

¿Por qué esforzarse? De todas formas ellos estarían de el lado de los malos por los beneficios, no por los demás. 

Se fue directamente al baño y se agachó hacia la baldosa vainilla número tres, dando tres golpes y quitando el pequeño pedazo camuflado que cedió antes su esfuerzo. Había una pequeña libreta de cuero, la cual escondió dentro de su camiseta y arregló todo antes de que sus compañeros recordaran que estaban en una investigación.

Cuando JeNo estaba por abandonar la habitación, se percató de un detalle en el armario. 

Justo detrás de éste, había una libreta parecida a la que terminó de tomar, pero de color blanco y con unas cuantas manchas de polvo en las esquinas. JeNo no pudo evitar ser curioso y sacarla de su escondite. No recordaba que la mención de una segunda libreta.

"El reino de DongHyuck", decía la escritura de la portada, pintada de un dorado y una caligrafía muy elegante.  

JeNo lo revisó un poco, no reconocía la letra de ninguna parte. Contenía historias extrañas, con menciones de personas que se le hacían familiares.  

Pero, el final...

Mark debía verlo cuanto antes.

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(...)

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—¿Tienes una idea de quiénes son?

Mark recién había terminado de leer todo el contenido de la libreta. Era un especie de cuento, que narraba las aventuras de DongHyuck. 

Pero, ¿quién se supone que era ese DongHyuck? Porque este no haría nada de lo que narraba la historia, siendo un asesino a sangre fría, controlando personas y actuando sin pensar. Ese no se parecía en lo absoluto a la persona que él conocía de toda su vida. 

Lo más extraño, era el final, especialmente el siguiente párrafo;

"Cuando estés con nosotros, todo éste reino será tuyo, mi capullo" Seguida de un par de iniciales: Y, S y J.

—No tengo ni idea de qué es esto —afirmó dejando el cuaderno de nuevo en la mesa—. ¿De donde lo sacaste?

—Estaba en la habitación de DongHyuck, escondido —Mark no pudo evitar fruncir el ceño en forma de confusión—. ¿Realmente no lo reconoces? Cuando DongHyuck fue dejado en el orfanato, ¿sus padres no le dejaron algo?

—Él dijo que tenía una caja con algunas cosas, pero que las monjas se la habían quitado —recordaba exacta sus palabras, la forma tan triste en que las pronunció... ¿Fue fingido? ¿En qué momento las recuperó?—. DongHyuck no escribía ningún diario, hasta donde sé.

JeNo atrapó el diario y lo empezó a observar detenidamente. Era de DongHyuck, pero, ¿por qué no lo sabían desde antes? El chico podía ser extraño, a veces su actitud era un enigma. Le habían restado importancia al asunto, ahora se preguntaban qué otras cosas podría haberles ocultado.

—DongHyuck tenía más secretos de lo que pensábamos —concluyó.

Mark parpadeó y negó al instante.

—DongHyuck es un chico inteligente, puede ser una pista —dice mirando el libro—. La portada tiene un detalle en la cubierta.

Tomó el diario en sus manos y señaló los detalles, los cuales parecían ser rasguños en zonas específicas. Mark revolvió las páginas, tratando de llegar hasta donde el defecto se encontraba y leyó en voz alta.

—"Puedes sentir que estás viviendo en una mentira, pero ésta es toda tu realidad" —hizo una pausa analizando la respuesta directa a lo anterior, escrita un poco más abajo—. "La única verdad que conoces, es la que se encuentra en tu corazón. No la que los demás te quieran hacer creer".

—Podría ser un mensaje.

—¿Y qué significa? 

—Tú lo dijiste —le recordó—; Donghyuck es listo. 

Mark se tomó varios minutos para pensar, jugando con la cadena de sus esposas. Sus brazos comenzaban a tener marcas violetas por el metal apretado en su piel.

—Creo que tengo una idea —anunció, JeNo tenía toda su atención en él—. DongHyuck recibió esto esa noche, alguien se lo dio. ¿Cuál fue el propósito? No lo tengo claro, pero era vital que éste lo leyera. Entonces, él pensó que era igual de importante que lo encontráramos, al menos para que estuviéramos enterados de qué estaba sucediendo. Quizás alguien lo secuestró y por eso se encargó de dejarlo a nuestro alcance, para que supiéramos las razones.

—Como una señal.

—Que no crea que está muerto.

—O —dice JeNo—... que hay mucho más detrás de su desaparición. 

—Por Dios, ¿no encontraste una frase más cliché de película policíaca?

JeNo rodó los ojos.

—Enfócate, sabes a lo que me refiero —Mark se quejó diciendo que no estaba siendo lo suficientemente claro—. Esto no es solo sobre ti, sino sobre DongHyuck. Él es el objetivo. El diario es la razón de eso, pero tenemos que averiguar quién lo escribió y con qué objetivo.

—Llama al número y sácame de aquí —dice con determinación—. Tengo que buscarlo, encontrarlo y esconderlo antes de que algo malo le pase.

El policía suspiró.

—Creo que algo mucho más oscuro está pasando ahora mismo.

Brave Boys│MarkHyuck Donde viven las historias. Descúbrelo ahora