Capítulo III : Poderes mágicos

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Jack empujó temeroso las pesadas puertas de madera, que crujían mientras se abrían.

Se encontró en una sala, al igual que las otras, hecha de madera. Era larga y alta iluminada con candelabros y ventanas que dejaban entrar la luz del sol. En ella había más personas, sentadas a lo largo de una gran mesa llena de comida, aunque la mayor parte estaba vacía. Muchas personas vestía con una túnica blanca como la suya pero otras llevaban una verde. Al final de la estancia se encontraba un ser que Jack no pudo reconocer: era alto, muy alto, con pelo largo y castaño, ojos verdes y orejas puntiagudas.

Cuando este ser le vio, se levantó y se dirigió hacia él con una sonrisa en la cara, cosa que no tranquilizó mucho a Jack, que permaneció inmóvil. Jack observó que llevaba, al igual que él, una túnica blanca, pero parecía que brillaba por sus remates dorados

Cuando ese ser desconocido estuvo a unos metros de él, con una armoniosa y melódica voz, anunció:

-Hijos de la Tierra, Jack Walk- dijo al tiempo que le levantaba el brazo derecho- nuestro nuevo invitado, pasará a formar parte de la Escuela de Magia de la Tierra. Para ello mañana se iniciará en el arte de la magia con el ritual sagrado. Hagamos que su estancia aquí sea lo más cómoda posible. Gracias.

El comedor estalló en vítores y aplausos. Jack se puso un poco colorado sin entender bien lo que pasaba.

-Hola Jack- se dirigió ahora en privado el ser que acababa de dar el discurso - soy Elwë Nólatári, el director de la Escuela de Magia de la Tierra. Como podrás ver, soy un elfo y, antes de nada, me quería disculpar por las faltas de ortografía y expresión que hayas podido ver en la carta de tu escritorio, estoy aprendiendo vuestro idioma y vuestro extraño alfabeto. Me parece mas bonito escribir con mi puño y letra en vez de usar un conjuro para traducir escritos. También me cuesta a veces pronunciar las "r" fuertes.

Bueno, que me voy por las ramas. Esta es la Escuela de Magia de la Tierra una de las cinco escuelas de magia del mundo. Las otras cuatro son la Escuela del Agua, la del Aire, del fuego y, por último la de la Luz. Aquí hay dos cursos iniciación y perfeccionamiento. Las personas con la túnica blanca como tú, son alumnos que no han pasado el examen de iniciación. Las que la tienen verde, están en el curso de perfeccionamiento. Una vez superado este curso, eliges otra Escuela de Magia dónde estudiar. Cuando hayas termunado todas las Escuelas, tienes la posibilidad de ir a la Escuela de la Luz, que deberás superar para acceder a ser profesor de un Escuela o un alto cargo del gobierno o administración. Cuando la superes, se te dará una túnica como la mía: blanca y dorada. Cada escuela tiene un color; la nuestra es verde, la de agua azul oscuro, la de fuego rojo y la de aire un color entre gris y azul claro. Cada escuela tiene una esfera de poder en lo mas profundo de sus muros, bueno, en este caso cortezas - bromeó el director, que consiguió hacer sonreír a Jack- esa esfera es lo que nos da poder, lo que nos mantiene con vida. Esa esfera de la que te hablo es la razón por la que estas aquí. Dime, Jack, ¿no has visto desde el día de tu cumpleaños cosas extrañas?- preguntó interesado Elwë.

-Sí- contestó Jack- ayer, de camino a la escuela, un chico extranjero, Luis me pegó un puñetazo y me tiró al suelo. El dolor del golpe se esfumó rápidamente y la marca del moratón también, cuando me incorporé vi que los árboles..le estaban pegando... Y, por la tarde curé una herida a una niña tan solo al apoyarle la mano en el hombro.- dijo Jack tímidamente esperando que no le tomaran por loco.

-Efectivamente, Jack, ese es el tipo de privilegios que tiene un mago de la Tierra- le explicó- ahora pasemos a enseñarte la escuela. En la planta baja está el gran comedor, que es la sala donde estamos, el jardín y la entrada. En la segunda están las clases para los alumnos de iniciación y la biblioteca. En la tercera las clases para los alumnos de perfeccionamiento y la sala de pruebas, dónde se examina. Una planta más arriban están las habitaciones y, en la azotea están las almenas y los dormitorios de los profesores. En una planta más baja que la nuestra, en las raíces del árbol, están las habitaciones con aparatos y herramientas que usaras en tu aprendizaje, como calderos y otros objetos mágicos.

-Ahora come algo- insistió el director- tendrás hambre. Hoy tienes el día libre, puedes pasarlo acomodándote o conociendo la escuela. Nos vemos a la hora de la comida a las 14:30 y a la cena, a las 21:00. Ahora me voy, que tengo que dar clase. Adiós.- Se despidió alegremente Elwë.

Jack decidió hacer caso a su superior y comer algo, ya que le rugían las tripas del hambre.

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⏰ Última actualización: May 02, 2015 ⏰

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