El Verano De Mi Primer Beso

Capítulo 9

Al llegar a casa los tres debimos escuchar un enorme regaño de mamá sobre nuestra falta de responsabilidad y el porqué no me dejaría salir más nunca en mi vida ( o al menos hasta que fuera una joven responsable) bah, todos teníamos bastante claro que no saldría hasta mudarme de esa casa pero eso no era importante ahora; me siento bastante mal porque Dereck estará en problemas con su madre por mi culpa, el pobre no ha dicho una palabra desde que llegamos de la comisaría. Una vez que el padre de Anny llegó a recogerla, mamá por fin nos dejó solos y pudimos ir a dormir, o al menos intentarlo porque creo que ninguno durmió demasiado esa noche.

Despierto con un terrible dolor de cabeza sin saber qué hora es, solo noto el sol que se cuela por la ventana intensificando la puntada del lado izquierdo de mi frente, creo que esto es a lo que llaman resaca aunque no me siento tan mal porque no bebí demasiado.

Arreglo un poco y mi cabello y froto mis ojos, cuando reacciono completamente veo a Dereck salir del baño con unos pantalones de deporte grises y la toalla rodeando su torso desnudo, su cabello luce mojado así que supongo que se duchó mientras yo dormía; me mira pero no dice nada y se dirige al escritorio para ponerse sus gafas.

Carraspeo mi garganta sintiéndome algo nerviosa - Oye Deck, yo- Hablo moviendo mis pies con nerviosismo cómo suelo hacer en este tipo de situaciones, Él ni si quiera me mira - Yo quiero decir que lo siento, no debí meterte en todo este rollo, y por defenderme a mí y todo eso estás golpeado y probablemente castigado y me siento terrible por eso.

Finalmente Dereck se voltea para mirarme sin una expresión clara que me diga cómo se siente o si está molesto conmigo, cosa por la cual no podría culparlo siendo sincera; observo el golpe al rededor de su ojo derecho que empieza a tornarse de un tono violeta que destaca mucho en su piel pálida y cremosa.

- Max mentiría si digo que no estoy un poco molesto porque te lo advertí, pero no es tu culpa si? Yo fuí porque quise y me metí en esa pelea por la misma razón, no te culpes ok.

- Pero, tu madre.

- Si, va a matarme pero no por tí Maxi Waxi - Dice y se sienta al borde de la cama conmigo, ahora su mirada ya luce como el amable Dereck de siempre, cosa que me tranquiliza algo - Además, besé a Stephanie Beck- Menciona con una gran cara de orgullo.

- ¿¡Que besaste a la chica más popular de toda la jodida preparatoria!? - Se me hace difícil ocultar mi sorpresa.

- Que te puedo decir, tengo mis encantos- Ambos reímos.

Un rato después del desayuno la madre de Dereck vino a recogerlo así que se fué, prometiendome que me contaría todo lo más pronto posible, luego de eso me di una ducha y bajé a la cocina donde mamá se encontraba.

- Max ayer no te lo dije porque estaban tus amigos pero no creas que esto que hiciste no tendrá consecuencias- Menciona en un tono amenazante.

Todo estaba siendo demasiado bonito para ser cierto, ya me extrañaba que no nos habían castigado.

- Bueno ¿Cuál es el castigo ahora?- Digo un poco aburrida con todo esto y mamá me mira enojada.

- Tranquila estos días de aburrimiento ya no serán comunes en tu vida, porque buscarás un empleo de verano hasta que entres en la universidad.

¿QUÉ?

¿Empleo? Esto no puede ser cierto

Por fin estamos de acuerdo en algo querida amiga.

- ¡Mamá pero son mis últimas vacaciones antes de ir a la universidad!- esperé que con eso  mamá entrara mágicamente en razón y dijera: " oh Max tienes razón, no puedo arruinar tu verano así que  quédate viendo doramas tirada en tu cama todo el día ", creo que es bastante obvio que eso no sucedió, en cambio recibí un grito de mi madre diciendo que mañana a primera hora iría con Lizzie a buscar un empleo de medio tiempo.

Subo enojada las escaleras y me encierro en mi habitación como suelo hacer cada tarde a ver doramas, solo que está vez puede que sea la última en mucho tiempo así que me acomodo sobre mi cama, coloco la laptop en mis piernas y me enfoco en disfrutar mi última tarde de vagancia. Una hora y media después sigo aquí terminando el penúltimo episodio de "el amor es un capítulo aparte" cuando una notificación de mi celular hace que deje de hacerlo.

Es un mensaje privado de Instagram, nada más y nada menos que de Chaze, me sorprendió un poco por no decir que demasiado ver qué me escribía así que decido abrir el mensaje y leer lo que dice:

Él: no supe que paso contigo luego de ir todos presos, estás bien?

Yo: Bien castigada y mañana debo ir a buscar empleo pero fuera de eso, estoy bien:)

Yo: por cierto, no te di las gracias por defenderme ayer.

Espero unos segundos y como veo que no responde, continuo viendo mi serie hasta que unos quince minutos después me llega el mensaje.

Él: no tienes que agradecerme, no podía dejar que te hicieran daño por más de que tú sola te defiendes bastante bien hahaha.

Es obvio que se refiere al golpe que le dí a ese idiota, aún me duelen los nudillos debido a eso.

Yo: Actúe sin pensar pero supongo que me defiendo bien sola, aún así gracias;)

Él: de nada, oye en cuanto a tu empleo en el centro comercial hay una nueva tienda de panecillos y buscan empleados, conozco al encargado y me tomé el atrevimiento de hablarle sobre ti, espero no te moleste.

Yo: no me molesta, en realidad gracias! Mañana temprano iré.

Él:  No hay de que chica Green day, así nos veremos seguido.

AY POR DIOS! ya no hay duda de que quiere verme.

¿Cuál es la emoción? Quizá solo quiere ser tu amigo.

Bueno yo también quiero ser su amiga solamente, ni que me gustara, solo es  lindo.

Sigue mintiendote así, vas muy bien.

Yo: sí, genial;)

Pienso un poco antes de enviar el siguiente mensaje pero me arriesgo a hacerlo, la verdad creo que voy por buen camino con él así que dejo la pena a un lado y presiono enviar.

Yo: oye me darías tu número? Digo para hablar mejor, si no te molesta.

Tarda aproximadamente un minuto en responder, el jodido minuto más largo de mi vida, pero al final me da su número y pasamos la tarde conversando hasta casi la noche, y entonces me doy cuenta de que ya tengo un nuevo amigo al fin y eso me hace irme a dormir con una enorme sonrisa.