El Verano De Mi Primer Beso

Capítulo 2

En coreano existe una palabra para lo que nosotros conocemos como "primer amor", es 첫사랑 que se pronuncia como cheos-salang o algo así; esta frase suele ser muy importante dentro de la cultura coreana ya que para ellos el primer amor es tooooodo un tema. Yo sabía esto porque amaba los dramas asiáticos desde que tenía memoria, justo como el que miraba ahora titulado: el amor es un capítulo aparte. Lo sé, demasiado empalagoso incluso el nombre pero era bastante divertido, además de que el protagonista era demasiado guapo.

Miro mi serie mientras bebo un vaso de café helado con caramelo, la bebida con la que he estado obsesionada las últimas semanas, ya que a penas comienzan mis vacaciones de verano y no tengo permiso para salir con mis amigos como cualquier chico normal, paso mis tardes viendo series y comiendo mucho más de lo que quisiera admitir. Estoy bastante concentrada mirando como el chico está a punto de besar a la protagonista por primera vez ya en el capítulo 10 del drama, cuando Sarah entra abriendo de golpe la puerta de mi habitación haciendo que de un brinco en mi cama.

- ¿QUE RAYOS PASA CONTIGO S?- le grito al instante, por poco y derramo mi delicioso café por su culpa, estos niños me sacarán canas y ni si quiera son mis hijos.

- Es que mamá no quiere llevarme a comer helado a la nueva heladería del centro comercial y me lo había prometido- dice haciendo un puchero, tiene 9 años pero aún usa sus caras de bebé para manipular, y teniendo esa ternura y esos grandes ojos azules normalmente lo consigue.

- ¿ y yo que tengo que ver en eso? que yo sepa te lo prometió mamá no yo

- Mamá dijo que si alguno de los mayores podía me llevaran y Lizzie está de paseo con su tonto novio- dice cruzándose de brazos. Genial, no me dejaban salir pero para esto si tenía todo el permiso y la edad suficiente.

Dejo a Sarah allí y bajo a hablarle a mamá, no tenía ganas de salir y mucho menos a andar de niñera. La encuentro en el área de lavandería de la casa pasando la ropa a la secadora.

- No la llevaré, lo siento pero mi drama está en la mejor parte- digo mientras cruzo mis brazos y alzo una ceja, la misma actitud corporal de mamá para negarme los permisos casi todo el tiempo.

- ¿Ah si? pues no te he preguntado así que ve a vestirte y la llevas, es cerca así que no se te caerá una pierna por llevar a tu hermana- arg, sabía que iba a obligarme, bueno podría sacar provecho de esto ya que debo ir.

- Bueno, iré si me dejas comprar un helado de tres sabores solo para mí, lo comeré mientras termino el drama que tu interrumpiste.

- No estás en condiciones de exigir nada Maxin- dice tomando mi misma postura de brazos cruzados.

- Vamos, es una pequeña ... motivación- digo sonriendo como un angelito, mamá se da por vencida rápido y acepta mi proposición así que subo contenta a mi habitación.

-Vístete mocosa iremos por helado- Le digo a Sarah mientras busco una sudadera para colocarme, ella sale contenta de mi habitación y va a la suya ( o más bien la que comparte con los otros dos mounstritos) a ponerse los zapatos.

Llegamos al centro comercial y Sarah corre a la tienda de helados emocionada, yo por mi parte entro con más calma y me coloco los air pods para así evitar a la gente, es mi método de escape social más utilizado. Avanzamos hacia al mostrador y ella se emociona viendo todos los sabores de helado.

- Buenas tardes, señoritas ¿puedo ayudarlas?- Escucho que habla un chico del otro lado del mostrador y subo la mirada desde mi teléfono intuitivamente para mirarlo, lo que no espero es que sea tan, pero taaaan guapo. Es alto y delgado, tiene los ojos verdes y una sonrisa demasiaaaaaado linda, viste el uniforme de la heladería junto con una gorra. Caigo en cuenta de que lo estaba mirando mucho así que carraspeo mi garganta antes de hablar.

- Eh si mi hermana quiere un cono de helado, rápido s elige uno- Le digo volviendo a centrar la mirada en mi celular para evitar mirarlo a el directamente.

- Oye Max hay muchos sabores, ¿cual debería elegir?- Me dice mi hermanita pero no le respondo porque estoy enfocada en mover la pantalla de mi celular de un lado a otro aparentando que lo estoy usando para no enfocarme en el chico guapo que tengo en frente.

-Pequeña, yo te recomendaría el de torta suiza, es mi favorito- le oigo decir al chico y miro de reojo como Sarah asiente contenta.

- Excelente elección pequeñita- le dice y choca los cinco con ella; Además de lindo, amable mmmm.

Mientras doy vueltas nerviosamente por mi celular presiono sin querer el botón del bluetooth desconectando los audífonos y haciendo que la música que oía ahora suene bastante alto atrayendo la atención de todos en la heladería, La pauso rápido y veo como el chico que atiende me mira divertido, yo quito la mirada avergonzada y le pregunto a Sarah si ya eligió su helado para pagar e irnos.

-Sí, ya paga- dice concentrada en devorar el helado que tiene en las manos. Saco la tarjeta y se la entrego al chico, el me mira sonriendo antes de decir:

- También me gusta Green Day, tienes buen gusto- dice refiriéndose a la canción que sonaba en mi celular.

- Ehh, gracias?- Respondo algo nerviosa, el solo me sonríe y me devuelve la tarjeta rozando levemente mi mano en el proceso. Después de eso salimos de la heladería y al regresar a casa, aún podía sentir mis mejillas calientes durante el camino. 

Llegamos a casa y subo directo a mi cuarto, quito Netflix de mi laptop para abrir instagram y buscar al chico de la heladería, no tenía ni idea de su nombre pero mis habilidades de stalkeo son bastante buenas al decir verdad. Recuerdo que olvidé comprar mi helado, hummm ya tengo una excusa para volver mañana.

Intento encontrarlo buscando con distintos nombres que llegan a mi mente:

Se llamará ¿Jack?, busco pero no tengo éxito.

¿Tal vez Jhon, Mason? tampoco.

Tiene cara de Nick, busquémoslo así, pero no obtengo resultados. Después de 30 minutos y de al menos unos 15 nombres me doy por vencida, veo la hora y noto que ya son las siete así que no debe faltar mucho para cenar así que sanjo mi búsqueda por el  momento, lo que sí tengo seguro es que mañana iré otra vez y ya tengo una misión:

Averiguar el nombre del chico guapo de los helados.