hola! esta es una historia de Camilo y T/N, he visto encanto mil veces y no me podía quedar sin hacer una historia. Desde pequeños hasta viejitos, algo imposible? tal vez, pero no para nuestros Camilo y T/N.
: todo bien? has estado muy raro últimame...
T/n T/a: Llegó el día de la boda de mi mejor amiga y con mi suerte aún no se me notaba mi embarazo así que el vestido me quedó a la perfección, era rojo y los hombres usaban traje negro con una corbata roja claro, este era mi vestido.
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Camilo: wow amor, te ves hermosa.- dijo con los ojos brillando.
T/n: gracias amor, tu igual te ves muy guapo.- sonriendo.
Yo me veía al espejo ya arreglando unos últimos retoques de mi cabello mientras llega Camilo abrazándome por detrás.
T/n: amor, vas a hacer que se arruine mi peinado.- dije riéndome.
Camilo: perdone señorita.- riendo.
Mirabel a lo lejos: chicos! ya es hora!
Camilo: será mejor que ya nos vayamos.- sonríe y me da un beso en los labios.
T/n: sip.
Bajamos las escaleras y como de costumbre fuimos los últimos en bajar ya que todos estaban listos.
Pepa: vámonos niños que ya vamos tarde!
Antes de que yo llegara a la iglesia pasé a ver a Paulina junto con Martha y las demás damas, para ayudarla a retocarse y demás.
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A pau nunca le gustaron los vestidos tan extravagantes, pero igual el vestido que traía era hermoso.
T/n: wow! Pau te ves divina!- dándole un abrazo.
Martha: ya se! no puedo creer que hoy sea el día de tu boda.- con una lágrima saliendo de su ojo.
Yo al ver eso la abracé también, así quedamos las tres abrazadas, lo que provocó que a mi también se me escapara una lágrima.
T/n: bueno Martha y yo nos tenemos que ir ya que ya casi empieza la boda.- secándome la lágrima.
Paulina: las veo al rato chicas!
En la iglesia:
Sacerdote: Queridos hermanos: Estamos aquí junto al altar, para que Dios garantice con su gracia su voluntad de contraer Matrimonio ante el Ministro de la Iglesia y la comunidad cristiana ahora reunida. Cristo bendice copiosamente su amor conyugal, y él, que los consagró un día con el santo Bautismo, les enriquece hoy y les da fuerza con un Sacramento peculiar para que los guarde mutua y perpetua fidelidad y pueden cumplir las demás obligaciones del Matrimonio. Por tanto, ante esta asamblea, les pregunto sobre su intención.
