El Pecado de Savannah

CAPITULO 7

Savannah Anderson

-Linda ya son las 4:00pm tu turno a terminado, ya puedes ir a casa - La voz del señor mati se escucha a mis espaldas

-Ohh, se me fue el turno muy rápido muchas gracias espero le allá gustado mi trabajo - le comento lo último dudosa.

-Claro que me a encantado tu trabajo, eres muy buena en ello, te veo mañana Savannah que descanses - me comenta mientras se gira a la cocina para seguir atendiendo.

Me voy hacia la parte del servicio para tomar mis cosas y salir a casa el día a sido maravilloso, le gente es muy amable eh recibido muy buena propina pero sobre todo la que los hermanos Brown me han dejado, por supuesto que voy a regresarles casi todo, solo me quedare con lo que nos corresponde que es el 15%.

Tomó mi mochila y salgo del trabajo camino por las calles que están saturadas de gente y veo a muchos niños jugar en el parque, siento algo muy extraño como si alguien me observará.

Volteo a todos lados pero no veo nada fuera de lo normal , por dios me estoy volviendo paranoica es mejor que piense en otra cosa en este pueblo nadie quiere hacerme daño.

Analizó lo que sucedió en la mañana con los Brown, y me parece bien que les haya dejado las cosas en claro y con eso no vuelvan a acercarse.

¿Que clase de persona creen que soy?
Que con una disculpa ya va ser suficiente para olvidar el bochorno que hicieron pasarme, que por dejarme mucha propina ya pueden comprar mi perdón.

Una mueca sale de mi boca, al imaginar que ellos así es como deben de estar acostumbrados con las mujeres, con dinero y una disculpa solucionan las cosas.

INGENUOS

Conforme me voy acercando a mi casa me doy cuenta que el foco del recibidor está apagado, que extraño por la mañana lo deje encendido, tal vez el foco se fundió

Sacó las llaves de mi bolsa y abro la puerta, reviso que el apagador este correctamente bien,  lo encuentro en el botón de encendido pero aun asi no hay luz.

Me acerco hacia el apagador de la cocina y lo enciendo pero tampoco aparece la luz, y reviso todos los demás apagadores y ninguno enciende.

Joder, lo que me faltaba han cortado la luz pero que extraño los Brown me aseguraron que estaba todo al corriente.

Salgo y reviso la caja de luz, las pastillas se encuentran en su lugar pero aún asi no hay luz.

No puedo creer esto, cuando quiero alejarme de los Brow aparecen desgracias en mi vida que los incumben a ellos, medito en sí quedarme a oscuras todo el resto de el día y la noche oh acudir a su casa y pedirles ayuda.

Lo medito demasiado tiempo pero decidió que no puedo quedarme sin electricidad, tengo que ir con ellos si oh si.

Cruzó la calle y camino los pocos metros de distancia que nos separan, entonces me acerco y toco el timbre.

Solo espero que ya estén en casa y puedan solucionar esto rápido, no quiero verlos durante tanto tiempo oh perderé la cordura.

Alexander Brown

Salimos de la empresa a las 2:30pm y llegamos justo a tiempo cuándo la florecilla sale de la cafetería, la seguimos a una distancia prudente y por un momento veo que se tensa y voltea hacia todos lados, creo que sintió nuestra presencia.

Cuando no logra ver a nadie, continúa caminando un poco más relajada.

-Vamos a adelantarnos, tenemos que estar en casa para cuando ella llegue, se llevará una pequeña sorpresa - Max menciona lo último de forma un poco graciosa y yo solo asiento con la cabeza.