38: Fuerza

539 75 74
                                    


Sábado

10:00 am

Hunter les pidió que los dejaran tranquilos por el resto del día, él trataría de ayudar con el ánimo de Luz en medida de lo posible y los mantendría informados de cualquier eventualidad. Esa petición fue aceptada sin quejas, pero no sin disgustos.

Después de lo que pasó Luz, todos deseaban ayudar a su manera, por eso Skara y Boscha se concentraron en su búsqueda, sabían lo que debían hacer y se concentraron en eso, dejándole a los demás el cuidado de Luz.

Willow anqué quiere a Luz, no se compara con la ansiedad que sintieron Amity y Gus, los cuales se la pasaron dudando si era prudente escribirle a Hunter en busca de respuestas. Podría ser que su interrupción arruine algún tratamiento, quizá solo sean una molestia, es muy posible que solo se angustien más ya que lo más seguro es que reciban un "les informo después" como respuesta. Eso los llevo a hablar entre ellos para tratar de relajarse.

O mejor dicho, planear que harían el sábado.

No iban a dejar a Luz sola, ellos también querían ayudarla a como diese lugar, por lo tanto su discusión se centró en las distintas alternativas a su alcance, evaluando con detenimiento todas sus opciones en busca de algo que sirva para hacerla sentir mejor, estabilizarla, tranquilizarla o por lo menos distraerla.

No fue fácil, tampoco fue rápido, pero al final llegaron con una opción. Visitar una nueva casa embrujada.

Gus ya presentó su actividad, así que como tal la escuela no le exigirá nada en un futuro cercano; al menos eso es lo que concluyeron, pero eso no cambiaba el hecho de que seguía sin recibir nuevos integrantes para el club de ocultismo. Por lo tanto, decidieron matar dos pájaros de un tiro.

Tienen una salida en grupo a un lugar que la mantendrá aislada del mundo, donde sí o sí no pensara en lo ocurrido ya que no habrá ningún ser vivo que pueda activar su paranoia; a excepción de cualquier cucaracha que se encuentre en el sitio, y pueden sumar una nueva actividad para Gus en caso de que sea necesario. Lo único que necesitaban era que Luz accediera, o que Hunter le diera el permiso de salir.

Y eso los lleva al día de hoy.

Hunter no les dio luz verde, pero Luz decidió ir con ellos de todos modos, así que ahora los dos están esperando frente a su casa con mucho nerviosismo, preparados a medias para llevarla a su destino.

+ ¿Ya has venido antes? – Gus negó con la cabeza, poniendo un poco nerviosa a Amity.

+ Espero que todo salga bien – los dos respiraron con calma, acercándose a la puerta que le indicó Luz por mensaje. Ellos tocaron el timbre con bastante preocupación, siendo atendidos mucho más rápido de lo que esperaban.

+ Hola, ustedes deben ser Amity y Gus, ¿cierto? – la primera en aparecer fue la versión adulta y con lentes de Luz, lo cual les indicó que ella era la Sra. Noceda.

+ Mucho gusto – ambos saludaron al unísono, sacándole una leve sonrisa a la señora.

+ Pasen, siéntanse como en casa – ellos le hicieron caso, dirigiéndose rápidamente al mueble para esperar a Luz. Pero había un problema.

+ Hey – Eda estaba tirada ahí, portando una sonrisa algo vanidosa al verlos –, ¿Qué los trae a esta humilde morada? – Ella alzó una ceja al notar algo inesperado –, no recuerdo haber invitado a un camaleón.

+ Ah, él siempre está conmigo – Gus respondió con nervios, tocando a su amigo en su hombro –, él no hace nada lo prometo, a veces parece que no está aquí... pero siempre ha estado con nosotros.

Hermanos a la obra (Lumity /Huntlow)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora