𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 05

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Steve es un omega precioso.

Pese a que no se había cambiado, ni maquillado.
Mucho menos arreglado. Pero para Eddie era la
obra de arte más real del mundo, una obra de arte con una pequeña nariz arrugada, cabellos
despeinados, pijama de corazones y que sostenía
una bolsa de basura en manos.
¡Qué bonito es mi omega! ¿Verdad, lobito? Pensó
Eddie en ese instante.

-Eddie ¿Qué haces aquí? -dijo removiéndose
incómodo por la sorpresa y obligando a Eddie
a dejar de pensar mucho haciendo un puchero
luego. Steve suspiró sabiendo que hizo tal
mueca porque lo llamó por su nombre y no apodo- ¿cariño?

El alfa dio un salto feliz al escuchar su apodo por la voz algo adormilada del omega.

-¡BUENOS DÍAS STEVE! -chilló dando saltitos, sonriendo, pero de repente tosió falsamente forzando la garganta y tragando duro,
Eddie creía que se estaba dejando como una
infantil-. D-Digo... Hmm Hoy.. Hoy es nuestra cita.
Primera cita, primera cita.

Steve abrió sus ojos en grande.
Por supuesto, es gracias a eso que la alarma había sonado tan temprano, que de paso, amargó su mañana y lo dejó con un gran malhumor por
despertarse un sábado cuando esos días son
sinónimo de flojear todo el día viendo series y
comiendo lo que queda del refrigerador.
Lo peor es que de nada sirvió porque había
olvidado por completo la cita con su alfa.

-Cierto, espera que bote la basura en el contenedor y me arreglo un poco -dijo con el tomando marcha, sólo se haría un cambio de ropa rápido y lavaría su rostro puesto que ayer antes de dormir se había dado un baño con agua tibia. Como sea, cuando llegó al contenedor dejó la bolsa ahí y se dirigió a la puerta, sin embargo regresó donde estaba Eddie meditando lo que iba a hacer-. Ahora vuelvo, Eddie -se para de puntitas y le da un beso en la mejilla de forma rápida al alfa, sonrojándose al instante para después separarse e irse corriendo dentro de su hogar.

Y Eddie... Eddie quería morir porque no
puede con tantos lindos sentimientos del momento en que el aroma de Steve se quedó en su mejilla.

¡𝑆𝑜𝑦 𝑡𝑢 𝑜𝑚𝑒𝑔𝑎, 𝐼𝑑𝑖𝑜𝑡𝑎!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora