Canción de mi corazón.

28-Casada con el diablo.

AR: No me arrepiento de haber sido la persona que te mató Adnan Yaman... por primera vez en 20 años, no me arrepiento...

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Ali Rahmet volvió al hospital, fue a la habitación de Hünkar, cerró la puerta de un portazo, aún enojado por lo que había leído.
Tanto Hünkar como Bahar se asustaron, Bahar se cayó de la silla, por suerte no fue un golpe fuerte.

B : ¿Qué fue ese sonido?

H : Alí Rahmet.
¿Qué pasa porque estás enojado?

Ali Rahmet ayudó a Bahar a ponerse de pie.

AR : Lo siento, no quise asustarte.
¿Estás bien Bahar?

B : Estoy bien, no se preocupe, Sr. Ali Rahmet.

Ali Rahmet se acercó a Hünkar y le dio un suave beso en la frente,acariciando su mejilla.

AR : Perdóname, Hünkar, no quería asustarte.

H : Ali Rahmet esta bien no hay problema, pero
¿estás seguro de que estas bien y no paso algo?

AR : Sí, sí, estoy bien.

H : Bahar, ¿estás bien?

B : Si señora, estoy bien, ya que el Sr. Ali Rahmet ha llegado, me iré a casa - abrazo a Hünkar Hanım - vendré a verla mañana, gracias por el consejo de hoy.

H : De nada Bahar, no olvides que siempre te ayudaré en lo que quieras.

B : Sí, adiós Sr. Ali Rahmet.

AR : Adiós Bahar, gracias por quedarte con Hünkar y de nuevo perdón por asustarte.

Bahar salió de la habitación, dejando solos a Ali Rahmet y Hünkar,Fekeli se sentó junto a Hünkar y besó su mano, Yaman Hanım acarició la mejilla de Ali Rahmet y se dio cuenta de que sus ojos estaban hinchados y rojos cuando sus  se encontraron con sus esmeraldas.

H : Ali Rahmet, ¿lloraste o pasó algo?

AR : No, no pasó nada malo, cálmate mi amor.

H : Ali Rahmet, ¿estás seguro? ¿Puedes decirme si pasó algo?

Ali Rahmet no dejó que Hünkar terminara su discurso y lo abrazó, quería envolverlo entre sus brazos y protegerlo de todos, quería ser su escudo de acero.
Era una rosa, tenía espinas pero aún era frágil, todos tenemos un punto débil.

AR : No pasará nada malo, es que te extrañé mucho y dejarte aquí sola me asustó.

H : No volverá a pasar nada malo, esos tipos ya no pueden hacernos daño.

Ali Rahmet se giró y miró a Hünkar, hizo espacio para que se sentara a su lado, Hünkar apoyó la cabeza en el hombro de Ali Rahmet y tomó su mano.

AR : Hable con el médico, espero que le den de alta en dos días.

H : Extraño mucho a mi madre, no me gustan los hospitales, estas paredes me deprimen.

AR : Saldrás pronto y también puedes quedarte en el invernadero todo el tiempo que quieras.

Hünkar vio que Ali Rahmet había traído algunos libros.

H : Ali Rahmet, ¿puedes leer algo?
No tengo sueño.

AR : Bien, veamos qué tenemos aquí.

Ali Rahmet tomó uno de los libros, tenía poemas.

AR : Dime un número...