Canción de mi corazón.

8-¿Quien era?

Hünkar vino y se sentó lentamente en la cama con ellos, y se durmió.
El silencio y la paz reinaban en la mansión.
En ese momento, un auto se estacionó en la puerta de la mansión.

------------᯽------------

Züleyha se bajó del auto y llamó a Gaffur para descargar los paquetes que trajo.
Entro a la mansión y todo estaba en silencio, solo había ruido en la cocina, Saniye y Fadik estaban preparando la cena.

Z : Hola Saniye.

S : Bienvenida Züleyha, ven y siéntate.

Z: ¿Se portaron bien los niños?
¿Está todo demasiado tranquilo?

S : Estaban con la señora Hünkar en la habitación, pero hace mucho tiempo que no los escucho.

Z : Iré a ver.

S : Voy contigo, Üzüm estaba con ellos.
Fadik observa la cena.

Ambos salieron de la cocina y se dirigieron a la sala, al llegar vieron la mesa llena de papeles y dibujos, platos con algunas galletas sin comer, así como libros y juguetes.

Z : Tal vez estaban en la habitación.

Subieron las escaleras y entraron a la guardería, ahí estaba Leyla durmiendo plácidamente en su cuna, y Hünkar abrazando a Adnan por un lado, y Üzüm por el otro, estaban dormidos.
Fue una imagen hermosa.
Cuando Adnan se despertó, vio a su madre y a Saniye de pie en la puerta del dormitorio.

A : Ya llegó mamá,abuela, -se acercó a Hünkar y se llevó los deditos a las mejillas- despierta.

En ese momento, Hünkar y Üzüm despertaron, Adnan saltó de la cama y abrazó a su madre.

Z : Buen chico, parece que te divertiste mucho con tu abuela.

S : Sí mucho.

Ü : La abuela nos contó muchas historias, también jugamos mucho.

Üzüm abrazó a Hünkar con más fuerza.

U : Mamá Saniye la abuela Hünkar nos canta unas hermosas canciones.

Z : Mamá, estas cosas traviesas no te cansaron, ¿verdad?

H : No hija mía, como me cansan estos hermosos niños, siempre tengo tiempo para estar con mis nietos.

S: Señora, ahora hemos limpiado la mesa y puesto la mesa.

H : Bien, Saniye, trabajen en silencio, no se preocupen.

Dejaron a la pequeña Leyla dormida y Hünkar y Züleyha bajaron al salón con los niños.
Comenzaron a ver algunas de las cosas que compró Züleyha, juguetes y ropa para los niños, y también algunas cosas para Üzüm.
Los favoritos de Hünkar eran los días en que en la mansión se escuchaban risas infantiles no solo gritos, llantos y palabras hirientes.

-----------᯽------------

Ali Rahmet no podía dormir, seguía sentado junto a la chimenea, mirando su rosario en una mano y un pañuelo de mujer en la otra, el pañuelo de Yaman Hanım, a quien amaba mucho.
Todavía recuerda a Hünkar, que se había quedado dormido en sus brazos la noche anterior, su olor, sus pestañas y cada peca, hoy lo extraño tanto, quería escuchar su voz, ver sus ojos esmeralda, abrazarla.
Toma su pañuelo, se pone la chaqueta y sale tranquilamente de la mansión, se sube al auto y se pone en marcha.

-----------᯽------------

Hünkar había hecho todos los trámites del baño, se puso el camisón, tomó sus medicinas, pero no durmió, y agarró uno de los libritos de flores escondidos entre las páginas.
Salió al balcón a tomar aire, miró el cielo lleno de estrellas, y en ese momento vio un auto parado en la puerta de la mansión, luego vio a Ali Rahmet.
En ese momento sus miradas se cruzaron, Hünkar se veía muy hermosa, su cabello estaba suelto y vestía un chal, Ali Rahmet quedó hipnotizado nuevamente, incluso logró ver como esas hermosas esmeraldas brillan en la noche.
Hünkar lo miró y lo que dijo salió como un susurro.