s e v e n

1.2K 169 0
                                    

—¿Quieres un helado?

Peter negó, frunciendo su nariz.

—Me recomiendan no tomar nada frío a menos que haya mucho calor, me podría afectar la garganta muy fácilmente y me enfermaría —dijo.

Wade lo pensó dos veces antes de preguntar, hasta que habló en el tono más bajo y sutil que pudo tener.

—Eres muy delicado, ¿No?

Peter asintió, sin mirarlo.

—Veo que tú no tanto, ¿Es porque no es tan grave no? —dijo Peter—, ¿Vas a ir a cirugía, verdad?

Wade frunció un poco el ceño.

—¿Cómo sabes?

—He estado mucho tiempo con estas cosas, algo he aprendido —dijo—. Y sé que el hígado se regenera, te quitan lo malo, dejan lo bueno y en unos meses está todo como si nada.

—¿Tú crees?

Peter notó que Wade había bajado la vista y se notaba asustado y nervioso.

—Wade —Peter tomó ambas manos de su compañero—. Claro que lo creo, también creo en tí.

Sonrió y el mayor soltó sus manos para tomar sus mejillas. Peter tomó las manos de Wade, manteniéndolas apretadas contra sus mejillas y sonrió.

Ambos compartiendo el mismo brillo en la mirada, hasta que se abrazaron con fuerza.

—Peter, creo que te necesito más de lo que creí.

—Wade... Ya estás muy sensible, hagamos algo divertido, no puedo dejarte así —murmuró Peter.

—¿Por qué?

—La tristeza lo empeora.

—No puedo estar triste si estoy contigo.

—Wade, estaré contigo, ahora, necesitas distraerte y dejar de pensar en eso, ¿Bien?

Wade asintió, con el rostro escondido en el hombro del otro.

Peter lo arrastró hasta el piso del cine, él no podía ir a ver ninguna película porque las salas del cine estaban llenas de bacterias y de gente con bacterias también, así que compraron un balde gigante de palomitas y se fueron a pasear por allí hablando de sus intereses, conociéndose más y más y enamorándose inevitablemente del otro.

Se despidieron cuando ya estaba atardeciendo, y Peter debía regresar a su hogar antes de que anocheciera y refrescara de más, porque no podía tomar frío. Wade dejó otro sticker de beso en su frente, para hacer reír a Peter de forma honesta.

Sé dedicaron un "Te amo" mutuo con todo el sentimiento de sus corazones, y quedaron con una sonrisa tonta que permanecería hasta que se encontraran de nuevo en la próxima quimio.

Chemo | Spideypool AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora