LA PIEL ES DE QUIEN LA ERIZA

DUCHA

En aquel momento en el cual yace sobre el horizonte los tonos de un arrebol, mi mente se infiltraba en los recuerdos, divagando sobre las imágenes de momentos junto a lo que hoy extrañaba.

Aquellos amaneceres donde el alba acariciaba su rostro infrigiendo a producir muecas de berrinche.
Los desayunos en su compañía, las horas de juegos,salidas,tardes de película,los días de fotografía, y hasta los días en confrontaciones.

Pero de todo ello extrañaba los momentos donde era vulnerable.

Aquellos momentos donde el único sonido que se infiltraba en mis tímpanos era el de las gotas golpear mi cuerpo.
Hasta el momento donde ella sin ninguna cautela y poco cortes interrumpía uno de mis lugares privados.

Atravesando y arrebatando todo silencio del ambiente.
Llevándose consigo mi atención.

Pues era una fuerte distracción, ya que era una obra de arte para mi vista.
Su cuerpo al efímero del tiempo me deleitaba con la tonalida de gotas estrelladas y plegadas sobre su cuerpo.
Su cabello al paso de la regadera se iba creando un misterio en aquella parte de piel donde con el paso de tiempo en si ocultaba.
Su espalda conformemente rigida provocaba un arco de monturas sorprendentes.

Al va y ven de su cintura mis ojos bailan.
Mis manos tentadas por su tono pálido con color lluvia en su piel se imaginaban el recorrer por su cuerpo.

Como será acariciarla en este instante donde esta tan vulnerable.

Mei mente imaginaba la forma de poder actuar.
Como lo hago?.

Debería comenzar por acercarme a su espalda y poner mi pecho contra ella?.

O mejor llegar sutilmente e irme abrigando a su cuerpo?
Atrapar sus manos.
A pegarme a su lienzo.
Dibujar besos en su cuello a tinta de labios.
O quizás besar su cintura. O mejor morderle?
Cosas así pasaban frente a mi mente.

Pero al momento dado ya no era yo quien elegía. Ella por su cuenta formaba una danza erótica con sus manos por el recorrer de su cuerpo.

Seduciendo mi aliento y dejarme sin palabra ante el bailar de sus caderas.
Sus coordinados movimientos que atrapan sueños y dibujan sonrisas de lujuria me llevaban al rincón de la pared.
Recostándome sobre la fría cerámica que cambiaba de temperatura al contacto de mi cuerpo ardiendo.

Era excitante ver la figura de tan bella dama bailar para mi.
Pero como siempre, ocultando su peculiar sonrisa.

Su timidez en aquel momento ya mostraba su lado amable.

Con sensuales movimientos se giraba dejando ver tan moldeado cuerpo.

Unos labios de color carniz que te hacen creer en el infierno, Por que el deseo de pecar en ellos es inevitable.
Su pecho, no muy voluntuosos, acogedores seria una buena palabra.
Un abdomen plano, que te invita a caminar en el a paso de dedos.
Su gloriosa venus
No muy extraordinaria ni muy común, solo con la chispa necesaria para retorcer tu mente y crear novelas, y no del genero romántico.
Y no dejar atrás sus piernas por su puesto. Esas largas extremidades que tegen deseos con su caminar.
Ella era impecable, era algo así como simplemente perfecta.

Ahora me pregunto. ¿ que sera de ella?

Pero algo que afirmo es, mi ducha la extraña, y yo no me quedo atrás.