Primer Día de Trabajo

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Amanece; después de una noche divertida, pero algo sentimental, tengo que levantarme, aunque ese beso me dejó muchas cosas en que pensar, cuando logró ponerme de pie busco mi traje entre toda mi ropa ya que hoy es mi primer día de trabajo, me lo pongo, bajo las escaleras, tomó mi mochila y volteo hacía la sala, puedo observar que Asia está dormida, -que vida tan más agradable se vive, comiendo, jugando y durmiendo sólo le mando un beso, esperando que no muerda el sillón...

Camino hacía la parada de autobuses, llego y veo a Jo pasar en su moto ignorándome, posiblemente él no me vio o tal vez sí lo hizo, pero no puedo afirmar nada. De pronto un autobús se estaciona frente a mí y se abre la puerta, -el chofer es muy desagradable y huele un poco mal-. ¿A dónde?-Me pregunta-. Al hotel "Royal Revolution"-le dije algo nervioso evitando una mala cara- Son $20-me dice estirándome la mano-, le doy el dinero y busco con la vista un asiento, en la parte de en medio veo uno desocupado con ventanilla, me dirijo hacia él, me siento y voy observando la ciudad, sus habitantes con su ropa estrafalaria, no sé cómo es que el destino me trajo a esta extraña ciudad costera.

De pronto, mientras observo por la ventana, uno de mis recuerdos reprimidos, debido a que no quiero recordar mi pasado, emerge en mi mente, una visión de cuando mi mejor amiga, Taylor, me compró el boleto de autobús, yo le indiqué a ella que lo comprará, ya que no sabía a donde ir y pues, Taylor es gerente de ventas en una agencia de viajes... ella debió tener sus razones para enviarme a este lugar; acto seguido, emerge otra escena donde mi madre llora desconsolada y casi muerta de dolor y mi padre está más que furioso, con una mirada asesina... -Mierda!-grité mientras agitaba la cabeza de un lado a otro, una anciana, del otro lado del pequeño pasillo del autobús me observa con cara de pocos amigos... -Lo siento - Exclamé-y ella volvió a su tejido con gancho que ya llevaba a la mitad.

Después de unos minutos veo un gran edificio cercano, es al mismo a donde fui a hacer mi entrevista y donde fui contratado, nada más y nada menos que el hotel "Royal Revolution", estoy listo para empezar mi trabajo de medio tiempo, - Vamos! Tu puedes ___!! - Me animé a mí mismo, después de que el autobús se detuviera en la parada frente al hotel, baje de este y di un profundo suspiro, detrás de mí la puerta del autobús se cerró y este mismo siguió con su ruta. Caminé hacia la puerta principal, Tara me estaba esperando, muy emocionada agita su mano en señal de saludo -Hey! ___!!!-me grita y me hace señal de que valla hacía ella, cosa que obviamente iba a hacer, algo que he notado es que ella siempre está sonriendo...

Al llegar a donde ella, me abre la puerta -Estas muy elegante-Me dice con un tono halagador; Después de pasar por el inmenso recibidor, la recepción, entrar al elevador y llegar hasta el piso más alto del hotel, Tara me sonríe (de nuevo) - Este será tu puesto, aquí organizarás papeles, tomaras llamadas y todas esas cosas que hace un secretario - Me dice mientras señala con sus manos un escritorio y los objetos que hay sobre él, una computadora, folders, papeleo, una lámpara y una taza de café -Nuestros jefes llegarán en unos minutos.

Mientras ellos llegan decido dar un recorrido por el piso, dejo mi mochila en mi ahora asiento de trabajo, comienzo a caminar lentamente para observar cada detalle del piso; es muy extenso y muy confortable, hay un sillón muy grande, una pantalla, dispensadores de dulces y refrescos, grandes ventanas de cristal, los dos escritorios y los dos pasillos que llevan a las oficinas de ambos gerentes.

Mi concentración en el lugar es interrumpida por el sonido del elevador indicando que alguien subió. Mientras observo los dulces de una máquina, a mis espaldas escucho decir a Tara - Buenos días Señor Bennett. - De manera muy cortés. - Buen día Tara. Responde una voz de un hombre mayor - Oh! Buen día Señor... - Ya te he dicho que sólo me llames Jo, Tara. La voz de último definitivamente me pareció familiar, me brillaron los ojos, se me cortó la respiración y me quedé helado, al darme cuenta de que a un lado del Señor Bennett, estaba nada más y nada menos, que Jo Calderone, ese mismo que me había besado anoche, ese mismo que salió corriendo y disparado en su moto. Voltea su vista hacía mí y su cara de impresión puede que sea igual a la mía. - ¿Tú?

Dark ParadiseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora