𝗣𝗿𝗼́𝗹𝗼𝗴𝗼

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Minhyuk estaba solo en su habitación, se sentía algo solitario pues no estaba acostumbrado a dormir solo. La nostalgia le golpeo de pronto, extrañaba su manada, transformarse y dormir cálidamente al lado de otros lobos, sentirse de esa manera le recordaba que aunque tenía algo de gato, siempre había sido más un lobo, no le gustaba quedarse demasiado tiempo solo, era muy social y amigable, aunque a veces también era huraño y descarado, quizá esa era su parte de gato saliendo a flote.

Mientras recordaba sus días en la manada miró el reloj, eran pasadas las 11, según el reglamento de los dormitorios ya no podía salir, aunque también eso significaba que no habría gente en los pasillos que pudiera verlo escabullirse, claro, sin mencionar al vigilante. Sin pensarlo más salió de la habitación, no pensaba pasar una noche de mal sueño, así que iría a visitar a su amigo y dormiría con él.

Después de una no tan interesante escapada, Minhyuk logró infiltrarse en las habitaciones de los alfas, donde no tardó mucho en invadir la habitación de Lee Jooheon. El el joven alfa apenas sintió el aroma de Minhyuk lo recibió con los brazos abiertos, sintiéndose feliz de poder tener a su amigo junto a él.

—¿No podías dormir? —El beta negó con la cabeza a lo que se aferraba más al alfa. —Me alegra que hayas venido a mí.

Minhyuk escondió su rostro en el pecho ajeno recordando la razón por la que había intentado dormir a solas en su habitación. Su corazón se apretó en su pecho y Jooheon sintió como el aroma de Minhyuk se volvía algo acido.

 Su corazón se apretó en su pecho y Jooheon sintió como el aroma de Minhyuk se volvía algo acido

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Etéreo || Universo RaméDonde viven las historias. Descúbrelo ahora