02 - Busca excusas para hablarle

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Luzu caminaba tranquilamente por el pueblo, en su cabeza se iba mentalizando sobre ir a la casa de Rubius.

Rubius veía a quackity como un niño imperativo, al que tenía que cuidar , y a Luzu como su amigo, serio, tranquilo y divertido. Casi dos polos opuestos ¿verdad?

Rubius creía realmente que en el caso de ambos chicos la dichosa y popular frase cobraba sentido "los polos opuestos se atraen".

Estaba claro que el no era tan fan de el romance, mucho menos uno tan cliché como lo era el de ambos chicos.

Aquel día por la mañana luzu había despertado para seguidamente revisar el segundo paso que le indicaba aquella página web la cual aseguraba que quackity se enamoraría de él.

Paso 2: Busca excusas para hablarle.

Luzu se había puesto a pensar un segundo, ya que últimamente no tenía mucha comunicación con el peli negro.

Así que justo al salir de su casa una idea cruzó por su cabeza. Se sintió sagaz al tener aquella idea, aunque era algo un tanto obvio.

Haría que Rubius los invitará a la mina, para después dejarlos solos.

Había dos opciones de cómo podía terminar aquello, estas eran que saliera muy bien o muy mal.

Luzu sabía que quackity era una persona perspicaz, al igual que el podía serlo algunas veces, por lo que tenía miedo de que el notara en sus ojos lo enamorado que estaba.

Se estaba cuestionando tanto sus acciones últimamente, que por la noche había intentado redituar aquellos 8 pasos.

No se veía capaz de llegar al final, pero pensó, realmente pensó en lo que podría pasar si los completaba y como la pagina afirmaba el peli negro se enamorara de él.

Así que se dijo a sí mismo que por quackity, valía la pena hacer lo que fuera.

Después de un momento llegó a la puerta, de la casa del albino.

Con su puño dio dos leves golpes en la puerta.

-Pasa -la voz un tanto animada de Rubius se dejó escuchar por lo que Luzu abrió la puerta y cerró detrás suya.

-Buenas, Rubius -saludó el castaño.

-¿Pasa algo? -preguntó Rubius, al notar que el castaño estaba nervioso.

-ehhh no, quería Preguntarte ¿Si quieres ir a minar conmigo? -dijo tratando de actuar lo más normal que pudo.

-¡Claro! ¿Quieres ir ahora? -preguntó el albino.

-Si, pero- El castaño se quedo en silencio por algunos segundos -¿Puedes invitar a quackity?-una sonrisa brotó en los labios del albino.

-Hubieras empezó por ahí, Quieres minar con tu novio ¿eh?-

-No, no somos novios Rubius-escuchó como en la voz del castaño se comenzaba a notar algo avergonzada, por lo que dejó de incomodarlo.

-Venga, ahora le digo, pero el cuanto llegue me voy con Vegetta para disimular eh- dijo soltando una pequeña risa

Luzu asintió con la cabeza y salió de la casa de Rubius, para esperarlo afuera. Soltó un suspiro de alivio, aunque ahora tendría que lidiar con sus nervios estando con quackity.

Tras salir Rubius, caminaron tranquilamente hasta lo mina del albino, dónde esperarían a quackity.

Unos minutos después se escucharon los gritos del peli negro. -¡Luzuuu!¡Rubius!, Dónde chingados están- Luzu simplemente soltó una pequeña sonrisa, al escuchar a quackity.

- quackity, estamos aquí-habló el albino, mientras el mencionado se acercaba a ellos.

-¡Que onda! -dijo el peli negro al verlos.

Tranquilamente los chicos entraron a la mina.

Rubius se recargó en una de las paredes, dentro de esta, cuando Luzu paso a su lado este simplemente sonrió.

-¿Te vas Rubius?- pregunto el castaño.

Este asintió -Si, quede con Vegetita-dijo para después darse la vuelta, y salir de la mina.

-¿Cómo ha ido su día quackity?-preguntó mirando hacia el túnel que estaba minando.

-Normal, ¿Y el suyo Luzu?-

-Digamos que normal, aunque estos días no he podido dormir prácticamente nada.-le dijo mirándolo por un segundo a los ojos.

-Pues ya somos dos - dijo el de peli negro riendo.

Luzu sonrío satisfactoriamente al escucharle reír, estaba completamente atontado por aquel chico peli negro que estaba a su lado.

Continuaron minando mientras hablaban de temas random. Ambos se sentía totalmente cómodos, luzu sabía perfectamente, que quackity era una persona especial.

Sentía que los pasos estaban funcionando.

Se sentía muy feliz. Y todo gracias al chico peli negro que estaba a su lado, el lo hacía querer, reír y sentirse totalmente cómodo.

Para Luzu, quackity era un pequeño chico que repartía facilidad a cualquiera que se le atravesara. Y él quería devolvérselo.

Luzu quería cuidar de quackity como si fuera una fina pieza de porcelana. Quería ponerlo en una caja de cristal para que nadie pudiera volver a hacerle daño en su vida.

Quackity el chico peli negro. Que se ganó su corazón sin siquiera búscalo y luzu está dispuesto a hacer lo que haga falta, para ganar también el suyo.

 Que se ganó su corazón sin siquiera búscalo y luzu está dispuesto a hacer lo que haga falta, para ganar también el suyo

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Espero que les guste<3

8 Pasos Para Enamorarlo || Luckity Donde viven las historias. Descúbrelo ahora