Laura

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Ivory, Maia y Opal entraron a ver a Christine, quien aún estaba sedada, las chicas se sentaron rodeando su cama. "Chiquitita... no tiene que estar aquí" suspiró Ivory, tomándola de la mano, "Mira... tiene algo en la cabeza" dijo Opal, "Es una venda" dijo Maia revisando su cabeza, "No toquen ahí... hasta que no entre el médico" dijo Ivory, "¿Ella podrá escuchar?" Preguntó Opal, "No tengo idea...." Dijo Maia, "No se si me escucha pero... definitivamente sabe que no está sola" sonrió Ivory, conteniendo las ganas de llorar, "Debe extrañar a su Gordo..." dijo Maia, "Definitivamente debe estar pensando o soñando con el" rió Opal, "Como se quieren.... Es como esos amores de novelas" dijo Ivory, "Son como niños" dijo Maia, "Y esta niña pronto se va a despertar y va a salir caminando de aquí a la casa y seguramente va a querer irse al trabajo por que no puede permanecer quieta" predijo Opal, "Entre todas tenemos que procurar que descanse" dijo Ivory, "Suerte con eso" rió Opal, "¡Ay!" Se quejo Ivory, poniendo su mano en el vientre, "¿Que pasó?" Maia se acercó, "¡Ah! Creo que alguien ya quiere salir..." suspiró, comenzó a sentir un dolor horrible en el vientre, Opal y Maia la ayudaron a sentarse, escucharon un ruido y al voltear vieron a Christine, abriendo los ojos y balbuceando algo, las tres chillaron, Maia se sentó con Ivory ayudándola a respirar profundo y Opal se acercó a Christine "Leon... mi amor, mi amor" balbuceaba, al ver a Opal sonrió, "No soy Leon, pero también te quiero mucho chiquita" Opal la besó en la mejilla, "¿Que pasó? ¿Y leon?" Preguntó Christine, "Tuvieron un accidente en la noche y.... los dos están bien machucados la verdad pero están vivos" dijo Opal, "¡Ah!" Se quejaba Ivory, "¡Voy por Ricky y por el doctor! ¡No te muevas Christine! ¡Respira Ivory!" Dijo Maia y corrió a la habitación de Leon que estaba justo frente a la de Christine, "¡Christine despertó! ¡Ivory tiene dolor!" Dijo Maia agitada, "¡Llévenme con ella!" Dijo Leon, "¡Mi bebé!" Dijo Ricky y agarró su chamarra para salir corriendo hacia la otra habitación, Rennie y Maia sacaron a Leon de la cama con suma dificultad por la pierna enyesada y lo llevaron a la habitación, al entrar acercaron la silla a la cama, Leon la tomó de la mano, "Mi amor.... Bebote" sonrió Christine, "Hola amor..." el besó su mano, "Mira nada más... mi vida estas todo hinchado, Dios, mi bebé precioso" dijo mirando su carita, "¿Tu estas bien?" Preguntó el, "Me duele mucho la cabeza pero estoy bien... Opal fue a traer a mi médico" explicó, Ricky se acercó a Ivory, quien respiraba tratando de calmarse pero tenía un dolor horrible, "¡Hall! ¿Que pasó?" Se sentó junto a ella, Ivory Justo tuvo otra contracción que la hizo caer entre sus brazos, "¡Ah! ¡Tu hijo quiere salir!" Chilló, el la cargó y salió corriendo a buscar una camilla, Opal entro con el médico, quien revisó a Christine y le hablo de los resultados, "Es un milagro que pese a la contusión estes despierta y no estes desmemoriada o desvariando.... Eres muy fuerte" dijo el médico, "¿Entonces me puedo ir?" Preguntó ella, "Aún estás débil, perdiste mucha sangre... tienes que quedarte al menos un día más.... Para terminar con los estudios al igual que usted señorito" dijo mirando a León, "¿Entonces nos quedamos los dos?" Preguntó el, "Asi es..." afirmó el médico. Cornelius venía entrando al hospital cuando vio a Ricky pasar, "¡Bro! Are you nuts?" Se acercó, "¡Ya va a nacer mi bebé! ¡Llamen a Greg! ¡El tiene la maleta del hospital en mi auto!" Dijo Ivory, Corn salió a llamarlo, Ricky la tenía cargada y ella comenzó a llorar, "¡Me voy a morir Ricky!" Lloraba de dolor, "No, mi amor,... no te vas a morir por favor, vas a traer a nuestro hijo... si, vas a traerme a mi bebé y después podemos hacer más" sonrió coqueto, "¡Ah! ¿Pero que te pasa? Me voy a morir y tú pensando en niños" lloraba de dolor, salió el médico y Ricky entró con Ivory. Luego de casi ocho horas Ivory Hall y Richard Renn habían recibido a Reign y Romi Renn ¡Eran mellizos! La pequeña Romi estaba detrás de su hermano y en la ecografía no se había visto. A la madre la trasladaron a una habitación, Ricky fue con ella, a los peques aún no los traían, "¿Estás bien?" Se acercó Ricky, besando su frente tímidamente, "Si... aún no lo puedo creer, tengo dos, dos bebes" lloraba de emoción, "Gracias, hermosa, gracias por este regalote, dos preciosos bebés... tuyos y míos. Del amor que sentimos" sonrió el, "¿Tu me amas?" Preguntó Ivory mirándolo a los ojos, "Te amo. Como un loco... te amo desde que te vi, desde que te besé, desde que te toque... te amo Hall" sonrió Besándola dulcemente, ella acariciaba su rostro, abrieron la puerta y aparecieron las enfermeras con los gemelos, "Venga para acá mi amor" susurró Ivory cargando al Niño, Ricky cargó a La Niña, "Hola mis amores... bienvenidos al mundo" sonrió Ivory, "Es igualita a ti..." sonrió Ricky, "Este gordito se parece a sus tíos..." rió Ivory, "Mis hijos.... Mis preciosos hijos" sonrió Ricky mirándolos, "Nuestros bebés" sonrió Ivory, "Gracias, Ivory" La besó, "Te quiero Ricky..." sonrió ivory haciéndolo sonrojar a él. Los chicos habían ido a conocer a los bebés, en la noche, Christine se estaba quedando dormida cuando abrieron la puerta, ella se sobresaltó, "Tranquila, soy yo" sonrió león, ella suspiró aliviada, "¡Que susto! ¿Como le hiciste? Tienes un yeso" dijo ella, "Me tire de la cama y caí sentado en la silla y bueno... una enfermera me abrió y me dijo que no vio nada que puedo pasar la noche aquí" sonrió pícaro, "Pillo" rió Christine, "No puedo pasar una noche más alejado de ti" confesó, acercándose, ella se hizo para un lado y el se impulsó con dificultad hasta caer a su lado, se acomodó y ella lo abrazó. "Estas calientita" rió el, quien traía las manos frías, "Venga, yo lo caliento" susurró ella abrazándolo, se cubrieron con una manta enorme y se miraron a los ojos, "Tuve tanto miedo.... Cuando me di cuenta de lo qué pasó lo primero que pensé fue que te perdía..." confesó el, "Yo desperté llamándote me dicen..." suspiró ella, "Yo solo quería estar contigo... asegurarme de que estás bien, cuidarte... mi princesa, tuve tanto miedo al sentir que te perdía" suspiró, ella agarró su rostro haciendo que la mire a los ojos, "No me vas a perder mi amor... aquí estoy, estamos juntos" sonrió, "Eres mi vida... mi todo" confesó el, "Como te amo León" Christine lo besó dulcemente para dormirse abrazada a él, como si nada hubiera pasado.

Con un beso y una flor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora