Spoiler: Las heridas duelen, pero el amor lo puede todo.
Advertencias:
💎 One-short.
⚡ Universo alterno.
💎 Angst.
⚡ Drama.
💎 Fluff.
⚡ Cliché.
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Escupió la sangre mientras seguía llorando cobardemente. Eso era, un cobarde.
—Eso te pasa por maricón. —Le dijo el tipo para después darle otra patada en el estómago. Los otros dos solo se reían de lo chillón que era el rubio mientras que este solo podía desear regresar a casa para curarse las heridas de siempre.
—¿Saben qué? Ya me aburrí. —Comentó bostezando al final —Hasta para eso eres un inútil Agatsuma. —Luego de decir aquello, el trío se rió del pobre chico.
Solo lo dejaron botado luchando por pararse después de los golpes que le dieron. Ya no quería que pasara, pero desde que media escuela se enteró de sus preferencias sexuales, su vida había cambiado a un total infierno. Aún no sabe quién se los contó, pero realmente no le importaba con tal de que los golpes parasen.
Trató de levantarse pero fue inútil ya que cayó y lloró como el chillón que era por el dolor. Tenía el ojo morado y la mejilla izquierda estaba ensangrentada al igual que su uniforme. Se recargó en el árbol que visualizó y siguió llorando. No se dió cuenta que un tipo lo veía atentamente.
—Hey. —Llamó la atención de Zenitsu quién lo miró —Pareces una niñita por como lloras. Mira como tienes la cara, llena de mocos. —Se fue acercando poco a poco al menor y este se alejaba llorando porque no le hiciera nada.
—¡D-Dejame…! —Apenas y podía hablar —N-N-No me hagas nada… —Su única opción fue abrazarse así mismo y esperar a que todo pasará o que solo fuera un maldito sueño. Pero los golpes nunca llegaron; lo que recibió fue un arrebatón del cabello para que el más alto lo pudiera ver detenidamente.
—Dió mío, si que tienes el labio partido. —Dijo mientras el otro no podía contener sus lágrimas —Y tienes el ojo tan hinchado que difícilmente podría reconocer tu rostro cuando este sanara.
Zenitsu no lo entendía. ¿Vino a golpearlo o a burlarse?
—Lo que les hayas hecho a ese trío realmente les dolió por como te hirieron. —Se sinceró —Realmente siento lastima por tí —Soltó su cabello para luego pararse y caminar hacía el lado contrario. El rubio solo lo vió alejarse cada vez más.
Con las pocas fuerzas que le quedaban, se impulsó con ayuda del árbol y recogió su mochila para tomar el tren hacía su casa.
