La princesa de la mafia

8

POV Victoria

Estaba sentado en el mostrador de la cocina, comiendo un sándwich que Marcus me hizo de nuevo. Puede ser estúpido, pero de alguna manera hizo los mejores.

Ambos comenzamos a hablar y me sentí mejor con él que ayer. Me estaba hablando de programas de televisión y comida, y tuvimos una conversación agradable.

Incluso empezó a contarme algunos chistes tontos, lo que me hizo reír mucho. Marcus era tan alto e intimidante, pero en realidad era una buena persona.

Un fuerte ruido nos interrumpió. Ross y Jeff entraron a la cocina y mi risa murió; ambos estaban agitados y sudorosos, como si algo realmente malo hubiera sucedido. Sus ropas estaban sucias y sus rostros también, y parecían enfadados.

Miré a Marcus, y se veía tan serio como siempre, entonces entendí que algo malo estaba pasando.

La expresión de Ross cambió cuando me vio. Incluso en ese estado, no quería asustarme. Jadeé cuando vi que le sangraba la pierna y corrí hacia él, ¿qué había estado haciendo?

-¿Qué sucedió?-

Ross solo puso una mano sobre mi cabeza, como si no fuera nada importante.

-No es nada. Te lo explicaré más tarde, ¿de acuerdo? ¿Por qué no subes mientras me ducho? Y luego podemos ver una película. ¿Sí?- Ross dijo, agachándose un poco.

Para ser honesta, esta vez realmente me sentí como una niña pequeña. Sin embargo, una parte de mí no se quejaba, pero sabía que esto era serio, y ahora él no me diría nada.

No es como si pudiera decir algo de todos modos. Después de todo, lo conocí hace apenas un día. Pero algo se sentía diferente de él y sus hermanos, incluso si realmente no los conozco. Todos daban miedo y tenían mucha gente cerca, así que me imaginaba que eran personas muy importantes, pero también eran muy amables y divertidos conmigo. Especialmente Ross.

Sin embargo, no estaba tan seguro acerca de Jeff. Yo también quería hablar con él, pero no era el momento.

-Pero Ross, estás sangrando-, le digo, señalando sus pantalones manchados de sangre.

-Es solo un rasguño, no hay de qué preocuparse. Vamos, estaré arriba en un momento- sonrió levemente.

Sin estar convencida, volví a mirar a Marcus. Su expresión no cambió mucho, pero asintió hacia mí por ir a la habitación de Ross.

Me rendí e hice lo que me dijo: comencé a caminar escaleras arriba para esperar a que llegara. Sin embargo, realmente necesitaba tomar una siesta en este momento. Levantarse temprano en la mañana y no hacer nada más que ver dibujos animados fue agotador, para ser honesto.

De todos modos, incluso si Ross me dijera que todo estaba bien, no podía quedarme quieta y estar bien con eso. Empecé a imaginar cosas sobre cómo podía lesionarse así, y llegar con Jeff todo sucio y sudoroso.

De hecho, lo encontré extraño, y no estaba segura de que los Caruso estuvieran ganando dinero de la nada, y que también tuvieran muchos hombres aterradores trabajando para ellos.

Para ser honesta, esto me estaba molestando.

Cuando estaba a punto de entrar en la habitación, vi a Jake e inmediatamente me sentí aliviada. No pude encontrarlo antes, y la situación de un par de minutos me puso nerviosa, así que fue agradable verlo.

-¡Jake!- Sonreí.

-Hola, cariño. ¿Feliz de verme?- Él se rió.

-Te he estado buscando antes, pero no estabas allí y encontré a Marcus en su lugar- comencé, sin tratar de hacer una historia larga. -Pero luego vinieron Ross y Jeff, y Ross tenía una herida en la pierna, pero no me dijo por qué-.

Jake suspiró y pensé que me iba a decir que me fuera, al igual que los demás. En cambio, puso una mano en mi hombro y dijo:

-Mira, sé que nos acabamos de conocer, pero... nos gustas. Y a Ross, especialmente. Así que tienes que confiar en mí cuando digo que estará bien, ¿sí?-

Asentí vacilante, sintiéndome un poco mejor.

Entonces bostecé accidentalmente. No sabía que tenía tanto sueño, y deseaba que Jake no se ofendiera por eso, porque en realidad me importaba lo que decía.

-Eh, lo siento...-

Él se rió y alborotó mi cabello.

-¿Tienes sueño? Ven- fue todo lo que dijo, y luego lo estaba siguiendo a otra habitación, y no a la de Ross.

Estaba cerca de su dormitorio, y tan pronto como entramos, inmediatamente me enamoré de él. Era tan bonito como el dormitorio de Ross y tenía mucho blanco y negro.

Su cama era enorme, ¿por qué esta gente tenía camas tan grandes? También había algunos sofás cerca. Algunas pinturas y, al igual que Ross, una pantalla plana frente a su cama, pero esta era más grande.

Mi sueño era aún más notorio ahora, porque al ver lo ordenado y organizado que estaba todo, no pude evitar querer dormir aquí todo el día.

-Aquí, métete en la cama. ¿Quieres ver algunos dibujos animados?-

La idea sonaba perfecta ahora. De repente me emocioné cuando me metí debajo de las sábanas y Jake comenzó a encender la televisión.

No entró conmigo, solo se sentó en la cama y ahora estaba buscando algunos de esos programas para niños, finalmente decidió poner "Clarence". Cuando mi cabeza golpeó la almohada, sentí a Jake acariciando suavemente mi cabello. No voy a mentir, eso me tomó por sorpresa, pero realmente amaba cuando la gente tocaba mi cabello. Así como así, comencé a quedarme dormido lentamente.