C2

156 25 0
                                    

Hice un esfuerzo por moverme nuevamente, y aunque aún sentía dolor, esta vez era más soportable. Decidí aguardar pacientemente mi recuperación, consciente de que tendría que enfrentar un mundo que me veía como una amenaza. No importaba lo que este nuevo mundo me deparará, no permitiría quebrantarme. Estaba decidida a cambiar las cosas aquí, tal vez no pude cambiar nada en mi vida pasada, pero aquí... no tendré piedad.

Volví a analizar mi entorno, acomodando mi cuerpo suavemente en la cama. El dolor era insoportable, pero hice un gran esfuerzo para hacerlo, soportando el dolor. Levante mis mangas y vi las cicatrices en mi piel. Ya lo suponía, esos desgraciados.

Hiruzen, entró en la habitación y me abrazó con fuerza, parecía aliviado de verme bien. Sin embargo, el más mínimo contacto me provocaba un intenso dolor, como si todos mis huesos se estuvieran rompiendo.

- Duele - logré decir mientras el dolor me consumía. Hiruzen se apartó rápidamente.

- Naruto, ¿estás bien? - preguntó preocupado, ¿Como se suponía que estuviese bien? Acaban de golpearme.

- Sigo sintiendo dolor en todo el cuerpo. - respondí - ¿Puedes darme un espejo, jiji? - Quería estar 100% seguro.

Lo vi abrir uno de los cajones y me entregó el espejo.

-  Gracias - Dije mientras tomaba el espejo entre mis manos.

No había dudas, estaba en el cuerpo de Naruto, aproximadamente a los 6 años. Las marcas en mi rostro y cuerpo eran evidencia de la brutalidad que Naruto había sufrido a manos de los aldeanos. Pude sentir la mirada curiosa de Hiruzen sobre mi, pero no se atrevió a interrumpirme.

- ¿Pasa algo, Jiji? - pregunté, no me gustaba que me mirasen y por tanto tiempo.

- No, claro que no. Solo me preguntaba, ¿por qué pediste el espejo? - respondió con una sonrisa.

-Quería asegurarme de que mi rostro no estuviera completamente desfigurado - contesté mientras sostenía el espejo con mis pequeñas manos temblorosas.

- Je, claro que no lo está. Yo me encargaré de que eso no suceda - dijo.

- Gracias, Jiji - sonreí.

- Disculpen que interrumpa - Uno de los médicos entró, pude sentir la mirada hostil que me dio -  El niño ya está bien, el dolor en su cuerpo es temporal y  se pasara en dos días, ya puede irse del hospital.

Ni siquiera es capaz de llamarme por mi nombre.

- Gracias - Fue lo único que pude responder, pero se muy bien que todo lo que dijo es mentira.

Necesito descanso, eso es seguro. El dolor sin duda habría dejado inconsciente a un niño normal, pero yo no soy un niño normal, en realidad no estaba seguro que era ahora y Naruto no es uno normal. Hice un esfuerzo inhumano y me levanté para irme, no quería quedarme aquí, en especial con personas que me quieren asesinar.

Se perfectamente que estoy en un mundo alternativo, donde muchas cosas sucedieron de manera diferente. Por ejemplo, los seres que se hacen llamar mis padres, Minato y Kushina, seguían vivos. Por mis recuerdos me enteré que tenía dos hermanos, quienes eran tratados como héroes mientras que yo, fui abandonado y condenado a vivir como el Kyubi, ridículo, totalmente ridículo.

Hiruzen había alquilado un apartamento para mí, un lugar apartado donde podía vivir en paz. Al parecer se dio cuenta de lo horrorosa que estaba siendo mi vida, pero... ¡¿No podría haberme llevado con él?! ¿Quién en su sano juicio deja a un niño de 6 años solo en un apartamento?

En fin, hay muchas cosas que no entendí del mundo de Naruto y muchas otras que no tenían sentido. En la serie original termine odiando o simplemente pensando que podrían haber sido mejores entre ellos Hiruzen, Sakura, Kakashi, Danzo, los del consejo. Siento que tener un apellido de un clan es muy importante, al igual que poder y dinero. Este mundo, no es tan diferente del que vivía.

Y si estuviera en mi mundo dirían, seguro que odias a Sakura por ser débil o solo porque golpeaba a Naruto, en parte tienen razón. Pero, más que eso, termine odiando a Sakura por su carácter y por creerse la mejor siendo la más débil y ustedes dirán Hinata también era débil, si ¿la diferencia? Que Hinata se esforzaba por ser mejor para ayudar a Naruto y ella confiaba que Naruto llegaría lejos. Si, se que Sakura mejora, pero todo el mundo mejora con los años, (hay excepciones).

Con lo de Hiruzen fue más bien fue porque abandonó a Naruto a su suerte, ¿Cómo se supone que un niño pueda manejar su dinero? Si ni yo misma puedo manejar bien mi dinero, se me dificulta organizar mis gastos y eso que ya soy  mayor. 

A Kakashi, no fue porque no adoptó a Naruto, para ese entonces él también sufrió un chingo, más bien fue por que vi que realmente no entreno bien a Naruto y Sakura, digo, muchos otros de los senseis enseñaron más a sus estudiantes y los entrenaron mejor. Además, el hecho de que sufrió en parte por la muerte de sus compañeros fue en gran parte su culpa, aún así, entreno a Naruto, pero solo cuando se fue Sasuke y no quiso entrenarlo para los exámenes chunin por que se  iba a entrenar a su grandioso Sasuke, dis' que son iguales.  Lo único en el que son iguales es que usaron el chidori con uno de sus compañeros, ¿la diferencia? Naruto no murió.

Los demás creo que ya tiene idea del por qué. Termine de ponerme la ropa y antes de salir Hiruzen me tomo de la mano.

- Es para que no te pierdas - aseguró - y no te escapes.

- De acuerdo - Sinceramente hay muchos motivos por la que considero buena idea escaparme ahora, aunque no seria mala idea.

Una de las razones principales sería que podría vivir en paz, pero no es momento. Si me tengo que ir de esta aldea será haciendo que medio mundo caiga a mis pies. 

Salimos del hospital y grande fue mi sorpresa cuando los vi, la familia Uzumaki Namikaze jugando en el parque. Hiruzen sujeto mi mano más fuerte y me saco lo más rápido de ahí, creo que quería evitar que me lastimaran o simplemente me ignoraran y yo me sintiese mal. 

- Jiji, ¿Qué pasa? - Pregunte. Por ahora, vamos a fingir inocencia.

- Solo quería que lleguemos lo más rápido - me respondió fingiendo una sonrisa - Es que hoy se estrena un nuevo ramen

- De verdad? Ya quiero probarlo. - Dije avanzando.

- No tan rápido, que puedes caerte - Dijo, mientras trataba de mantener mi ritmo.

MI VIDA EN NARUTO (REESCRIBIENDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora