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- ¿No parezco una amenaza?-

- No, solo que me distraje-

- ¿Una diosa te habla y tú te distraes?-

- Espera, nos estamos precipitando-

Shirou alzó sus manos, no tenía intenciones de combatir ni de enfrentarla, pero ella no respondía de la misma manera.

- Mash, Fujimaru, llévense a Olga, yo me encargo-

Sentía que no podía evitar el enfrentamiento por lo que debía de asegurar a su Master inconsciente y ponerla a buen recaudo, pero no podía hacerlo el mientras lidiaba con la diosa.

- Puedo ayudar-

Decidida Mash levantó su escudo, pero Fujimaru detuvo su avance.

- Él estará bien, confiemos en su fuerza-

Se miraron por breves segundos, la chispa de la duda en sus pupilas parecía no apagarse, pero la fuerte voz del héroe interrumpió el momento.

- ¡Vayan a donde tengan que ir!-

Shirou proyectó un arma y una joya las cuales lanzó a Fujimaru.

- Usa la joya en Olga, la espada es para su protecc...-

Lo inevitable se desató.

La Diosa empezó a lanzar ataques y con su aeronave se desplazaba de lugar en lugar por los cielos, atacando desde decenas de puntos.

[Habilidad Especial]

Rayos de luz eran disparados con fuerza. El aire temblaba ante su solo disparo y el impacto creaba grandes nubes de polvo.

Varios de los ataques eran esquivados, pero otros que amenazaban a sus compañeros eran bloqueados con espadas que aparecían y desaparecerían en cuestión de segundos.

Quiso ver que tan lejos estaban, pero la mirada de reojo le costó caro.

La diosa dejó su aeronave y con su cuerpo giro de tal forma que su patada lo mando a volar decenas de metros.

- ¿Un sacrificio?. Que Noble‐

Volaba con confianza y no parecía dejarle oportunidad ya que quería rematarlo de alguna manera. Lanzaba ataques continuos que eran detenidos por armas y escudos proyectados a prisas.

- Quería que esto fuera a solas Rin‐

Shirou no sabia porque ella estaba ahí, al menos su cuerpo ya que ella había demostrado ser alguien con una personalidad completamente diferente a Rin.

- ¿Rin?, te equivocas de persona, yo soy Ishtar diosa de la belleza y gobernadora de Venus. Témeme y haz lo posible para satisfacerme con tu sumisión y reverencia-

Ishtar dijo algo normal para ella, pero para su afán el Servant en frente suyo no hizo caso a su advertencia, en cambio parecía empezar a pelear de verdad. Sus circuitos mágicos empezaron a retumbar con fuerza y más armas se proyectaron a su alrededor.

- Un mago...-

- Soy Emiya Shirou, Servant de Chaldea clase Saber y te pido disculpas por confundirte-

Quiso inclinarse en muestra de respeto, pero nuevos rayos de luz lo forzaron a moverse.

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???
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Dejó reposar su espada en una piedra y dejó caer su cuerpo en la roca que tenia una apariencia similar a un sillón y sin perder de vista el combate empezó a hablar.

El Rey Del FraudeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora