•Limerencia•The Umbrella Academy▪FivexT/N▪

-19- La sombra y el rumor

T/N

- ¿Quieres oír música? -preguntó Alisson, supongo para llenar el silencio-.

- Claro -respondí con una media sonrisa-.

Encendió la radio, recargué mi cabeza en la ventana, Alisson conducía en medio de la lluvia por la carretera, teniendo en mano la dirección del posible paradero de Harold Jenkins.

- ¿Hay algo de lo que podamos conversar? -preguntó nuevamente-.

- ¿Como el peligro en el que nos metemos intentando buscar a un homicida? -solté sin mirarla-.

- O la razón de que se haya acercado a Vanya para hacernos daño -hizo una pausa- A mis hermanos y a mí -aclaró-.

- Sea cual sea esa razón, ese homicida está con Vanya -suspiré- Y es capaz de lastimarla -.

- ¿Te preocupas por Vanya? -preguntó casi sorprendida-.

- Me agrada, además, las amigas siempre se cuidan y apoyan en situaciones así -respondí con seguridad-.

- Pues me alegra venir contigo, un viaje en carretera sería agradable si el mundo no estuviera a punto de desaparecer -sonrió levemente-.

- Nunca hice un viaje de carretera, pero cuando salvemos al mundo, podríamos salir entre chicas -le propuse un poco nerviosa-.

- Sería genial -respondió tranquila-.

Pienso en demasiados planes para después de salvar al mundo, nisiquiera estoy totalmente segura de que podamos lograrlo, me mantengo optimista, pero debo prepararme para lo peor.

[...]

Five

Desperté con un irritante sonido de una campana no muy lejos, Klaus entró a la habitación con una campana considerablemente grande.

- ¡Hermano querido! Reunión familiar en la cocina -anunció y se fue sin más-.

Me senté en la cama aún adolorido, busqué a Lucecita, apenas noté su ausencia, me levanté confundido por el tiempo que pasé inconciente.

Encontré una pijama en el clóset, me cambié el uniforme con sangre y bajé a la cocina cuidándome de no abrir mi herida otra vez.

Klaus servía café a Luther, apenas vi el café se lo arrebaté a Luther y me senté en la mesa.

- ¿Donde están los demás? Diego, Alisson, la pequeña T/N, los hermanos, ¿nadie vendrá? -se quejó Klaus-.

Me llamó la atención del hecho que T/N no estaba, tampoco Liam y Anthony, quise pensar que ella descansaba en otra habitación o estaba desayunando, me equivoqué.

Probé el café e hice una mueca de asco, el café sabía terrible.

- Di lo que tengas que decir de una vez Klaus, no hay tiempo -me quejé-.

- Bien lo diré -se aclaró la garganta- Ayer, hablé con nuestro padre -soltó-.

[...]

Las cosas habían llegado al punto que Pogo salió a desmentir lo que creía eran alucinaciones de Klaus.

Papá se había suicidado, Pogo y mamá lo ayudaron y ocultaron el secreto para unirnos de nuevo, por alguna razón no me sorprendió eso de él, pero aún así debía pensar las cosas.

Me teletranporté a mi habitación, decidí vestirme y pensar lo que haría ahora, no sin antes salir a buscar a mi lucecita.

[...]