Melodías del Corazón (en proceso)

Capítulo 1

*Amy en multimedia*

************

— ¡Ya estoy harto de esto! —, exclama molesto el rubio al lado mío.

Ya perdí la cuenta de las veces que lo ha dicho desde que estamos en esta habitación, sin hacer nada. Pero no es el único que también lo está, todos lo estamos. ¡Ya no aguanto más!

— Eso ya lo sabemos Kyle —, contesta la pelinegra tumbada en el piso —. Llevas quejandote desde hace medio hora. Así que, cállate ya.

— ¡Pero es que no lo aguanto más! —, vuelve a exclamar molesto —. ¡Quiero salir de aquí, joder!

-Kyle, cállate de una vez por todas-, ordena el peliazul desviando su mirada del teléfono —. Siéntate y espera callado hasta que regrese Scoot.

El rubio iba a protestar, pero fue interrumpido por el sonido de la puerta siendo abierta y seguidamente por ella entran dos personas. Un chico alto, cabello castaño, ojos azules, piel clara, usando una camisa blanca, pantalones y zapatos negros. Una chica bajita, cabello corto oscuro, ojos marrones, piel morena, con un vestido azul hasta las rodillas.
Cuando ambos llegan hasta nosotros nos miran seriamente, logrando ponernos nerviosos. Él chico se aclara la garganta antes de hablar:

— Chicos, ya hablé con...

— ¿Nos van a dejar ir? —, lo corta un desesperado Kyle.

— Si, sobre eso... —, lo vuelve a cortar con otra pregunta.

— ¿Sí o no?

— Si me dejaras terminar te lo diría —, lo reprende. Cuando hace un ademán de hablar, Scoot habla antes —. Cómo les iba a decir antes de ser interrumpido —, mira de reojo al rubio —. Estuve hablando con ellos, tratando de convencerlos y no fue nada fácil. Pero finalmente llegamos a un acuerdo —, hace una pausa —. El acuerdo es que sus vacaciones serán solo por 3 meses y cuando regresen tendrán que trabajar duro para un nuevo álbum...

No termina de hablar cuando es interrumpido nuevamente, pero está vez por nuestros gritos y aplausos. Todos estamos felices y eufóricos por el descanso que nos consedieron por fin después de trabajar sin parar durante casi 6 años. Sin duda necesitamos estás vacaciones. Aunque serán cortas, pero es mejor que nada.

******

— ¿Estás segura que no quieres venir? —, pregunta Kiara desde el baño —. Será divertido.

— Si estoy segura. Además, tengo ganas de ver a mis hermanos, a mi madre, a Mike y a mis amigos —, digo y Kiara se lleva una mano al pecho —. Tú también eres mi amiga. Pero a ti te veo todos los días y a ellos los extraño.

— Si sobre todo extrañas a tu querido padre. Estoy segura que se pondrá tan feliz que empezara a dar saltos —, dice con sarcasmo —. Te llenará la carta de besos, te abrazara, te...

— Que graciosa eres.

Ella suelta una risa, mientras empiezo a hacer mi maleta. No llevaré tantas cosas, tal vez no sea bien recibida en esa casa y tenga que ir a otro lugar. Aunque no sé a dónde. Suelto un largo respiro.

— Oye, todo estará bien. No tienes porqué pensar tanto-, me dice con una sonrisa— . Sí algo pasa, sabes que puedes contar conmigo.

— Si lo sé, gracias—, le respondo con una sonrisa sincera.

Después de hacer nuestras maletas cada una se metió en su cama. No pude consiliar el sueño al principio debido a los pensamientos que tenía en mi cabeza. Pensé en como estará Mike, mis hermanos, mis amigos, mi madre y ...mi padre.

Cerca de las 3 de la mañana por fin logré dormirme, y eso que tenía que despertar a las 6 am.

******

Hace media hora estoy en el aeropuerto esperando la llamada para poder abordar el avión con destino a New York.
Mentiría si dijera que no estoy muriendo de los nervios, no sé cómo reaccionarán cuando me vean llegar o qué pasará cuando vea a mi padre. Sin poder evitarlo muerdo una de mis uñas, que estoy segura que si Kiara estuviera me golpearía la mano.

Necesito un café para calmarme.

— Señorita, ¿está bien? —, pregunta mi guardaespaldas Travis, seguro notando mi nerviosismo.

— Si, estoy bien —, le sonrió —. No pasa nada —, hablo tratando de sonar segura. Travis asiente no muy convencido, pero en vez de insistir me trae un café. Le agradezco y me lo bebo.

Permanecemos unos minutos hasta que nos llaman para abordar. El vuelo dura aproximadamente 8 horas y 12 minutos, las cuales aproveché para dormir algo. Cuando bajamos del avión, un hermoso atardecer nos recibe. Sin perder tiempo empezamos a caminar hasta la salida con toda la gente a nuestro alrededor, y algunos de ellos se detienen a mirarme o tratar de reconocerme.
De un momento a otro un grupo de periodistas aparecen frente a nosotros haciendo muchas preguntas que se me es díficil de entender lo que dicen.

— Por favor señores, háganse a un lado —, habla fuertemente Travis, haciendo que algunos se asusten y se alejen, mientras que otros continúan con sus preguntas inentendibles.

En un intento de escapar, decido correr y alejarme de ellos lo antes posible. Cuando estaba por llegar hasta la puerta decido voltear hacia ellos, y en eso me estrello con alguien y caigo al piso, no sin antes derramar sus café en su camiseta y encima mío.

¡Que magnífica bienvenida!

******
Nota:

Y aquí tienen el primer capítulo de esta historia, espero que sea de su agrado. Y si lo es, háganmelo saber con su voto y comentario.

Sin nada más que decir nos vemos en el próximo capítulo. Bye.

Besos💕
Dori N.