Melodías del Corazón (en proceso)

Capítulo 3

*Olivia en multimedia*

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En el momento que presionó el timbre del portón, este se abre inmediatamente revelando el camino hacia la puerta que lleva al interior de la casa.
Tomo una respiración profunda antes de caminar con nerviosismo y manos sudadas. Cuando llego a la puerta me debato en tocar el timbre o dar la vuelta y volver, pero no hace falta decidir porque está se abre revelando a una chica vestida como parte del servicio quien me recibe con una sonrisa amable antes de hablar.

—Buenas tardes, señorita— saluda educadamente—. Los demás invitados ya llegaron, seguro la es tan esperando a usted—me informa con amabilidad. No sé de qué invitados está hablando, así que me quedo callada sin emitir palabra alguna. Ella se aclara la garganta—. Adelante, pase— se hace a un lado para dejarme pasar.

Aún sin poder hablar entro al lugar. Ni bien pongo un pie dentro, miles de recuerdos llegan de golpe a mi mente, entre momentos de felicidad, travesuras, vergüenzas, risas, llantos y gritos. Me quedo estática observando cada rincón con melancolía sintiendo una opresión en mi pecho por todas las cosas que se atraviesan por mi cabeza.
La voz de la chica de servicio pidiendome que la siga me saca de mi ensoñación. Dando una última mirada, decido seguirla hasta la sala de estar.

En cada paso que doy para llegar, voy sintiendo como mi corazón late desesperadamente en mi pecho. Debes calmarte, todo va a estar bien. Me repito una y otras vez para tranquilizarme, pero no tengo éxito.
Cuando estaba por llegar me detengo ha 10 metros de ellos para observarlos. Los repaso a cada uno con la mirada, hasta que se chocan con unos ojos iguales a los míos, que me miran con sorpresa e incredulidad plasmados en ellos. Sin previo aviso se levanta del sillón rápidamente y corre hacia mí para envolverme en un abrazo lleno de cariño, que correspondo de igual manera. Me concentro en aspirar su aroma y abrazarlos más si es posible.

—¡Amelie!—escucho que una conocida voz chilla mi nombre, seguido de eso siento más brazos a mi alrededor.

«Y tú que te preocupaste en vano»

No sé cuánto tiempo duramos abrazados, pero cuando nos separamos veo que cada uno tiene una gran sonrisa y ojos llorosos. Inevitablemente les devuelvo la misma sonrisa.

—No puedo creer que estés aquí, peque— habla Adam, mi hermano—. Te extrañe tanto— vuelve a abrazarme, y cuando se aleja me da un beso en la frente.

Una pelirroja se acerca con una gran sonrisa en la cara para envolverme en otro abrazo—. Te extrañe como no tienes idea— me dice antes de separase—. No vuelvas a dejarme nunca más— me mira molesta cuando lo dice, pero rápidamente es sustituida por una sonrisa—. Aunque si te vas otra vez, promete llevarme.

—Prometo que te llevaré conmigo esta vez, Oliv— le respondo. Ella asiente convencida— ¿Y ustedes no me van a decir nada?— pregunto a la castaña y al pelinegro que estan callados.

El chico me mira detenidamente antes de aclararse la garganta para hablar—. Ash y yo estamos molestos y disgustados contigo por llegar sin antes avisar— hago un ademán de responder, pero se adelanta—. No digas nada. Hubieras avisado para preparar tu bienvenida.

—Oh vamos, Zack. No digas mentiras— habla la pelinegra y luego dirige su mirada hacia mí—. Que bueno que volviste Amy, estoy muy feliz de verte. Te extrañe muchísimo— dice con estusiasmo mientras me abraza.

Cuando Ashley se separa, me acerco a Zack para abrazarlo. Se contiene al principio, pero termina abrazándome con tanta fuerza que al momento de alejarse me deja sin aire.

Después de esa pequeña pelea y  decirle a Travis que se fuera dejar mis cosas al departamento que rento para mi, nos sentamos todos a  hablar sobre lo que pasó, hicimos y lo no hicimos durante estos años separados. Ellos me cuentan sus cosas, algunas de ellas son divertidas y vergonzosas que me sacan carcajadas. Y yo les cuento un poco acerca de las giras, grabaciones de canciones, secciones de fotos, entrevistas, firma de autógrafos, colaboraciones con cantantes o bandas y todo lo que conlleva ser una estrella. También les cuento acerca del trato que hizo nuestro manager con la disquera.

—Wow, todo lo que dices es interesante— dice una  sorprendida Ashley—. Yo no pudiera con todo eso. Mucha presión para mí gusto— hace una mueca.

—No todo es tan malo— ellos me miran con una ceja alzada—. Bueno lo es al principio, pero terminas  acostumbrandote— digo antes de beber mi jugo—. Por cierto, ¿por que estaban aquí reunidos?, ¿dónde está mi madre, Jay y Mike?— pregunto luego de tragar el líquido.

—Madre está su agencia de modelaje viendo no sé qué— informa Adam en un encogimiento de hombros— Jay y Mike salieron de viaje hace 4 días, creo que llagan mañana o pasado. Y el porque estamos aquí es debido a que el hermano de Ash viene de visita— dice antes de llevarse una patata a la boca.

Junto mis cejas en confusión por lo último que dijo. Me volteó hacia mí amiga— ¿Tú tienes un hermano?— pregunto confundida—. ¿Y porque no sé de él?, Si te conozco desde los 8 años.

—Si te lo dije, pero supongo lo olvidaste—aclara—. Y llegará en cualquier momento— dice, y se lleva un vaso de jugo a sus labios.

—Si es que se digna regalarnos su magnífica presencia— habla con burla Liv.

Continuamos hablando de cosa sin importancia y burlandonos de lo que dice Zack. Hasta que escuchamos pasos viniendo desde la entrada. Todos nos volvemos hacia las tres personas que acaban de  llegar.
Los tres chicos son guapísimos, pero solo uno me parece conocido de algún lugar por los bonitos ojos que puedo ver. Aunque no recuerdo dónde lo ví.

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Nota:

Aquí tienen el tercer capítulo de está historia. Y como siempre no se olviden de dejar su ⭐ y su comentario que me animaría mucho en seguir subiendo mas capítulos.

Sin nada más que decir, nos vemos en el próximo capítulo.

Besos 💕
Dori N.