Capítulo 8: Osvaldo
Osvaldo Cruz siempre fue un hombre que hacia todo lo que se supone que debe hacer una "buena persona" (o por lo menos, lo que se supone que debe hacer una buena persona según sus padres), era educado, amable, respetaba las leyes al pie de la letra, iba a la iglesia, ayudaba a los demás, no bebía, no fumaba, era un trabajador responsable, era buen padre, buen marido, un amigo de esos de los que siempre podías contar en las buenas y en las malas.
Se supone que si eras así de bueno, el mundo sería igual de bueno contigo....Lamentablemente no fue así para Osvaldo.
Su jefe siempre se aprovechaba de él tratándolo casi como "su chico de los mandados", sus vecinos se burlaban de él y su vecino más cercano nunca le devolvía las cosas que le prestaba y para su familia, él nunca era suficiente o se burlaban de él (y eso sin contar con los rumores que decían que su esposa lo engañaba con prácticamente todo el vecindario). Mientras más amable Osvaldo era, más el mundo parecía querer darle una patada directo a los dientes.
Fue hasta que hace un par de meses atrás, el mundo dio una vuelta de 180°. Ese día inicio normal, con sus niños reclamándole que no los ama lo suficiente para comprarles el nuevo celular, cuando escucharon los gritos de afuera.
Lo siguiente fue muy confuso, muertos persiguiendo a sus vecinos, ríos de sangre y gente con mala puntería que tenían más posibilidad de dispararse a sí mismos que de darle a algún muerto viviente.
¿Cómo sucedió? ¿Virus del gobierno?, ¿ovnis?, ¿demonios? Eso Osvaldo nunca lo supo, lo único que tenía claro era que debía elegir entre subir a su familia al auto y conducir como loco hasta el punto seguro donde "supuestamente" habría militares listos para proteger a los civiles o esperar en casa con puertas y ventanas tapiadas, esperando a que los rescaten.
Cuando el elogio la segunda alternativa, sinceramente esperaba que su familia se quedara en vez de salir corriendo al patio del vecino que nunca devolvía las cosas, para subirse en su auto junto con él y su familia. Y menos espero Osvaldo que ellos lo dejaran despertándose dentro del auto familiar , atado con cinta adhesiva y con la música a todo volumen en el garaje abierto, usándolo de distracción (Ya debió adivinar que aquella sopa que ceno tenía un sabor extraño)
Por suerte la batería de su auto se acabó y los zombis sedientos de sangre y ansiosos de carne fresca, se distrajeron pronto con los gritos de gente en otros lugares, dejándolo inmóvil durante horas en aquel auto hasta que unos tipos armados en una camioneta decidieron liberarlo y dejarlo ir con ellos, llevándolo hasta una mansión fuertemente reforzada que ellos de un modo que nunca explicaron, lograron "pedir prestada al dueño" para poder llevar a los sobrevivientes que se encontraban. No eran militares, más bien parecía un grupo "cliché" de supervivientes como los que salen en las películas de terror, ir con ellos era mejor alternativa que quedar atrapado en su auto hasta que la inanición o deshidratación acabaran con él.
Osvaldo nunca supo lo que le paso a su familia y vecinos luego de que lo abandonaron a su suerte, solo supo que en una de las rondas de búsqueda de supervivientes, se encontró un auto con características similares en las que huyeron sus "seres queridos", completamente vacío pero con señales de daños y sangre seca en los asientos. Si Osvaldo siente dicha por la muerte de quienes lo traicionaron o dolor por que a pesar de todo eran su familia y vecinos de toda la vida...Esa información, Osvaldo se la reserva para si mismo.
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Historias de Apocalipsis Zombie.
HorreurDistintas historias en una misma ciudad, ¿se relacionaran en algún momento?, ¿Quién sabe?