A veces, siempre

Tiempo al tiempo

Un paso a la vez; se encuentra a la vuelta de la esquina, pero aún así no puedo verlo.

¿A qué le llamamos éxito?

Confiere muchas cosas y suele ser subjetivo la mayor parte del tiempo.
Para algunos es formar una familia.
Para otros el reconocimiento.
El dinero suele ser siempre la opción más frecuentada para muchos.

Y a veces me pregunto...
¿Qué es el éxito para mi?

Para mi es despertarme todos los días con la dicha de poder oir los pasos de mis padres resonando al otro lado de mi puerta, sabiendo que cuando no estén al menos tendré el honor de haber podido guardarlos en mi mente.

Es poner música a todo volumen y bailar como si nadie me estuviese viendo, cantar como si nadie me oyera.

Es caminar y sentir el viento haciendo desastres en mi pelo tan enredado mientras disfruto de una buena compañía o la tranquila soledad, que a veces no está tan mal.

Es hablar con esa persona tan especial, que a pesar de la distancia suele sacarme más sonrisas que las personas que frecuento y se encuentran a mi lado; oir su voz, sus palabras como huracán arrasando en mi interior y causando caos, mi lindo caos.

Es mantener mis sueños intactos contra viento y marea. Luchar y no permitir que se interpongan en mi felicidad, esperando llegar algún día y decirme a mi misma "valio la pena". Girar y a pesar de haber dejado tantas cosas atras y sufrido tantos vacios que no se llenaban, o tantos espacios ocupados por personas tan vacías no arrepentirme de nada.

Y sobre todo aprender a vivir conmigo, aprender a perdonarme, a darme una tregua y no ser tan dura con lo que siento, vivo o decido. Porque a pesar de cometer tantos errores, reconocerlos me hacen ser diferente. Reconocer también no haberme dado mi lugar como alguien de valor, recompensada por el tiempo con alguien que sí lo hizo por mi. Dejar de ridiculizar y desestimar mis sentimientos, mis gustos y mis deseos esperando la aprobación de personas que no vivirían mi vida.

Porque es mi vida, yo decido por ella. Decido vivir; y aún en los peores momentos decido levantarme.
Decido oir; mi corazón tiene mucho que decir y eso también importa.
Decido reir; no privar a las personas del poder que tiene una sonrisa para sanar el alma.
Decido creer; porque los sueños no vienen solos, y creer en ellos me hace más fuerte.

Para mi el éxito es tener el poder de decidir vivir, y aún al caer, querer resurgir.