Demasiado virgen. [NOMIN]

Cap 13.

La letra de la canción es un spoiler de la trama de este cap 🤭.
Disfrútenlooooo.🔥

Siendo las 10:15 de la mañana, Jaemin fue el primero en despertar.
Se acomodó mejor en la cama para observar a su dormido novio, se reflejaba paz en su rostro y su respiración era tranquila.
En el rostro de Jaemin se dibujo una media sonrisa, su amado era perfecto, lo hacía tan feliz que no le importaba nada más en el mundo que permanecer siempre a su lado, quería contemplarlo así todas las mañanas, quería despertar con sus brazos rodeándole o despertar con un beso suyo.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por Jeno, quién despertó, Jaemin solo cerró sus ojos nuevamente y finjio seguir durmiendo.

-Amor, te atrapé mirándome. No finjas que estás dormido -habló con voz ronca y adormilada.

-¿Fue muy profunda mi mirada que logró despertarte?

-Me estabas abrazando de más, ¿Tanto te emociona verme dormir?

-Es la primera vez que dormimos en mi cama siendo novios. Quién no se va a emocionar despertando con tan perfecta imagen

-Eres tan lindo, cariño -dejó un beso sobre la frente de Jaemin.

-Ya debe ser tarde, vamos, hay que aprovechar el día juntos, Jen

-Bebé, tenemos mañana y pasado, sigamos durmiendo -pasó uno de sus brazos por debajo de la cabeza de Jaemin, con su otro brazo lo rodeó por su espalda y echó una de sus piernas sobre las de su novio.

-Amor, eres pesado -dijo Jaemin riendo.

-Solo duerme un poco más

-Tengo hambre Jen

-¿De verdad tienes hambre Nana? -se separó un poco para mirarlo.

Jaemin sabía que diciendo eso Jeno se levantaría, lo cuidaba y procuraba en exceso.
Diciendo que tenía hambre, su novio iría a conseguir comida para él.

-Sí, anda, vamos a cambiarnos para ir a desayunar

-Esta bien precioso, tú ganas está vez, sólo porque tienes hambre -no queriendo lo soltó y dejó que Jaemin se levantará.

-Iré a ducharme yo primero. ¿Puedes tender la cama cuando te levantes?

Cómo respuesta Jeno le dió un sentimiento con su cabeza y una sonrisa.
Él hacia todo lo que su novio pidiera.

Una vez que ambos ya se habían duchado y arreglado, salieron de la casa para conseguir su desayuno. Llegaron a un restaurante cercano y cada uno ordenó lo que más les agrado, platicaron, rieron e hicieron una que otra broma entre ellos mientras comían.
Jeno pago lo que habían consumido y salieron de aquel lugar.

-Vayamos al supermercado a comprar algunas cosas para cocinar juntos

-Nana, ninguno de los dos sabe cocinar

-Para eso están los tutoriales amor, vamos.

-No creo que los tutoriales sirvan. Pero, ¿ya tienes pensado qué vamos a preparar?

-Tú te encargarás de la comida, yo haré el postre

-¿Has preparado alguna vez un postre, Nana? -dijo casi riéndose.

-¿Me ves cara de qué sé hacer postres?

-No, en lo absoluto

-Pues para eso son los tutoriales, tontito

-No confío en un tutorial, eso no asegura que las cosas nos saldrán bien

-Ya verás que sí, amor. Anda vamos