Llegamos a mi casa y pedimos la pizza, y unos roles de canela, claro.
"¿Y tus hermanas y mamá?"
"Salieron"
"Solos de nuevo..."
"Tienes suerte"
"Sí"
"Em... Me refiero que tienes suerte al no conocerlas..."
"Oh" sí, oh "¿por qué dices eso?"
"Son insoportables"
"No lo creo"
"Pues créelo. Si lo son"
"Una vez que hablábamos me dijiste que habían personas que decían que ustedes se parecían"
"A eso me refiero, son igual de insoportables o incluso más de lo que lo soy yo"
"No eres insoportable"
"Oh, vamos, sabes que sí"
"Yo te soporto"
"Pero eres... Tu"
"¿Y?"
"Eres demasiado bueno, Harry"
Y él solo se quedó callado.
"Encendamos la tele"
"Claro" le dije tirándole el control de la televisión.
Harry estuvo pasando los canales sin dejar nada como por veinte minutos, en lo que vino la pizza.
La recibimos y pagamos rápidamente, teníamos demasiada hambre que nos pudimos haber comido el uno al otro.
Empezamos a comer y Harry dijo que traía una película.
"Qué. O sea, estuviste pasando los canales "buscando" que ver y yo viendo todo como estúpido, esperando a que el señor Styles dejara algo y ugh. Eres lo peor."
Sí, lo sé, fue estúpido. Pero yo soy estúpido y no lo sé, simplemente lo dije. Me levanté del sofá y me fui arriba, él solo se quedó ahí, estupefacto, impresionado, no lo sé. Entré al baño y me estuve casi media hora ahí, pensando en cuánto la había cagado. En qué le diría después, en todo. Cuando ya estaba más calmado, bajé, pensando que Harry se habría cansado e ido, para mi sorpresa ahí estaba, mirando al suelo, serio. Cuando me escuchó levantó su mirada y me sonrió. Fue de las sonrisas más bonitas que te pueden dar, y me sentí tan mal y tan bien porque a pesar de haber actuado totalmente mal él estaba ahí... Pero eso ya no pasa ahora. Y duele.