Tan cotidiano.

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De lunes a viernes todo es igual me despierto bien temprano a las 5 para poner al boiler y me vuelvo a acostar, como 10 minutos después se levanta mi padre y siempre me despierta con todo su ruido, él se baña y yo oigo cada gota de agua que cae y ya no puedo dormir, como siempre sale de bañarse y se mete a su cuarto a vestirse. A las 6 yo salgo a bañarme y mi padre se va al trabajo, me baño pensado que es otro día... otro día igual de cotidiano de simple, me seco y entro a mi cuarto levanto a mi hermano para que se vista y yo también, "tal vez debería ir desnudo a la escuela para variar" pienso como siempre, pero nunca lo haría es una broma sin chiste para mí mismo. Después de un rato salgo a desayunar, lo que quizá sea lo único que varía en mis mañanas el desayuno, pues no siempre es lo mismo a veces solo es café y otras huevos revueltos con un café o cosas más enteras depende de mis ganas de cocinar, mi madre sale ya vestida a apurarnos porque ya es tarde para ir a la escuela.

Como todos los días se nos hace tarde a mí y a mi hermano nos reclama el subdirector de la escuela y nos deja pasar, veo a mis imbéciles amigos de siempre con su típico "llegas tarde como siempre " como odio esa maldita frase yo solo les doy una sonrisa falsa, el día sigue con las clases y los odiosos profesores que como quisiera que todos murieran, aguanto a mis amigos con sus tonterías veo a la chica que lo pudo cambiar todo pero... solo lo empeoro hizo de mi vida simple y cotidiana a triste y cotidiana, pasan las horas y con ellas la escuela en la salida me veo con mi hermano y nos vamos a casa. Cuando llegamos no hay nadie y tengo que cocinar como siempre, comemos aburridos, bueno al menos yo sí, huso mi pc hasta que llegan mis padres y me pongo a hacer tarea, veo televisión con los mismos estúpidos programas antes de irme a mi cuarto donde oigo las tonterías de mi hermano antes de dormir, como todos los malditos días de mi maldita y jodida vida tan cotidiana.

Me rio de mí mismo hasta casi ahogarme, mientras estoy en el frente de mi casa y la veo como se quema al mismo tiempo que oigo sirenas de camiones de bomberos y lo mejor de todo los gritos de mi familia agonizante quemándose vivos...

Y yo solo puedo pensar mi vida jamás volverá a ser tan cotidiana.

Cuentos cortos y reflexionesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora