Groenlandia, base secreta de la KGB
-¡En posición, ya!
El general Stelyenko gritó con irritación, causando que el grupo de niñas pegaran un chillido de terror mezclado con impotencia. Las pequeñas se alinearon a cabeza gacha tal y como les habían instruido días atrás para quedar justo frente a la entrada principal de aquel enorme y elegante estudio de danza mientras le daban la espalda al inmenso espejo tras ellas.
Todas llevaban puesto un maillot de ballet negro con mangas cortas, medias blancas, y zapatillas negras de media punta. Mientras que su cabello estaba meticulosamente peinado hacia atrás y recogido en un moño bastante pulcro que dejaba a la vista la pureza de sus rostros infantiles.
-Ven lo sencillo que es seguir mis órdenes y más vale que ninguna se atreva a levantar la mirada ante la presencia de Madame B o de su nueva institutriz si no quieren que un lobo devore sus entrañas al igual que sucedió con su estúpida amiga René.
El ruso bufó molesto y a la vez sonrió satisfecho cuando unas de las niñas más pequeñas del grupo esbozaron un puchero y comenzaron a sollozar muy silenciosamente para no hacerlo enfadar más. Habían entendido el mensaje y todas ellas sabían que aquella madrugaba habían tenido otra baja. Una niña más había perdido la vida en un intento absurdo por escapar.
-¡Espalda recta y guarden silencio! No quiero errores.
Stelyenko gruñó y avanzó al umbral de la gran entrada cuando los tacones de Anya se hicieron escuchar por el pasillo. Fue grande su sorpresa cuando al asomarse no solo se encontró con la deslumbrante belleza de la rubia sino también con la de su estoica y nuevo arma letal.
Anya venía colgando del brazo de la pelirroja con demasiada seguridad mientras ella solo asentía a su parloteo incesable. La rubia la había vestido con leggins negros, zapatillas de media punta y una camiseta blanca sin mangas que dejaba ver el top deportivo color gris que llevaba debajo. A diferencia de las niñas, Natasha llevaba el cabello trenzado de lado y ni un solo pelito fuera conseguía verse.
-Señoritas, que alegría me da verlas... No sabía que Neshka nos honraría con su presencia también.
Stelyenko hizo una reverencia y se inclinó ligeramente para tomar la mano de Anya y depositar un beso sobre el dorso de su mano, causando que la mujer rodara los ojos y sonriera.
-No podíamos esperar un día más. Mi querida hermana moría por conocer a sus nuevas estudiantes. ¿No es así Neshka?
Anya detuvo su paso con Natasha de su lado mientras ella asentía en silencio y observaba cada detalle a su alrededor. El sentimiento de haber vivido algo muy parecido en algún punto de su vida la tenía con un ligero dolor incrustado en su cabeza.
-Lo es sestra...
Natasha respondió sin expresión alguna para después ladear su cabeza a su izquierda cuando un ligero sollozó escapó de la boca de una de las niñas.
-Lo felicito general... Ha hecho un trabajo maravilloso...
Anya soltó satisfecha, entró al estudio y sonrió al percibir como los cuerpos de las niñas temblaban por el miedo que sentían ante su presencia. La rubia soltó el brazo de Natasha y caminó a pasos determinantes para posicionarse justo en frente y quedar a tan sólo unos cuantos pasos de ellas.
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🕷THE WIDOW🕷
FanfictionLos vengadores habían sufrido un terrible quiebre desde el núcleo después de que las diferentes creencias y opiniones relacionadas a los acuerdos de Sokovia dividieran al equipo. Steve Rogers se había vuelto un fugitivo de la justicia junto a Sam, W...