Amor en el lago [kth + jjk]

009

Tos, tos y tos era lo único que se escuchaba luego de un rato de solo haber profundo silencio.

—Dios, al menos sé que sigues con vida, por todos los cielos ¿Qué haría sin ti? —habló Jungkook intentando que el príncipe Kim se sentara para poder botar toda el agua que había tragado.

—¡Él! ¡El tipo...! —tos nuevamente, Tae se tuvo que hacer a un lado para poder respirar pero seguía tosiendo.

—Tae, Tae, tranquilízate por favor... Intenta respirar. —el de cabello corto golpeaba suavemente la espalda del contrario para que volviera a respirar de forma normal.

Segundos después pudo respirar con normalidad y ahí fue cuando se dio cuenta que el tipo que lo quería matar estaba frente a él amarrado a una silla con la boca tapada dentro de la casa de Jungkook.

—¡¿Qué hace este aquí?! —exaltado el príncipe se levantó de la cama de Jungkook y volviendo a toser otra vez con el de cabello corto yendo detrás de él para calmarlo, simplemente lo golpeó en el rostro recibiendo una queja del prisionero debido al golpe justo en el ojo. —¿Por qué no lo mataste? —cuando Tae había visto uno de los cuchillos de Jungkook detrás de la persona se tiró directo a este para poder asesinarlo él mismo, al ver Jungkook lo que quería el contrario, tomó las manos de Taehyung llevándolas hacia atrás para que se calmase y el príncipe casi al colapso sin aún poder respirar bien, sin pensar claramente intentó forcejear hasta que Jungkook sostuvo su rostro para que lo pudiera ver.

—Tae, cálmate ¿Sí? No lo maté porque eso no es lo que hacemos, ¿De acuerdo? —habló con voz tranquila para que el príncipe se concentrara y calmara. —Además... Necesitamos información de él ¿O no? Quién lo mandó, cómo te encontró, por qué estaba solo... ¿No queremos saber por qué te quieren muerto o no? —susurró acariciando con cuidado la mejilla del príncipe y aquel toque fue lo que necesitaba.

—Está bien... —suspiró el príncipe cerrando sus ojos y volviendo a respirar profundamente sonrió abriendo sus ojos para poder ver al de cabello corto. —Pero, conste que igual merece una golpiza. —Jungkook suspiró ante las palabras de Tae y lo soltó con cuidado para sentarse frente a la persona amarrada, aparentemente un hombre de la misma edad de ambos.

—Comenzaremos con el interrogatorio. —Jungkook se mantenía sentado en una posición algo intimidante incluso para el príncipe Kim, este en cambio se mantenía detrás del dueño de casa, pero parado para reaccionar por cualquier cosa, también quería verse intimidante así que se amarró el cabello como pudo y lo analizó con cuidado desde los pies hasta la cabeza. Todo era piel de animal y algunas hojas de árbol seguramente de camuflaje, su cabello castaño claro y con una pequeña cicatriz cerca de su ojo. —Te quitaré la venda y nos dirás todo si no quieres morir, ¿De acuerdo? —con cuidado se acercó y le quitó la venda de la boca que lo mantenía sin habla al prisionero, Tae se pudo fijar que tenía labios finos y rosados, tal vez moreno, pero estaba con la cara llena de tierra que no podía definir bien su tono de piel.

—¿De verdad creen que les diré información? Par de enfermizos... —con ello tiró un escupo hacia el frente donde estaba Jungkook, intentó mantener la calma, pero inmediatamente un golpe en el rostro fue el que recibió por el comentario, volvió a escupir el desconocido esta vez hacia el lado con sangre, y un diente fue todo lo que pudo ver Tae al momento de mirar hacia el suelo.