O 1 (愛)

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Desperté en lo que parecía ser una enfermería y en general lo que parecía ser.. ¿howarts? ¿Hogwarts? Todavía no me había acostumbrado al nombre del sitio ya que el inglés no era mi lengua natal, era el español ya que mi madre era de allí, no le hizo demasiada gracia que mi padre me cambiara de institución, pero necesitaba amigos nuevos y gente nueva con la que relacionarme, Beauxbatons no era del todo para mí ciertamente.

Una voz me sobresaltó, sacándome al instante de mis pensamientos, por lo que parecía era el director junto un hombre vestido completamente de negro.
—Ya despertaste, Sina, nos alegramos de que estés bien—. Dijo el hombre de pelo y barba blanca.
—Si—. Es lo único que pude responder.
—Fue muy imprudente por parte suya y de su padre venir en escoba hasta Hogwarts—. Dijo por fin el otro hombre de pelo negro, serio.
—Lo sé, no se repetirá—. Estaba indiferente ante la situación.
—Verás, Sina, cómo sabrás yo soy Albus Dumbledore, antiguo amigo y compañero mago de tu padre—. Dijo el hombre empezando a presentarse.
—Sí, mi padre ya me hablo de usted, es un honor estar delante del mismísimo Dumbledore, pido disculpas con el incidente del bosque, un dementor me interceptó y me hizo desviarme, a partir de ello, solo recuerdo hasta hace un rato—.
El hombre parecía serio pero a la vez sorprendido, mientras que su compañero seguía con su fría mirada puesta en mí.
—Dado a su caso tan excepcional, y como está recuperada gracias a la sta. Pomfrey, esta noche el sombrero seleccionador elegirá una casa para usted y se integrará con los de 4to año—. Hizo una pausa y siguió hablando.
—Su uniforme ya está listo, y su varita ha sido revisada y se encuentra en buen estado. En cuánto pueda cámbiese, afuera le esperará el profesor Snape, el se hará cargo de usted, sin más que añadir, hasta dentro de unas horas, Sina—. Dijo el mayor y se retiro en silencio.
Miré al profesor Snape en silencio, el observaba la ventana, sin objetar ni una sola palabra.

Mi varita era detallada en el mango, de madera de pino y saúco, mezclada con escamas de serpiente y una pluma de pegaso.
El uniforme consistía en una túnica, una falda negra y una camisa blanca, una corbata y zapatos y calcetas altas, supongo que al ser revelada mi casa cambiarían de color.

2 horas después...

Me vestí y prepararon mis cosas para dejarlas después de la selección, en mi respectiva casa, por lo que había leído anteriormente antes del viaje, había 4 de ellas, Slytherin, Gryffindor, Hufflepuff y Ravenclaw. Realmente me interesaba bastante ravenclaw y Slytherin, ya había leído de ellas mucho antes de mi traslado, incluso del niño que se salvó del señor tenebroso, Voldemort, al que hacían llamar Harry Potter. Pero ahora no era momento de pensar en ello, ya qué, antes de que pudiera levantar la cabeza había un pequeño grupito de Gryffindors observándome, cosa que cuándo capté mi atención en ellos, salieron corriendo ante haberse visto descubiertos por "La chica del bosque" o así me habían nombrado un minuto atrás.
El profesor Snape me interceptó y se puso a mi lado, mirándome de reojo, caminando a mi unísono.
Pasamos unos cuántos pasillos y pasé al lado de los Slytherins que iban dirección al gran comedor, uno que otro me dedicó una mirada, algunos cruzando los dedos para que yo fuera la siguiente en entrar en aquella casa dónde la ambición predominaba. El que más me llamó la atención fue un chico alto, de cabellos rubios y piel perfecta, que me dedicó una fugaz mirada para después continuar hablando con los que parecían ser sus amigos, nos adelantaron a paso rápido y dejamos de divisarlos por los pasillos.

Habíamos llegado por fin a la puerta del gran comedor, cosa que hacía sentirme entre nerviosa y emocionada, no sabía cómo reaccionaría la gente al llegar así de repente...

Las puertas se abrieron.

Un gran silencio llenó la sala.

The last chance. DLM Donde viven las historias. Descúbrelo ahora