Capítulo 2

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Recomponerse costó, pero pudo hacerlo. Con los ojos hinchados, la cabeza explotada y la presencia de Zayn.

El encuentro fue tan sorpresivo que lo agarró con la guardia baja y emocionalmente débil a causa de su reciente celo.

Ver a Harry otra vez fue...

Suspiró.

Harry siempre lo hizo sentir la persona más importante en el mundo. Su trato dulce, su melodiosa voz profunda y sus sonrisas brillantes eran los causantes de tantos años de felicidad en la vida del omega. Fantasías de emparejamiento, boda y cachorros habían colmado la mente de Louis por tanto tiempo que lo cegaron a la realidad frente a él.

Por eso era tan difícil verlo con Will. En especial cuando todo sucedió justo después de la muerte de sus padres.

Ahora solo deseaba que su amigo fuera feliz, pero que lo hiciera lejos de él para que Louis pudiera rehacer su vida como lo estaba haciendo. Vivir con la constante prueba de no ser su compañero no era algo que él deseara, por mucho que lo amara.

"¿Qué harás entonces, pequeño?"

Se pasó la noche entera pensando en la pregunta de Zayn.

Podía volver a huir, aún tenía días de vacaciones que podía utilizar. Podía evitarlos, desaparecer durante el tiempo que estuvieran en Londres y ganarse, esta vez definitivamente, el resentimiento de su mejor amigo por el resto de su vida.

O podía poner su mejor sonrisa y utilizar el poco tiempo que pasarían en la ciudad para... ¿despedirse?

Eso sonaba demasiado dramático, pero todo se reducía a disfrutar de los días con el alfa hasta que volvieran a Doncaster y Louis pudiera seguir adelante.

Decisiones, decisiones.

Zayn le había insistido que pidiera trabajar desde casa ese día, alegando estar recuperándose de su celo y así lo hizo. Su novio no tuvo que convencerlo. Se quedó en el departamento del moreno, sin querer volver al suyo. El aroma del hogar de Zee le ayudó a su omega a afrontar el día. Él le dejó su notebook personal y pasó la mañana ocupando su mente en tareas laborales.

De todos modos no pudo salvarse de los pensamientos.

Mientras realizaba los pedidos de su jefe, su mente divagaba en la reunión del día anterior. Toda la tarde estuvo cubierta por un manto de tensión. Comentarios filosos de William, miradas intensas de Harry mezcladas con su aroma a café y chocolate y suaves apretones de Zayn que lo ayudaron a sobrellevar todo el encuentro.

Era claro que ambos alfas se detestaron al instante, lo que fue una sorpresa. Zayn era de las personas más geniales que había conocido nunca. Y Harry fue siempre experto en hacer amigos en donde fuera, mas las miradas irritadas y los fugaces destellos rojos de ambas partes duraron toda la merienda.

Fue exactamente por ello que no esperó el ofrecimiento de Zayn.

Harry estaba enfermo.

El omega de Louis lloriqueó, al igual que el día anterior al recordarlo.

La noticia fue un baldazo de agua fría. Sí, no quería verlos ser una pareja feliz y arraigada frente a él, pero eso no significaba que no les deseara felicidad. Demonios, él amaba a Harry igual de intensamente que lo hacía en el momento que se fue. Deseaba que fuera feliz, solo que no quería estar allí para verlo y sufrir en consecuencia.

Que los doctores que había visitado no pudieran encontrar el problema, ponía a su mejor amigo en una seria y peligrosa situación. Perder la conexión con su contraparte animal era una pesadilla para todos.

Solo Tú | Larry |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora