Capítulo 35 - El árbol quiere estar quieto pero el viento no para

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¿Un hombre como Li Yi quiere fundar una escuela? ¡Qué broma! Shen Yanbei no pudo evitar fruncir el ceño.

"Tío Zhong, ¿qué es todo esto?"

Tras dar una calada a su tabaco seco, el rostro de Shen Dezhong se alargó: "Esta mañana temprano, alguien me pidió que fuera a la aldea de Li para una reunión. Cuando llegué, vi que el jefe de la aldea y los jefes de las aldeas cercanas estaban todos allí. El jefe de la aldea me miró y me informó del asunto con una sonrisa en la cara, diciéndome que volviera y le dijera a la gente de la aldea que recogiera el dinero de la cuota".

Los ojos de Shen Yanbei se mostraron ligeramente fríos: "¿Se han puesto de acuerdo todas las demás aldeas?" No había ninguna escuela en sus pueblos, ni siquiera una escuela privada. Después de todo, sólo había tres o dos eruditos con mérito, los más viejos habían fallecido, y los más jóvenes eran el propietario original y Li Yi. Los padres del propietario original habían muerto en un accidente, y él ni siquiera podía cuidar de sí mismo y era tan orgulloso que ni siquiera pensó en abrir una escuela privada, mientras que Li Yi estaba tan preocupado por los exámenes de otoño que nadie mencionó el asunto de abrir una escuela. Li Yi, que había ganado el examen imperial, tuvo la idea de hacerlo.

Shen Yanbei fue el primero en no creerle cuando dijo que era un buen maestro.

"¡No!" Cuanto más pensaba Shen Dezhong en ello, más furioso se ponía: "¡Un hombre ha ganado el camino y las gallinas y los perros han subido al cielo! Ahora, ¿qué pueblo no tiene en alta estima a ese Li Jiao Ren?" Dicen que es una reunión, pero ya lo han discutido, ¡así que sólo te dicen que vayas! Si no fuera por el dinero, no te lo habrían dicho.

¡Lo peor es que tienes que pagar tu parte aunque no estés contento!

Otros jefes de aldea han dicho que tener una escuela es algo bueno para el país y el pueblo. Es una forma de enseñar y formar a la gente, de cambiar el destino de las futuras generaciones de pobres. Debemos trabajar todos juntos para crear la escuela y allanar el camino a las futuras generaciones.

¿Qué más puede decir?

Si la escuela se instala en la aldea de Li, ¿la aldea de Li intimidará a los hijos de mi Shen? ¿O es que el director de la escuela teme que sea parcial con los alumnos del pueblo de Shen y no les enseñe lo mejor posible? ¿O es que mi pueblo no está dispuesto a pagar para que se construya la escuela en el pueblo de Li?

Si realmente dices eso, la gente sólo dirá que eres muy estrecho de miras, y el pueblo de la familia Li se encargará de reprimirte y aislarte.

"No te enfades, tío Zhong, aún puede haber espacio para darle la vuelta a este asunto". Shen Yanbei arrugó el ceño y dijo. A diferencia de las escuelas privadas, en las que un alumno ocasional o un estudiante infantil podría ser el maestro de la ilustración de un niño. Los requisitos para las escuelas públicas en esta época eran muy estrictos, y la escuela debía tener dos profesores, uno de literatura y otro de artes marciales.

Shen Dezhong agitó la mano, resignado en su corazón. El tribunal aboga por la enseñanza y la educación de las personas, y ha dictado una disposición explícita para que el gobierno local apoye la organización de las escuelas. La aldea de la familia Li tuvo el valor de recaudar fondos públicamente, por lo que parecía algo seguro.

El mayor dolor de cabeza para él ahora era que no sabía cómo hablar con los aldeanos para que estuvieran dispuestos a poner el dinero.

Shen Yanbei guardó silencio. Era obvio que esto no era bueno para su pueblo, pero no tenían derecho a oponerse y no podían hacerlo.

MFMH (PROYECTO TERMINADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora