El octavo día del noveno mes, cuando la anciana de la Casa Su cumplía 60 años, la Casa Su organizó un banquete.
A primera hora de la mañana, Shen Yanbei y Gu Changfeng se dirigieron lentamente a la residencia de los Su.
La residencia de los Su estaba seguramente llena de gente hoy, y era un gran honor para gente pequeña como ellos poder ir a disfrutar de una comida allí. Su Qingze no tenía tiempo para entretenerlos, y no tenían intención de quedarse mucho tiempo, así que sólo tenían que mostrar su agradecimiento cuando llegaran.
Llegaron a la residencia de los Su justo a tiempo. El sonido de los carruajes y los caballos, los gritos de los criados y las risas de los invitados se entremezclaban en un ambiente festivo y animado.
Los regalos de felicitación fueron entregados al mayordomo de la puerta, que les invitó amablemente a entrar, e inmediatamente un muchacho y una doncella se presentaron para indicarles el camino.
Los hombres y las mujeres tenían asientos diferentes, y a Shuang'er se le asignó el lado de las invitadas. Shen Yanbei miró a Gu Changfeng y dijo en voz baja: "Volveremos cuando hayamos comido los fideos".
Gu Changfeng asintió, diciéndole que no se preocupara por sí mismo. Shen Yanbei le estrechó la mano y siguió al chico hasta el vestíbulo del patio exterior, mientras Gu Changfeng seguía a la sirvienta por la puerta iluminada por la luna hasta el otro lado del jardín.
En el jardín, se había montado un escenario alto en el espacio abierto, en el que los actores balbuceaban y cantaban, mientras que debajo del escenario, damas nobles exquisitamente maquilladas se agolpaban en torno a la anciana cumpleañera, la Vieja Señora Su, un grupo de personas que no sabían de qué estaban hablando, pero todas ellas se pellizcaban los pañuelos y se tapaban la boca de risa.
El jardín se llenó de mujeres y niños, el aire se llenó del dulce aroma de los polvos, los anillos y los colgantes, los vestidos y las faldas.
Gu Changfeng no estaba acostumbrado a una ocasión así y sacudió la mano bajo la manga con contención, siguiendo a la sirvienta con la espalda recta y los ojos sin pestañear para felicitar a la anciana.
"Que seas tan bendecido como el Mar del Este y vivas más que la Montaña del Sur".
Entre la multitud de mujeres y niños delicados, destacaba el alto y robusto Gu Changfeng. Desde el momento en que se acercó, atrajo muchas miradas curiosas.
"¿Este hombre de ...... es un niño doble? ¿Cómo es que parece tan duro como un hombre?"
"Sí, ¡mira el grosor de su cintura! Mira qué aburrido es su lunar de embarazo, ¿puede dar a luz?"
"¿Está casado?"
......
Con un vestido rojo festivo con hilos de oro y plata bordados con la palabra fortuna, y una frente de color oscuro con perlas adornadas con flores, la vieja señora Su levantó ligeramente los ojos y vio que era Gu Changfeng, y dijo en tono indiferente: "Tienes corazón". Tras decir eso, agitó la mano con impaciencia y le dijo a la sirvienta que bajara a los demás.
La madre de Su Qingze, la señora Wei, que estaba sentada a un lado, frunció un poco el ceño, pero se trataba del banquete de cumpleaños de la anciana, así que aunque no estuviera contenta con la actitud de la anciana hacia el mejor amigo de su hijo, sólo podía guardarlo en su corazón.
La cara de Gu Changfeng no cambió mientras caminaba con la sirvienta hasta el final de la mesa y tomaba asiento.
Los invitados al jardín eran ricos o nobles, o bien miembros de familias oficiales o hijos de familias famosas, y como marido de una erudita estaba tan atrasado que sólo podía colocarse en el extremo más alejado de la mesa de la vieja cumpleañera.
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MFMH (PROYECTO TERMINADO)
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