Capítulo 34 - Quiero ayudarle

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"¿Qué estás haciendo aquí?"

En cuanto Shen Yanbei entró por la puerta, vio a un joven de cara carnosa en cuclillas en el patio de su casa, que alimentaba a su conejo con una hoja de verdura.

Sonriendo a Shen Yanbei, Su Qingze dijo: "Salí a pasear con mi familia y por casualidad me encontré con el hermano Gu, así que fue el destino el que nos encontramos. El hermano Gu me invitó a tomar un vaso de agua".

Al lado, el rostro de Ming An se endureció mientras sonreía.

¡Joven maestro! Usted es la que se pegó a su marido cuando lo vio y lo siguió hasta su casa, ¿verdad?

Shen Yanbei no se molestó en exponerlo y entró directamente en la casa.

Shen Yanbei se lavó las manos y trajo una pequeña silla para sentarse a su lado y acompañarlo.

"¿Por qué dejaste que alguien te siguiera a casa?" Conocía a su esposa, si no había una razón, aunque la otra parte fuera blanda, su esposa no dejaría entrar a un extraño en su casa.

Los ojos oscuros de Gu Changfeng estaban llenos de seriedad: "Quería ayudarle". No había nada que pudiera hacer con su aspecto, pero un adolescente era diferente.

Cuando se encontró con Su Qingze de camino a casa hace un momento, su cara estaba enrojecida y sudorosa, pero aun así insistió en seguir caminando, estaba tan ansioso que estaba al borde de las lágrimas, instándole a descansar un rato antes de caminar. Pero el chico dijo que no podía ni siquiera caminar esos pocos pasos, así que ¿cómo podía hablar de construir un cuerpo fuerte?

Vio de lejos que el joven estaba tan cansado que no podía levantar los pies, pero no se quejó en absoluto y sus ojos claros estaban llenos de determinación.

Su esposa no era de laos que tomaban la iniciativa con entusiasmo, e incluso tomar a Zhou Yu como alumno había sido cosa suya. Si su esposa podía decir tales cosas, lo más probable es que fuera porque pensaba lo mismo, pero Shen Yanbei no creía que fuera una buena idea.

"¿Quieres ayudarle porque su cuerpo ha sido objeto de miradas extrañas por parte de los demás? Pero si alguien le gusta de verdad, no le importaría lo alto, bajo, gordo o delgado que sea". Aunque primero se había encaprichado de la figura de su esposa, había muchos cuerpos en el mundo que hacían hervir la sangre de la gente, pero sólo un alma interesante. Aunque su esposa no fuera feroz en este momento, no diría que no le gusta y se interesa por otra persona.

"No soy yo". Los ojos de Gu Changfeng estaban serios. Él mismo tuvo la suerte de conocer a Shen Yanbei, pero Su Qingze no tuvo necesariamente la misma suerte que él.

Leyendo el significado oculto en sus ojos, Shen Yanbei tiró las verduras a la cesta y giró la cabeza para mirarle: "Por supuesto que no es usted, pero aunque resulte ser como usted, no me gustará".

"Sólo me gustas tú". Conocer a Gu Changfeng fue la mayor suerte de su vida.

Su rostro se calentó ligeramente, Gu Changfeng bajó los ojos y dijo suavemente "mmm".

Shen Yanbei no pudo evitar reírse: "No tengo ningún problema con que quieras ayudarle, pero es muy poco, es sólo un cuerpo delgado, ¡le enseñaré!" La otra parte era de origen desconocido, y no quería que los conocimientos de su esposa sobre artes marciales quedaran al descubierto. En cuanto a cómo perder peso, lo había visto muchas veces en el gimnasio, siempre había un método que se adaptaba a la otra persona.

En el patio, Ming An gritó: "¡Joven maestro, volvamos!" Lo lamentó. No debería haber sugerido seguir a su tía para visitar el campo cuando vio al joven maestro enfurruñado. Si no hubiera venido, no habría conocido a este shuager, ¡el joven maestro no habría molestado a alguien para que le enseñara a hacer ejercicio!

MFMH (PROYECTO TERMINADO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora