Armanway

Capitulo

(Dibujo de : SUGOI.UWO)

Disclaimer: Ningun personaje relacionado con esta historia me pertenece, sino que a sus respectivos creadores Reborn_Live (Conway), Focus (Armando), Momonkunn (Volkov) Auron (Gustabo) y Perxita (Horacio)

Conway, Jack Conway, exacto, el mismísimo superintendente al que conocen por su cara dura, insultos y rumores. Se encontraba en su despacho, con papeleo que revisar, obviamente no iba a echarle un ojo a esas mierdas, se lo iba a dejar a un comisario que no estuviera de servicio para que se llevara la sorpresa.
Pensó en volkov, quien se encontraba fuera de servicio debido a que llevaba desde la 1am ocupándose de códigos 3 o simples mierdas. Hasta conway le ordeno que se fuera a casa a descansar y que volviera al día siguiente.
Eran las 8pm y Conway se encontraba en el despacho de Volkov con mucho papeleo que agarraba con sus dos manos. Delicadamente lo dejo en la mesa, habia dos montones, dejo uno a la izquierda y otro a la derecha ya que no podía juntarlos todos por la altura; se caería enseguida.
Salió sonriente colocándose las gafas y ajustándose la corbata.
Al bajar a la planta de abajo se encontró con la Paqui, como no siempre diciendo las mismas tonterías.
-A ti yo te quiero en mi cama comiéndome to' el coño Conway- dijo la vieja dirigiéndose hacia el superintendente mientras se arreglaba un poco para estar presentable
-Vete a la mierda, vieja- soltó Conway antes de salir por la puerta

Ya fuera empezo a tomar el aire. Era un dia tranquilo y eso no era muy normal, ya que solían haber atracos, secuestros y muchas mierdas más que el superintendente no soportaba.
Lo único que le gusta era que los delincuentes robaran la joyería, pues era mejor que una puta peluquería. Exacto, peluquería.. solían robar quien sabe que de alli y luego hacían persecuciones de mierda que cualquiera diría que un niño de 7 años lo haría mejor que aquellos inexpertos.

Sacó un cigarro de su bolsillo derecho del pantalón, tanto pensar le daban ganas de fumar y relajarse despejando sus pensamientos para consumirse en el silencio y tranquilidad que aquel lugar transmitía. Lo encendio con el mechero y se lo llevó a los labios mientras miraba atentamente la gente que pasaba al rededor de la comisaría, al igual que la que entraba allí dentro para los mismos motivos de siempre : Denunciar y hablar.

Termino de fumar, tiro el cigarro al suelo y lo aplastó.
Acto seguido que puso a pensar otra vez.. con razón por la noche le costaba dormir.
Hacia mucho que nadie hacía una manifestación y agradecia aquello, pero prefería dejar de pensar en eso por por acabso ahora ocurría.

De repente un coche apareció. De ahí salió un mecánico; llevaba un mono rojo un poco manchado de tanto trabajar.

Al principio pensaba que iba a pasar de largo, pero a medida que aquel hombre avanzaba se daba cuenta de que iba hacia su dirección.
Conway se cruzo de brazos fulminandolo con la mirada.
-Buenas, Conway, verdad?-Le ofreció la mamo para estrecharsela, pero Conway rechazó.
-Que quieres?- Pregunto con un tono amargado y cara de pocos amigos
-Vengo a denunciar a un policía que ha alterado a mis clientes, ha comenzado a gritar e insultar sin más porque todavía mis compañeros no le atendían debido a quehaceres que eran requeridos de importancia- Aclaro el mecánico de la forma más diplomatica posible, no quería dar mala impresión.
-Quién es el policía que osaba perturbar a tus..clientes?- Dijo con una pizca de sarcasmo.
-Tenía el pelo rubio, parecía ser un novato, creo que se llamaba Gustabo..con b de bombón.. como el aclaró.-Dijo mientras se rascaba la nuca algo pensativo
-Y tu quien coño eres? -Pregunto desviando la mirada hacia otro lado, no le interesaba lo más minimo el problema de aquel mecánico y menos su identidad, pero ya que estaba, por que no preguntarle a ese gilipollas?
-Mis disculpas, me llamo Armando, el jefe de los mecánicos. -sonrio un poco tratando de hacer contacto visual con el contrario.

Armando. Juraba haber oido ese nombre antes, pero no se acordaba de cuando ni donde. Tal vez en el taller o en la comisaría

-Conozco a ese tal Gustabo y hablaré con el del tema..no sé preocupe, no volverá a tocar los cojones- dijo tratando de terminar la conversación, pues tenía cosas más importantes que hacer que hablar con un mecánico