Donde el Joven Jeon aprovecha que su padre no está para hacer al sirviente Kim Taehyung suyo.
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- Jungkook es top, Taehyung Bottom.
- Aviso de e...
Jungkook había llegado al edificio de su padre, donde la secretaria del lugar le saludó cordialmente y después de pasar por la verificación para entrar, subió al ascensor para llegar a la oficina del CEO, el señor Jeon.
Allí lo recibió el secretario personal del padre de Jungkook, haciendo una reverencia como saludo y con papeles en una mano.
—Bienvenido, joven Jeon, pase por favor —y le dio permiso para que Jungkook pudiera sentarse frente a él.
—Y bien, ¿Qué es eso tan importante por lo que estoy sentado aquí ahora?
El secretario le explicó que los papeles que tenía debía leerlos todos porque por órdenes de su padre debía firmar un contrato que aliaba su empresa multimillonaria con otra de igual nivel y posicionamiento en el mercado, una que el señor empresario Park, padre de dos hijos, llevaba a cargo.
Jungkook se sorprendió al ver que su padre había decidido compartir el control de dos grandes y reconocidas empresas millonarias, y empezó al leer los papeles.
El secretario se retiró dejando a Jungkook hacer su trabajo en la oficina, lo que no sabía el joven Jeon era que en realidad su padre comenzaba a prepararlo para tomar su cargo en un futuro, uno donde él viajaría por el mundo y dejaría a su único hijo llevar el control de la gran empresa de los Jeon.
Largas horas pasaron y Jungkook seguía revisando y firmando los documentos de su padre, se sentía cansado y agotado pero debía terminar, el trabajo dejado por su padre era muy importante.
Por fin solo quedaba una última hoja que rellenar para volver a su casa, releyó una última vez el documento y escribió su firma en el papel.
Satisfecho de haber culminado, Jungkook se levantó para estirar sus músculos y miró la hora; casi las 10 de la noche y no había cenado, apenas se había llevado algo para comer como almuerzo horas atrás, su barriga sonó y supo que era hora de volver a casa.
Dejando todo ordenado, cerro el ordenador que usó para completar su trabajo y dejo su lapicero a un lado, caminó hacia la salida y cerró la puerta detrás de él. Se despidió del secretario, del hombre que lo atendió y bajó por el ascensor del edificio.
Salió y buscó su auto, que había dejado estacionado, uno de lujo y negro, su "bugatti la voiture noire", al cual llamaba bat por el parecido al famoso batimobile de bátman en las películas.
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Prendió el auto, tomó asiento y arrancó rápidamente, dio la vuelta y se puso en marcha por la carretera camino a casa.
Jungkook amaba ese auto, iba a tal velocidad que nadie podía pasarlo, llegó a su mansión en lo que cantaba un gallo y estacionó en su cochera automática, donde guardaba más de sus "bebés" como decía, para referirse a sus autos de lujo.
Entró por la puerta principal de la casa y caminó por los pasillos pensando en coger algo para comer, tomar una ducha y dormir plácidamente en su cama.